ANDRÉS SANGUINETTI
Tras haber decidido pagar una deuda por u$s 10 millones que vence mañana con dinero aportado por sus accionistas (YPF y British Gas), Metrogas busca ahora encarar un proceso definitivo de refinanciación de su pasivo durante el año próximo.
La principal distribuidora de gas del país, que brinda servicios a usuarios de la Capital Federal y parte del GBA, inició la contratación de asesores financieros y legales que la asistan en el armado de una nueva propuesta de pago de un pasivo que asciende a u$s 250 millones y que durante 2010 tendrá varios vencimientos.
La búsqueda se basa en la necesidad de ordenar su ecuación económica ante la certeza de que sus accionistas no volverán a aportar fondos para evitar un nuevo default y frente a la imposibilidad de contar con dinero adicional proveniente de una suba de tarifas negada por el Gobierno.
La propuesta además tiene como objetivo esquivar la amenaza de intervención estatal si es que la distribuidora incumple con sus obligaciones.
En forma paralela, su management ha reflotado el pedido de una recomposición de la tarifa que le permita mirar el panorama de una forma más optimista, tal como lo refleja la carta enviada por la firma ayer a la Bolsa de Comercio.
Se especula con que el Gobierno otorgará a principios de año un aumento en el precio de las boletas del 22%. En el sector aseguran que en enero o febrero llegará la suba, pero advierten que si eso no sucede, Metrogas nuevamente quedaría al límite del default.
Si bien la empresa participa en un negocio rentable, desde que el gobierno kirchnerista congeló el cuadro tarifario la compañía sufre problemas financieros. Su ganancia neta durante el tercer trimestre de este año fue de $ 1,3 millones, una caída del 91 % en relación con el mismo lapso de 2008.
“La situación de la sociedad continúa deteriorándose”, aseguran cerca de la empresa donde también advierten que “esto podría afectar la capacidad de generación de flujos de fondos operativos de la sociedad si es que no puede refinanciar su deuda”.
Entre enero y septiembre Metrogas registró una pérdida de $ 38,3 millones, que se comparan con una ganancia de
$ 75,9 millones en igual lapso de 2008. Una variante propuesta por la familia Eskenazi, accionistas de YPF, es la búsqueda de un nuevo socio que ingrese al capital de Metrogas y aporte dinero fresco a la firma. Sin embargo, la posibilidad es considerada aun remota por los propios voceros de la distribuidora.