Por: Carlos Tapia
1).- Como todos recuerdan, al Movadef se le rechazó su pedido de inscripción como un partido legal por considerarlo como el aparato legal de Sendero Luminoso.
De esto hace ya más de dos años. Aunque sus representantes, Crespo y Fajardo, no se cansaron de repetir que ellos participarían de todas maneras en las elecciones regionales y municipales ¿Se dieron cuenta que ahora guardan un singular silencio? Es que se han tomado en serio su participación en ciertas organizaciones políticas locales, y hasta la inscripción de otras, principalmente en zonas alejadas del interior, para candidatear en las elecciones municipales distritales. Ya lo han hecho en las elecciones de algunos centros poblados. Existen aproximadamente 1,800 distritos que tendrán elecciones este 5 de octubre. En cerca de 600 de ellos no existen comisarías. En muchos de ellos habita gente nueva atraída por la minería ilegal y todas sus secuelas.
2).- No hay que olvidar que el sentido estratégico del SL armado fue la construcción de las “bases de apoyo”, para allí consolidarse y desplegar su accionar terrorista a las zonas cercanas. La estrategia ha cambiado; ahora buscan participar de manera encubierta en las elecciones municipales, como regidores y hasta alcaldes en zonas alejadas, donde pulula la minería ilegal. Pero esta estrategia se desenvuelve dentro de la legalidad y la competencia política, lo que es un reto para los partidos y movimientos democráticos locales. Ahí, tratarán de convertir la pequeña municipalidad en el instrumento para expandir el Movadef (sin hoz y martillo, porque asusta) y catapultar a sus candidatos como líderes de movimientos y frentes a favor de la minería ilegal encubierta, constituyendo una “base de apoyo”, política y de masas. Sería una nueva versión de lo que consiguieron al interior de los movimientos cocaleros a inicios de los años ‘90 del siglo pasado.
3).- ¿Por qué la minería ilegal? Porque al igual que el narcotráfico genera un ambiente social favorable al enfrentamiento contra la institucionalidad estatal y la corrupción de autoridades; y en no pocos casos existe una combina entre el lavado de dinero de la droga y el financiamiento de la minería ilegal. Esta ya dejó de ser una minería artesanal y se ha convertido en el primer eslabón (extracción del material) que es transportado hacia las plantas procesadoras y posterior exportación de las barras de oro. Detrás de la minería ilegal existen grandes mafias de nacionales y extranjeros que hacen su agosto. Se estima en 3 mil millones de dólares el valor de este oro. Existe, por lo tanto, mucho dinero para apoyar a ciertos candidatos. El Movadef también busca beneficiarse pero en una estrategia de mayor alcance.