Es sabido que los vaivenes en las principales economías del mundo, y los coletazos en los países emergentes, más la incertidumbre que despierta la inestabilidad política global, posicionan al oro como inversión de refugio por excelencia. Y la Argentina no está exenta a ese modus operandi.
Así las cosas, la adquisición de oro físico -lingotes y monedas- no es una opción exclusiva para unos pocos. Al contrario, cada vez, más particulares e inversores se vuelcan hacia el commodity como forma de resguardar su capital, y con miras a ganar dinero con un activo con varios atributos.
Ahora bien, ¿Qué hay que tener presente al momento de comprar un lingote o adquirir una moneda?
Target y demanda
“Quienes invierten en oro buscan, principalmente, preservar su capital, aunque también lo hacen como forma de ahorro”, explicó Arturo Piano, director ejecutivo de Banco Piano y ahondó: “Sucede que a nivel mundial la situación está muy comprometida, esto hace que la gente no busque tanto rendimiento sino que priorice mantener el capital y resguardarse en un activo de valor, como es el oro o los commodities”.
El nivel de compra que se registra en el mercado local “crece en forma permanente y sostenida”, comentó Piano y estimó que en los últimos dos años, se duplicó.
Los requisitos
De la misma forma que es necesario presentar en el banco una serie de documentación al momento de comprar dólares, la adquisición de oro también exige ciertas condiciones.
“Al igual que con la moneda extranjera, el Banco Central (BCRA) requiere la presentación del DNI y, de acuerdo al monto a comprar, también se solicita una declaración jurada y origen de fondos, en caso de sumas más trascendentes”, detalló Fernando Pepe, gerente de cambios y metales preciosos del Banco Supervielle.
Las variantes y las características
Aquellos inversores que deseen adquirir oro físico tienen dos opciones: lingotes y monedas de distintos tipos.
“Los lingotes vienen con un certificado de origen que asegura la pureza y lo genuino del activo pero, en el caso de las monedas, no se cuenta con ese respaldo”, señaló Pepe y aclaró que “por lo general, quienes adquieren las barras de oro certificadas son inversores mientras que los que prefieren monedas, son coleccionistas”.
Lo auténtico y los falso
Al ser consultado sobre cómo detectar o no la veracidad de una moneda de oro, Arturo Piano respondió sin titubeos: “No hay forma de darse cuenta cuando la pieza es falsa” pero aclaró que si se compran en casas de cambio o bancos reconocidos, no se corren riesgos.
Por su parte, desde el Banco Supervielle agregaron que la autenticidad de una moneda de oro sólo puede ser percibida por la mirada de un especialista, “de un conocedor que detecte al verla si es genuina o no”. Sin embargo, Pepe aclaró que “la imitación de monedas no pulula tanto como los dólares falsos, pero sí están”.
Cómo guardarlo y resguardarlo
El oro es un metal muy noble pero, a la vez, muy maleable y delicado.
En el caso de los lingotes, “vienen protegidos con un blister, presentación que no tienen las monedas”, comentó Pepe y sumó: “En ambos casos no requieren condiciones de cuidado especial, sólo evitar los golpes, sobretodo en las monedas, porque si se abollan, pierden valor”.
Si el inversor quiere preservar el ahorro “es preferible que compre lingotes, que no requiere de cuidados especiales y tiene un certificado de autenticidad”, concluyó Pepe.
EL ORO AVANZÓ TRAS DATO DE INFLACIÓN EN CHINA
Reuters
El oro subió impulsado por presiones inflacionarias en China y fuertes ganancias en las materias primas industriales, en medio de datos de ventas minoristas estadounidenses mejores de lo esperado.
Las incertidumbres económicas también fueron de apoyo para el avance de más del 2% de la plata, después de que el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, advirtió que si no sube el techo de la deuda de Estados Unidos se corre el riesgo de una pérdida de confianza en la solvencia crediticia del país que podría ser desastrosa.
El oro al contado subió un 0.6%, a 1,524.40 dólares la onza, después de registrar su mayor pérdida diaria en un mes. El contrato para agosto en Estados Unidos cerró con un alza de 8.80 dólares, a 1,524.40 dólares la onza, tras negociar entre 1,512.80 dólares y 1,526.70 dólares.
Un informe chino mostró más temprano que la inflación en la segunda economía más grande del mundo se aceleró a su mayor ritmo en casi tres años, mientras que una caída menor a la esperada en las ventas minoristas de Estados Unidos impulsó al índice S&P 500 en 1.5%.
“Los peores temores de los datos económicos han sido descontados. Hay más apetito por riesgo, y parte de ese dinero está fluyendo hacia los metales preciosos”, dijo Bill O’Neill de la firma LOGIC Advisors.
El oro subió un 3% en las últimas cuatro semanas por una serie de decepcionantes datos económicos de Estados Unidos, incluyendo un débil reporte de creación de empleos.
La plata al contado se recuperó de la caída del 4% del lunes y subió un 2.4%, a 35.52 dólares la onza. En otros metales, el platino ganó 0.1%, a 1,792.20 dólares la onza. El paladio subió un 0.4% a 793.13 dólares la onza.