La seguridad, en el discurso de Cristina

La Presidenta también hablará de la crisis energética y de las relaciones internacionales; no se esperan importantes anuncios

La presidenta Cristina Kirchner pronunciará mañana un discurso ante la Asamblea Legislativa con un fuerte tono político, durante el cual podría trazar, entre otras cosas, los primeros lineamientos, aunque sin grandes cambios, de una política nacional de seguridad, uno de los temas que más preocupan a la población según las encuestas que se consultan en la Casa Rosada.

El texto de la alocución presidencial en su primera inauguración del período de sesiones ordinarias del Congreso se trabajaba ayer en el máximo de los secretos. Incluso, no se descartaba que la Presidenta hiciera una exposición improvisada y no leída.

Así lo hizo cuando se dirigió ante el Congreso al asumir sus funciones, el 10 de diciembre último. "Es posible que sólo escriba los ejes discursivos y los exponga de manera espontánea", señaló a LA NACION un allegado a Cristina Kirchner.

En rigor, la jefa del Estado se siente más cómoda de esa manera. Sin embargo, algunos funcionarios sostenían la idea de que el discurso debe ser leído porque se trata de una exposición institucional sobre el estado de la gestión, que debe comprender todas las áreas del gobierno.

En ese contexto, según confiaron fuentes oficiales a LA NACION, la Presidenta aprovechará para rescatar la gestión de su antecesor, el ex presidente Néstor Kirchner; reivindicar las pocas primeras medidas de su incipiente mandato, y refirmar las políticas de su gestión para los próximos cuatro años.

Más allá de la política de seguridad ciudadana, algunos de los ejes del discurso de la Presidenta serán la marcha de la inflación, el polémico índice del Indec, la política energética, las inversiones en obra pública y en educación, y la refundación de un nuevo sistema de partidos políticos. No se escaparían del texto, como es su costumbre, algunas críticas a los medios de comunicación, que nunca están de más.

"Hay hermetismo total. El discurso lo tiene ella en su fuero íntimo", decían ayer a LA NACION. Sin embargo, una recorrida por todas las áreas del Gobierno permite adelantar algunos lineamientos.

Equipamiento
En cuanto a la política de seguridad, Cristina Kirchner hará hincapié en la necesidad del equipamiento a la Policía Federal y haría una exhortación a los efectivos de las fuerzas federales de seguridad para que trabajen con "honestidad y dedicación". También podría adelantar algún esbozo de una reforma del código de procedimientos penales.

Sobre la inflación, la jefa del Estado reivindicaría la política de control de precios que ejecuta el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y anunciará el próximo lanzamiento del nuevo método para medir el índice de precios al consumidor. Lo rescatará como un logro de su gestión.

Este punto fue el eje de una disputa entre Moreno y el ministro de Economía, Martín Lousteau, a quien Cristina Kirchner le dio su apoyo.

La Presidenta subrayará una vez más la importancia de las inversiones para la producción y defenderá la política del Gobierno de acumulación de reservas en el Banco Central y un ajuste de aquí en más de las políticas monetaria y fiscal para contener la inflación y como resguardo ante una crisis económica internacional.

Sobre la posible falta de energía -particularmente gas natural- en el invierno próximo, la Presidenta subrayará la importancia de la alianza estratégica con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, para resolver "la ecuación energética". Pero rescatará al Mercosur como ámbito para fortalecer la integración regional, con especial énfasis en la energía.

Aseguraría que no faltará gas en el invierno para consumo domiciliario. El Gobierno negocia con Bolivia la importación de más gas natural, pese a que el gobierno de Evo Morales había dicho que no aumentaría sus envíos.

Por otra parte, Cristina Kirchner defenderá el tipo de cambio con dólar competitivo y las políticas de incentivo del consumo, como los aumentos de salarios y las jubilaciones.

En otro orden, pondrá de relieve el nuevo plan de seguridad vial, que debe aprobarse aún en el Congreso; los acuerdos en materia nuclear, de defensa y producción con Brasil; el mejoramiento de las relaciones internacionales -en especial, con los Estados Unidos-, y la defensa de la multilateralidad en las Naciones Unidas (ONU).

Rescatará la Presidenta el acuerdo de los salarios docentes, prometerá 180 días de clases y subrayará la importancia de la inversión en educación, ciencia y tecnología. También se prevén menciones sobre los nuevos nombramientos de jueces y sobre la marcha de los juicios por violaciones de los derechos humanos en la dictadura militar.

Por Mariano Obarrio