Interesante ejercicio intelectual, político, legal y científico propuso el Estudio Marval O´Farrell & Mairal con su seminario “Tendencias actuales en la regulación del cianuro y minería a cielo abierto”.
El debate, que convocó numeroso público, estuvo a cargo de dos abogados del bufet expertos en Derecho Minero: Luis Lucero y Leonardo Rodríguez, abogados y contó con la participación central de Jan Laitos, titular de la cátedra John A. Carver y director del Programa de Derecho Ambiental y de los Recursos Naturales de la Facultad de Derecho de la Universidad de Denver, Estados Unidos.
Soprendió, Laitos a la audiencia, porque habló de todas las aristas que suelen rodear a los cuestionamientos a la industria minera en materia ambiental y social, lo cual definió como un fenómeno global.
Al comparar conflictos en diversas latitudes, dejó una impresión de visitante acerca de la Argentina: “tiene que haber cierta fe en el gobierno de que va a poder generar un buen control regulatorio y en Argentina tal vez sea algo que todavía haya que abordar.
En Mendoza le pregunté a la gente cuál era su temor. Y me contestaron que ellos no confían los mineros porque pueden abandonar por dificultades financieras o lo que fuera. Y tampoco confían en el gobierno porque los legisladores no son buenos en lo que hacen, no se puede confiar en que sancionen la legislación adecuada aunque están actuando de buena fe. En EE.UU. podemos tener legisladores ineficientes, incompetentes pero no creo que sean corruptos”, opinó.
Y aportó un consejo: “En la mesa de negociación tiene que ir la gente correcta, las partes apropiadas. Un representante de la comunidad ambientalista, otro de la comunidad que viva donde se van a dar estas actividades, uno de la empresa minera y otro del gobierno, que será el responsable de implementar el acuerdo, si es que se llega.
Es imprescindible que el gobierno se involucre. Tiene que ser una negociación cooperativa, en la que las partes se escuchen. En EE.UU. hemos tenido negociaciones exitosas que incluyeron a Greenpeace y Earth First”
“En el modelo americano de litigios hay ganadores y perdedores. Espero que no se dé ese modelo en Latinoamérica ni en Argentina. Lograr un modelo de discusión, de consenso, de debate, un modelo donde las partes discutan y puedan llegar a soluciones”.
“Creo que si uno se fija en la historia de EE.UU. y lo que es la historia de América del Sur vemos que se da en tres etapas. La Primera Etapa es el uso del medio ambiente para producir bienes para la gente, bienes agrícolas, metales o derivados de los bosques; estos recursos estaban allí para ser utilizados por los seres humanos y así percibían la naturaleza, ya fuera que se tratara de un lago, un bosque o lo que fuere”.
“En la Segunda Etapa, usamos la naturaleza y se produjo la contaminación, el daño ambiental, se contaminó el aire, el agua, la tierra, los bosques se tornaron no sustentables. Las leyes en los EE.UU. y en las provincias de la Argentina son leyes de la etapa dos, destinadas a impedir y evitar la contaminación ambiental y la polución y las prohibiciones que se aplican en Montana, Colorado, tienen por objeto poner al límite a la destrucción del hábitat que se produjo durante la fase de utilización de los recursos”.
“En un conjunto de leyes de EE.UU., Ecuador o Suiza, por ejemplo, donde el objetivo no es solamente eliminar la contaminación ambiental y la polución ambiental sino que el objetivo es no utilizar la naturaleza, esto es preservar la naturaleza en su entorno natural y no permitir que los seres humanos la alteren”.
“Hay organizaciones fuertes, bien financiadas que no quieren que se altere la naturaleza en absoluto y esa es la Tercera Etapa, la dos es cero polución, la tres es mantenerla en estado puro. Cada vez más, las leyes en Europa, EE.UU. y en algunos países de América Central, Costa Rica, Ecuador, Bolivia y Perú están otorgando derechos y recursos para esta tercera fase. Dicen: Estamos preocupados por la contaminación y los problemas ambientales que pueden desprenderse del cianuro pero ese no es lo único, hay que dejar tranquilas a las montañas”.