El FMI lamentó ayer “la falta de progresos”realizados por el gobierno argentino en la instrumentación de medidas para mejorar la calidad las estadísticas. Y expresó su “preocupación”al respecto. Le dio al gobierno argentino otros tres meses para que regularice la situación. Y advirtió que si no cumple podría haber medidas adicionales. Es decir, el FMI hizo todo, excepto imponer sanciones en contra de Argentina.
Esto representa una victoria para el Gobierno y para el representante argentino ante el FMI, Alfredo MacLaughlin, quien venía tratando de evitar la llamada “declaración de censura”, es decir el primer paso en el largo procedimiento previsto para expulsar a un país que manipula su estadísticas.
Clarín pudo confirmar ayer que por lo menos 10 países llegaron a la reunión en la que el directorio del FMI discutió el lunes el problema de las estadísticas argentinas convencidos que nuestro país merecía ser censurado.
“Son países que están molestos con Argentina no sólo por el problema de estadísticas sino que también por las restricciones comerciales y otros incumplimientos argentinos”,dijo a este diario un funcionario internacional que pidió no ser identificado. De hecho, recientemente la secretaria de Estado, Hillary Clinton, habló sobre la posibilidad de una declaración de censura en contra de Argentina en una carta dirigida al senador Richard Lugar.
La tensa reunión de directorio del lunes duró una hora y media. Tras la presentación que hizo la directora gerente, Christine Lagarde, al final se impuso la posición de quienes propusieron darle al gobierno otros tres meses .
Técnicamente de acuerdo al inciso 12 del articulo 8 de la carta orgánica del FMI todavía faltaba un pequeño paso antes de llegar a la Declaración de censura. “Si un miembro no instrumenta las acciones especificadas por el Directorio antes de la fecha establecida, el director gerente puede recomendar y el directorio puede decidir la emisión de una declaración de censura”, dice el texto. Pero agrega que “antes de la adopción de una declaración de censura, el directorio puede emitir un comunicado expresando sus preocupaciones y dándole al miembro un periodo para responder”.
Objetivamente eso es lo que hizo el comunicado de ayer. Pero más allá de lo que pueda corresponder técnicamente, las decisiones del Fondo siempre son políticas .
Funcionarios y analistas consultados por Clarín dijeron que existen por lo menos tres razones por las cuales el FMI preferiría no tener que sancionar a la Argentina. En primer lugar, sería la primera vez que el FMI sanciona a un país por no presentar estadísticas fiables. Existe solo un precedente. Checoslovaquia en 1954, pero la circunstancias era totalmente distintas En segundo lugar, Christine Lagarde sabe que si sanciona a la Argentina corre el riesgo que Cristina decida irse del fondo y que termine capitalizando todo el problema a nivel doméstico. Y en tercer lugar, y quizás la razón más importante, tener en su seno un país sancionado por el FMI le plantearía al G20 un gran dolor de cabeza .
Clarín pudo confirmar que ayer había en el Departamento de Estadísticas y del Hemisferio Occidental más de un funcionario desilusionado por la “condescendencia”con respecto al “incumplimiento” argentino.
El comunicado emitido ayer en Washington dice que el directorio del Fondo Monetario volverá a reunirse el 17 de diciembre próximo “y considerará los pasos adicionales a partir de la respuesta de Argentina, y en línea con los procedimientos del FMI”.
Sin duda en ese momento volverá a surgir la posibilidad de que el Fondo censure a nuestro país. Una fuente dijo que la cuenta regresiva hacia la sanciones ya ha comenzado. Pero también es posible que una vez más el FMI decida no sancionar a la Argentina.