Buscan relevar datos para cuantificar la sequía tomando como base los datos registrados en 2019
En los próximos días se pone en marcha una campaña que recorrerá las nacientes de la cuencas del río San Juan y del río Jáchal. Buscan relevar datos para cuantificar la sequía tomando como base los datos registrados el año pasado. La NASA hizo una alerta mundial de la sequía en toda Sudamérica y advierte de la necesidad de medidas urgentes para los países involucrados.
Según la información oficial, un equipo interdisciplinario conformado por personal del Departamento de Hidráulica (DH), el Observatorio Ambiental (OA) de la Secretaría de Estado de Ambiente y Desarrollo Sustentable y el Gabinete de Geocriología, Glaciología, Nivología y Cambio Climático (GGNyCC) de la Universidad Nacional de San Juan, realizarán la novena campaña de aforo y monitoreo de calidad de agua en los ríos de cabecera de las cuencas de los ríos San Juan y Jáchal.
Se trata de un trabajo que tiene singular importancia en medio de la sequía histórica que vive toda Sudamérica y que afecta con mayor intensidad a nuestros ríos de Alta Montaña de San Juan, sin que hasta la fecha se hayan puesto en marcha medidas de contingencia que permitan encarar esta situación de manera mas efectiva.
Solo vale mencionar un dato: Hace un año, en noviembre del 2019 en la estación de aforo que el DH tiene en el km 101 del río San Juan, midió el caudal más bajo registrado desde los inicios de aforos del río en el año 1909.
Las intenciones oficiales son trabajar en un plan que permita saber primero cuál es la realidad de nuestros ríos de cabecera, cómo se comportan con el trascurso del tiempo y qué opciones de adaptación habría.
El planteo viene muy atrasado respecto a lo que otras jurisdicciones del país vienen adoptando como en las provincias de Mendoza, La Rioja o Jujuy, donde ya tienen gestionados ante el Banco Mundial (BM), o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), líneas de créditos especiales para afrontar la pandemia y que están en sintonía con lo que hace un año atrás hizo Chile que dispuso la inversión de 6000 (seis mil) millones de dólares para enfrentar esta situación.
No se conoce tampoco si el trabajo sanjuanino tiene en cuenta los resultados que ya están entregando los 2 satélites argentinos “Saocom 1A- y 1B”, que gracias al trabajo conjunto entre la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) , desarrollados y fabricados por la empresa INVAP, en conjunto con investigadores del INTA se propuso que uno de los objetivos principales de trabajo sea relevar el agua disponible en los suelos, los impactos en la sequía en las distintas regiones del país, a los efectos de potenciar el desarrollo de políticas públicas sobre agricultura, humedales y bosques.
Nuestros dos satélites tienen la particularidad de contar con radares especiales que son capaces de medir la humedad del suelo. Con esta información es posible relevar información de la sequía en el país, planificar medidas de gobierno y hacer más eficiente el manejo del agua en cultivos y en actividades como la minería, ya que se podrían gestionar el desarrollo de modelos de impactos de consumo en cuencas como la sanjuanina,
La lentitud en los trabajos oficiales atenta contra la credibilidad que tendrá el análisis de los futuros informes de impacto ambiental de los proyectos mineros, todos ubicados en las nacientes de las dos cuencas que se van a monitorear.
La preocupación por la sequía es un tema que surgió como de urgente tratamiento en todas las mesas de trabajo del Acuerdo San Juan, sin embargo no ha tenido un seguimiento acorde a lo planteado por instituciones como el Departamento de Hidráulica o la secretaría del Agua.
De acuerdo a lo que se informo este fin de semana, hasta el momento se han realizado siete campañas de terreno en las cuales se concretaron tareas de aforo, monitoreo de propiedades físico-químicas in situ y toma de muestras de agua para su posterior análisis en el laboratorio del Instituto de Investigaciones Tecnológicas dependiente del Ministerio de Producción y Desarrollo Económico.
En los próximos días se concretarán las campañas de noviembre y diciembre, con el objetivo de cumplir un año completo de monitoreo y obtener conclusiones más detalladas sobre el estado real de los ríos de San Juan en este período de escasez hídrica.
Mientras tanto, hace 3 semanas la NASA ha lanzado alertas mundiales de la sequía en Sudamérica, por lo que urge ir mas allá de saber si los ríos están sanos, muy escasos de caudal, como son algunos de los objetivos difundidos hasta la actualidad.
