China 'extiende sus redes' en el sector commodities de Latinoamérica

China estudia la posibilidad de dar apoyo financiero a las petroleras del país para que puedan adquirir compañías energéticas foráneas. Beijing destinará parte de sus enormes reservas de divisas extranjeras, que ascienden a 1,95 billones de dólares, para este proyecto. El gigante asiático podría así conseguir aumentar la participación en las petroleras que operan en Latinoamérica, algo que ya ha comenzado a llevar a cabo en el sector minero.

En concreto, el Ejecutivo planea crear un fondo para conceder préstamos a muy bajo interés a los tres gigantes PetroChina, Sinopec y China National Offshore Oil Company. Según la prensa oficial, incluso, se baraja la posibilidad de ofrecer inyecciones directas de capital. Los altos ejecutivos de estas compañías ya han manifestado en varias ocasiones que aspiran a expandir su negocio en el extranjero mediante fusiones y adquisiciones.

La dramática caída del precio del petróleo (desde julio de 2008 ha perdido más de un 72% de su valor), y las tensiones causadas por la recesión económica han desplomado el valor de las petroleras internacionales en Bolsa, haciéndolas más asequibles para posibles ‘depredadores’ chinos.

Pero esta posibilidad podría hacer saltar la voz de alarma en las economías occidentales. Hace cuatro años, CNOOC intentó comprar la estadounidense Unocal, pero finalmente se vio obligada a retirar su oferta por la oposición de algunos congresistas, que se manifestaron en contra de que una empresa privada cayera en manos de una estatal, que era financiada por el Partido Comunista Chino.

Oposición Pero ahora los Gobiernos occidentales se encuentran en una posición más débil para oponerse, después de que hayan destinado miles de millones de euros para salvar a sus propias empresas, sobre todo bancos. El posible apoyo financiero del Gobierno chino a las petroleras del país podría solucionar el principal escollo que tiene la desinvesión de Sacyr Vallehermoso en Repsol YPF: encontrar un comprador.

Los rumores acerca del interés de las empresas chinas por el 20% que la constructora posee en la hispano argentina han sido una constante desde el año pasado, sin embargo, fuentes financieras afirman que sería complicado que se materialice esta posibilidad. Además de la oposición por el carácter público de de las chinas, éstas no estarían dispuestas a pagar el precio que exige Sacyr, en un momento en el que los bancos han concedido un respiro a la constructora.

Importaciones Según el Centro Estatal de Información de China, el 55% del consumo de petróleo del gigante asiático dependerá de las importaciones el año que viene, cifra que superará el 65% en 2020. Así, en la última semana, Beijing ha firmado acuerdos de 31.800 millones de euros con Rusia, Venezuela y Brasil, aprovechando la gira del vicepresidente, Xi Jinping, por los países productores de petróleo de Latinoamérica.

Minería. Al parecer, y según los expertos consultados por Americaeconomica.com, el gigante asiático estaría buscando una reducción en los precios a los que compra el hierro a las firmas de la región. Incluso se rumorea que las grandes compañías chinas quieren adquirir participaciones en las empresas brasileñas y australianas para poder influir en las decisiones sobre los polémicos precios.

Las autoridades chinas ya se habrían puesto en contacto con Vale do Rio, que, de momento, sigue firme en la rebaja del 10% en los precios que ya anunció a finales de enero, y no se espera que ceda más.

La compañía tiene que esperar aún la oferta de precios que tengan que hacer BHP Billiton y Rio Tinto, pero nadie quiere ceder en lo que a una nueva rebaja de precios se refiere. No es de extrañar. La caída de las materias primas no dejan otra opción para recuperar parte de los ingresos perdidos en los últimos meses.

Los portavoces de Wuhan Iron & Steel Group y Jiangu Shagang Group, compañías que se encuentran entre las 5 primeras del sector minero del país asiático, ya tienen objetivos para invertir en compañías australianas y brasileñas.