El libro, que llevó 10 años de elaboración, explica los fundamentos de la actividad extractiva en todas sus etapas y constituye una referencia obligada para empresarios mineros y estudiantes del sector.
Hace una década, el licenciado Héctor Colón y el doctor Vicente Méndez decidieron que el auge de la minería en el país merecía un compendio escrito que acercara los aspectos básicos y principales de la actividad a toda la sociedad argentina.
"La idea original fue armar un compendio que se llamaría Manual Práctico de la Minería Argentina. Pero, una vez que el manual estuvo listo, comprobamos que la situación no era la ideal, porque había una gran cantidad de cuestionamientos y que el 99.99% de los medios gráficos, televisivos y radiales estaban dando al público la idea que la minería era poco menos que la patente del demonio en la sociedad. Concluimos entonces que no era el camino", recuerdan ahora Colón y Méndez.
"Replanteamos el concepto y decidimos hacer un relato lo más sintético posible sobre cuáles eran los verdaderos parámetros de la actividad. Primero en lo que hace a la actividad extractiva, luego sobre su rol en la economía y, finalmente, le agregamos la verdad sobre el impacto que tiene la minería en el medio ambiente, una temática que también está muy maltratada en los medios". Y así, entonces, nació "Minería", el flamante libro del que son autores.
"Llevó prácticamente 10 años de elaboración. En ese tiempo la idea fue cambiando, se fue adaptando, tomando de la opinión de los medios que adversamente se referían a la minería, que había que incorporar la actividad a través de una ley de protección ambiental sin haber advertido que la minería estuvo desde un principio inserta en la sociedad", detalló Méndez.
"Minería está dirigido a diferentes públicos y primero a los empresarios jóvenes de la Argentina, de la industria, de la actividad agropecuaria, para que cuando piensen en hacer algún tipo de inversión fuera del país tengan en cuenta que también aquí hay grandes posibilidades de desarrollo minero y puedan destinar esos recursos aquí", explicó Colón. También fue pensado para los estudiantes de postgrado, "para refrescar sus conocimientos y para el gran público que quiere conocer qué es la minería".
Al mismo tiempo, enfatizó el coautor, el libro ayuda a entender que "la minería no es solamente el desarrollo tecnológico de una serie de disciplinas que llegan desde el recurso más primitivo hasta el lingote, sino que está atada a un complejo mecanismo en el que participan la política nacional e internacional y su influencia en la formulación de planes para el desarrollo minero".
Colón y Méndez fueron compañeros de universidad y aseguran tras casi 44 años de profesión hoy se habla más de minería que entonces. Lo lamentable es que se habla mal, "por desconocimiento, por estupidez o por mala intención", coinciden. Hoy hay más gente en la carrera de Geología pero no es suficiente, hay un déficit importante de profesionales. La fiebre por la minería empezó en 2001, recuerdan ahora. En ese momento las universidades no daban abasto y tomaban alumnos avanzados de 4º y 5º año para incorporarlos a sus programas de prospección y exploración. Y la demanda no es específicamente minera, sino también del campo del petróleo, según los autores de "Minería".
Los autores sostienen que "la carrera de Geología, por todos los avances tecnológicos, ha cambiado mucho. El boom minero generó una demanda casi explosiva pero en lo tecnológico la formación de los profesionales argentinos está fuera de lo que es la realidad de hoy. En Argentina faltan profesionales formados y capacitados en las técnicas de última generación, sobre todo en lo que hace a la recuperación y la prospección inicial de los recursos. Esto significa que esta brecha la tienen que cerrar las empresas capacitando los recursos humanos y paralelamente el claustro universitario tiene que tomar conciencia que la formación clásica de algunas especialidades de las ciencias geológicas tiene que cambiar".
Colón opinó que "el mayor déficit está referido a la docencia, porque casi todos los docentes son académicos. Son contadas las universidades argentinas que tengan profesionales con experiencia, es gente que hace currículo, que trabaja en el CONICET y que los obligan a través de resoluciones internas a presentar información por metro todos los meses. En la Universidad de Buenos Aires o en la Universidad de La Plata se encuentran docentes siempre trabajando, pero en lo académico".
El objetivo del libro es explicar, a quien quiera saber de buena fe, qué es la actividad extractiva. Es un libro de consulta y el contenido sólo va a ser superado por las nuevas tecnologías, aseguró Méndez. "Ya pasaron 200 años y nunca hubo un libro de estas características en la Argentina. Consultamos bibliografía y sobre todo nos basamos en nuestra trayectoria y formación práctica. El rasgo distintivo del libro es el desarrollo de las fases de la minería, la síntesis de la evolución de una actividad esencial para la vida y a la vez logra describir lo arduo y meticuloso de una actividad que a veces se asocia con la rentabilidad fácil y la ganancia exponencial", dijo.
Los dos autores reconocen que su propuesta es algo difícil en este contexto político "porque existen algunas limitaciones", pero consideran también conveniente que la empresa minera trabaje en íntima colaboración con la Universidad aportando geólogos y que la Universidad trate de tomar docentes con experiencia minera. Reivindican ejemplos como el de Japón, donde las empresas mineras y las industrias trabajan en contacto directo con la Universidad, que realiza las investigaciones científicas para luego volcarlas en forma de tecnología aplicada a la actividad privada.
Para adquirir este libro comunicarse con el Lic. Héctor Colón al
(0054-9-11) 6221-3416
Fuente: Mining Press