Wall Street apenas arañó un resultado positivo tras el mal trago del rescate
El Cronista, Buenos Aires
Con muchas más dudas que certezas deambuló el mercado estadounidense durante gran parte de la rueda de ayer. Cuando después de varias idas y vueltas los principales índices bursátiles parecían que iban a terminar –otra vez– en negativo, Wall Street tuvo su cuota de optimismo que permitió una leve suba del 0,65%. En la última hora de operaciones, se conoció que los diputados y senadores de EE.UU. habían consensuado el monto que se destinará al paquete fiscal impulsado por Barack Obama: será por u$s 789.000 millones, algo menos que la idea original. Se cree que la aprobación final será en los próximos días ya que el presidente estadounidense los había instado a tener cerrado el paquete para el lunes de la semana que viene (precisamente, cuando se conmemora el Día del Presidente).
El repunte sobre el final de Wall Street vino de la mano de los papeles financieros: Bank of America ganó 9,2% y el Citigroup trepó 10%, luego de haber anotado bajas del 15% o más según los casos el día anterior cuando el mercado descreyó los anuncios del secretario del Tesoro de EE.UU, Tim Geithner. “Está la sensación de que el paquete de estímulo terminará impulsando a la economía en el futuro”, dijo a Bloomberg William Stone, chief investment strategist de PNC Wealth Management. “En definitiva, esto ayudaría para reducir en alguna forma la extremada incertidumbre que hay con respecto a la duración de la recesión”, agregó.
Sin remedios mágicos
De todas formas, los especialistas no creen que la noticia del paquete fiscal sea lo suficientemente contundente para despejar las dudas que aquejan a los inversores. Después de todo, siguen apareciendo empresas que despiden personal y las ganancias de las compañías siguen achicándose. Se sabe, los mercados son forward looking (miran hacia adelante): si las expectativas no fueran negativas, los recortes de puestos de trabajo no serán tan importantes porque la peor de la crisis habría quedado atrás. Por el contrario, el comportamiento demuestra que las empresas siguen con la idea de que la crisis llevará una largo período. De hecho, ya se descuenta que no habrá síntomas de recuperación durante todo el 2009.
“Va a ser un tiempo de muchos desafíos. La volatilidad y la incertidumbre económica van a continuar durante todo el año. La economía podría empezar a estabilizarse sobre finales del 2009, pero las acciones quizás no harán el típico movimiento de anticipación. Sucede que históricamente, los mercados se movieron hacia arriba antes que la economía rebotara. Pero dado que estamos ante una crisis sin precedentes, eso podría no pasar”, explicó a CNN Money, Britt Szostak managing director de Lenox Advisors.
Es más, inversores en 10 mercados de Nueva York a París y Tokio pronostican que las acciones caerán en los próximos seis meses, según una encuesta mundial realizada por Bloomberg. “Mucho depende de la economía de Estados Unidos. Hasta que veamos algunos números positivos el mercado seguirá bastante agitado”, dijo Lawrence Peterman, director de Eden Financial Ltd a Bloomberg.
