(Análisis). Argentina es la segunda economía de Sudamérica, tiene terceras reservas de shale gas más grandes del mundo y un gran potencial minero. Pero los problemas políticos que atraviesa el país enfrían el ánimo de los inversores.
En apariencia, pareciera que Argentina ofrece un gran potencial para los inversores. La segunda mayor economía de Sudamérica después de Brasil también posee, según algunas estimaciones, las terceras reservas de shale gas más grandes del mundo. El Producto Interno Bruto (PIB) creció allí a un ritmo de 7,1% anual entre 2003 y 2011.
Esas estadísticas podrían ser suficientes para enviar a inversores desinformados en la Bolsa Argentina o al Global X FTSE Argentina 20 ETF (NYSE: ARGT ), el único ETF que incluye a Argentina. Argentina está considerada en el index MSCI (NYSE: MSCI ) como un mercado "de frontera", una etiqueta que implica un grado superior de riesgo respecto de los mercados emergentes.
Como pasa con muchos mercados emergentes, Argentina tiene un lado oscuro. Ese lado oscuro, que ha afectado al Global X FTSE Argentina 20 ETF, no puede ser ignorado. Los problemas del país, literalmente, vienen de arriba: las políticas de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner plantean grandes riesgos para los inversores y significativos peligros para la economía del país.
Ello quedó en evidencia este año cuando el gobierno argentino nacionalizó la petrolera YPF (NYSE: YPF), una medida que hundió el ARGT y condujo a fuertes retrocesos en la deuda argentina, a la vez que subía el precio de los instrumentos de incumplimiento crediticio para asegurar esa deuda contra un default.
Ahora, la economía argentina se está debilita debido, en gran parte, a políticas del gobierno que son vistas tanto impredecibles como hostiles para los inversores extranjeros. Los analistas predicen que la economía argentina crecerá de 2,5 % a 3 % este año, según Associated Press. Ello, después de un crecimiento del PIB de 5,2 % en el 1T.
Más alarmante es el hecho de que el Banco Central pronostica un crecimiento del 6% y el presupuesto anual del gobierno lo haya calculado en 5,1%. La potencial discrepancia entre las estimaciones del gobierno y la realidad podría añadir argumentos a quienes piensa que la gestión de Fernández es menos que confiable.
"Argentina es un caso perdida y necesita de sustanciales reformas económica, políticas y sociales", dijo la analista independiente Caiman Valores, con base en Colombia.
Esa percepción se ha hecho ahora realidad y podría suponer malas noticias para la economía argentina en el futuro. Algunas se las mayores compañías petroleras del mundo, incluida Chevron (NSE: CVX), han hecho negocios en el país. Sin embargo, la nacionalización de YPF puede ser interpretada por empresas energéticas de Estados Unidos y Europa como un acto hostil que expresa que el gobierno no quiere inversiones occidentales.
Argentina es también rica en recursos minerales y si bien la industria minera está menos regulada que la petrolera todavía hay una tasa de exportación de 10%, que crean costos adicionales para las mineras que operan allí, según Valores.
"El riesgo político es extremadamente alto y el riesgo en el país en general es extremadamente alto". Valores opina que de 1 a 10 en un ránking de riesgo para los inversores, Argentina tendría 9.
El impacto de las políticas argentinas sobre el ARGT ha sido palpable. Cuando se conoció la noticia de la nacionalización de YPF, el ETF manejaba US$ 3.500.000 en activos. Ese total cayó a US$ 2.800.000 al 20 de junio.
El sector de materiales y energía reúnen 42% del ARGT y hacen el fondo vulnerable a cualquier intento de parte de Fernández de nuevas nacionalizaciones en el futuro. Dicho de otro modo, no sorprende que el ARGT se haya hundido casi 27 % en los últimos tres meses.
Ese rendimiento esconde el hecho de que el ARGT es realmente refugio de algunos papeles decentes y conocidos. Tómese por ejemplo Pan American Silver (NASDAQ: PAAS ), Silver Standard Resources (NASDAQ: SSRI ) y Yamana Gold (NYSE: AUY ). Ese trío combinado supone el 12% del ARGT. En el mes pasado, Yamana aparece como el de menor rendimiento, con una ganancia de 17%. En el mismo lapso, el ARGT muestra una subida de 2,3%, prueba adicional de que este ETF está siendo lastrado por un desfavorable clima regulatorio en Argentina.
Las malas noticias no terminan ahí. En su reclasificación anual de mercado difundida el miércoles pasado, el MSCI señaló que Argentina podría ser retirada del MSCI Frontier Markets Index .
"MSCI sigue monitorieando de cerca la situación en Argentina tras la nacionalización de YPF a través de una expropiación del 51% del paquete accionario a la española Repsol por parte del gobierno argentino", declaró. "Otra intervención del gobierno en el sistema económico de mercado libre podría forzar al MSCI a iniciar una consulta pública con la comunidad de inversores sobre una eventual exclusión del MSCI Argentina Index del MSCI Frontier Markets Index".
ARGT no sigue el MSCI Argentina Index, pero perder ese estatus de index' frontier markets podría nublar todavía más el panorama del ETF.
Hay destellos de esperanzas, sin embargo. A menos de US$ 8, inversores con una alta tolerancia al riesgo podrían considerar al ARGT como una opción de compra sin caducidad para el caso de una fuerte mejor del clima político de Argentina en algún momento futuro.
"Hay un alto potencial de oportunidades de inversión para inversores astutos y especulativos", dijo Valores. "Especialmente aquellos que quieren aprovechar este ciclo de altibajos en el que opera la economía argentina".
Fuente: Benzinga