Si British Gas decide reducir su riesgo en el pré-sal, frente a la costa de Santos, Petrobras no quiere que venda a Sinopec aun cuando Petrobras tiene que vender y no comprar, para pagar su plan de inversiones. Segun Petrobras, tiene el dinero, y así le pondría un límite a la participación extranjera en las reservas brasileñas.
S. PAULO (Brasil Económico). El presidente de Petrobrás, José Sergio Gabrielli, reveló a Ricardo Rego Monteiro, de la web Brasil Económico, su intención de ejercer el derecho de preferencia previsto en el contrato de concesión para cualquiera de los socios en el bloque BMS-11 en caso de venta de participaciones.
Socia de Petrobrás en 2 campos de exploración y perforación en la cuenca pré-sal (offshore, en la plataforma submarina frente a la costa del puerto de Santos. El pré-sal es una porción del subsuelo que se encuentra bajo placas de sal, algunos kilómetros debajuo del lecho del mar), British Gas estaría en negociaciones con empresas chinas para cederles hasta 10% en un lote de bloques en la provincia petrolífera.
"Todas las hipótesis son posibles, pero si hubiera 'farm out' (venta de participación en bloque), nosotros vamos a ejercerlo (el derecho de preferencia)", afirmó Gabrielli.
Sin embargo, el ejecutivo-político del PT dijo que no había sido informado hasta el momento sobre la operación. "No tenemos conocimiento de ello (de las negociaciones), pero todo lo que ocurre en el pre-sal nos interesa".
Los rumores sobre la posible venta de las acciones de BG en ese territorio submarino creció el mes pasado, a partir de un informe publicado por el diario británico Financial Times. Revistas y sitios web brasileños especializados, ayudaron a incrementar el barullo.
De acuerdo con estas publicaciones, la dirección de la empresa británica, estaría en negociaciones con la compañía china Sinopec para venderle porciones de sus concesiones no solo en Lula y Cernambi, en el BMS-11, sino también en los bloques BMS-9 y BMS-10 en la misma zona.
Como su rango de participaciones varía de 25% a 30% en esos bloques, el negocio no representaría la salida definitiva de BG del pré-sal, sino sólo la incorporación de un nuevo socio para hacerse cargo de algunos de los riesgos (financieros, básicamente).
Recientemente, el presidente mundial del Grupo BG, Frank Chapman, confirmó la intención de la empresa de invertir US$30.000 millones en Brasil hasta 2020, a través de un desembolso que incluirá la instalación de un centro mundial de la compañía de investigación y desarrollo en el Parque Tecnológico de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), en la Ilha do Fundão.
Gabrielli reafirmó el compromiso de la estatal Petrobrás de deshacerse de parte de sus activos para hacer posible inversiones de US$224.700 millones en los próximos 4 años. A pesar del plan, el Ejecutivo aclara que Petrobrás dispone de los recursos para invertir, eventualmente, en la compra de las participaciones de BG. El presidente de Petrobrás reveló escepticismo ante la posibilidad de una negociación de la compañía británica con los chinos.
Consultada por Brasil Econômico, la dirección brasileña de BG Group se limitó a señalar que "no hace comentarios sobre rumores del mercado".
La dirección mundial de la compañía británica, aún en desacuerdo con los rumores, habría mantenido el compromiso de invertir los US$30.000 millones en Brasil, pero, a cambio, habría optado por compartir los riesgos del negocio después del recrudecimiento de la crisis europea.
En los últimos meses, la agitación en la economía mundial contribuyó a reducir el valor de mercado de BG, a pesar las perspectivas de rentabilidad futura que ofrece el pré-sal. La ola de devaluaciones, tampoco perdonó a las acciones de Petrobrás, y se tragó a la mayor parte de las empresas del sector, a causa de la caída de los precios del petróleo.
