La fortaleza de la demanda mundial de oro y diamantes se explica, en gran parte, por la pujanza del mercado en China. En una economía en pleno proceso de ajuste, los consumidores independientemente del nivel de renta buscan, por un lado, seguridad en sus ahorros y, por otro lado, invertir en mayor calidad de vida a través de joyas, gemas u ornamentos que pueden transferirse entre generaciones.

En el último Informe elaborado por el Consejo Mundial del Oro (World Gold Council, WGC) China es el principal consumidor mundial de oro físico en forma de joyería, suponiendo el 26% de toda la demanda mundial del dorado metal precioso sólo contabilizando la demanda privada. Por el lado público, el Banco Central chino está acaparando oro en forma de lingotes y monedas hasta alcanzar, con toda probabilidad, la segunda mayor reserva mundial de oro.

El consumo de oro y productos de lujo vinculados al oro en China está focalizado en el segmento minorista. Aproximadamente el 80% de la demanda de oro en forma de joyas, lingotes y monedas se centra en pequeñas compras con un valor no superior a 1.000 dólares. En este negocio se están especializando las grandes firmas de joyería china como Chow Tai Fook, Chow Sang Sang Holdings o Beijing Huapu Diamond, entre otras.

En el año 2014 observaremos un incremento aún mayor de la demanda de oro y diamantes en China. Según una encuesta que incluye el mismo Informe del WGC, el 24% de los encuestados tienen previsto comprar oro de joyería de máxima pureza (24 quilates) en este año. Además, un 13% de los encuestados prevé comprar ropa de marcas exclusivas, un 12% adquirirá calzado también de marca y un 10%, bolsos de diseño.

La caída del precio del oro un 30% en 2013 ha estimulado la demanda de oro y otros productos derivados en China. En este momento, lo que más pesa no es el precio en la decisión de compra. Con precios superiores, los consumidores chinos seguirían comprando oro. Seguiremos muy de cerca la evolución de la demanda en los próximos meses.

Fuente: theobjective