El corcet tarifario impuesto por el kirchnerismo desde que llegó al poder en 2003 sigue siendo el principal factor de impacto en los resultados financieros de las compañías de servicios públicos.
En especial de distribuidoras de gas y electricidad como Metrogas, Edenor y Edesur, que tienen prohibido por el Gobierno retocar las tarifas a los usuarios y deben afrontar casi con los mismos ingresos gastos cada vez más pesados para intentar mantener la calidad de sus servicios y hacer frente a una demanda creciente, en especial en épocas de mayor consumo como la actual.
Ni siquiera la eliminación de los subsidios le permitirá sortear los problemas de caja a estas empresas con operaciones en Capital Federal y parte del conurbano bonaerense
Ayer se conoció que Edesur registró una pérdida neta de $ 461 millones (u$s 105,7 millones al cambio actual) durante 2011 que la distribuidora de energía controlada por empresas filiales del grupo Endesa atribuyó al retraso tarifario su desequilibrio entre ingresos y gastos para sostener sus operaciones.
La cifra marca un incremento del rojo de un impactante 800% con relación a lo que perdió en 2010 y que llegó a los $ 53 millones o u$s 12,1 millones. También representa una pérdida un poco mayor a $ 1,2 millones diarios si se dividen esos $ 461 millones por los 365 días del año.
Si se suman los dos últimos ejercicios, entre 2010 y 2011 Edesur acumula pérdidas por $ 514 millones.
Los datos surgen de la información enviada ayer por la distribuidora de energía mediante un comunicado en el que, de todos modos, informa un fuerte incremento de sus inversiones para el mismo período de 52% y cuyo monto fue de $ 680 millones. En este sentido, la empresa, que brinda servicios a 3,2 millones de clientes del centro y sur de la Ciudad de Buenos Aires y de 12 partidos de la zona sur del GBA, recuerda en el comunicado que, a pesar de las pérdidas acumuladas, en los últimos dos años ha realizado inversiones por $ 1.128 millones y ha incrementado su dotación de personal en 250 personas.
“Los esfuerzos realizados ratifican el compromiso de la compañía para seguir prestando el servicio de distribución eléctrica en los niveles requeridos y que los usuarios merecen”, asegura la firma en el comunicado.
De todos modos, aclara que en lo que se refiere a insfuciencia de ingresos, “entre otros aspectos pendientes del Acta Acuerdo firmada en 2006, merece consignarse que el último reconocimiento parcial de mayores costos se registró en el año 2008”.
Y advierte que “resulta evidente que el margen de distribución percibido a través de la tarifa es insuficiente para recomponer la ecuación económico-financiera del negocio, atendiendo el continuo incremento verificado en los costos operativos”.
La semana pasada, Endesa Costanera, una de sus controlantes, también comunicó fuertes pérdidas cercanas a los $170,7 millones en 2011 que atribuyó “a la insuficiente remuneración de la energía generada cuyo precio no refleja los aumentos de costos experimentados en su ecuación económica”. De hecho, la incertidumbre que le generan los flujos futuros, la ha obligado a considerar no recuperables los créditos impositivos que figuraban en el balance de la sociedad.
En su informe de resultados, Endesa recordó que sus pérdidas registradas a lo largo de los últimos siete años ascienden a $441,3 millones. Y, para explicar las razones, pintó un claro panorama de las condiciones actuales del sector eléctrico: altos niveles de demanda, bajos precios de la energía, restricciones en el suministro de gas natural, alta generación con combustibles líquidos, y acumulación de las acreencias por los retrasos en los pagos de las ventas al Mercado Eléctrico Mayorista.
Endesa reclama otra vez
Ámbito Financiero
La distribuidora eléctrica Edesur informó ayer a la Bolsa de Comercio que en 2011 tuvo una pérdida neta de $ 461 millones, que se suman a la de $ 53 millones registrada durante 2010. La empresa atribuyó la situación «al progresivo deterioro de la ecuación ingresos y gastos operacionales». Así Endesa, la controlante de Edesur, volvió a referirse a la insuficiencia de ingresos tal como lo hizo el viernes para anunciar el resultado negativo de Central Costanera, hecho que motivó una fuerte respuesta del ministro Julio De Vido.
Edesur indicó que «el margen de distribución percibido por la compañía resultó insuficiente para recomponer la condición económico-financiera del negocio, considerando el continuo incremento en los costos operativos». Por su parte, Central Costanera, al informar la pérdida por $ 170,7 millones en 2011 y un total de $ 441,3 millones en los últimos siete años, dijo que los resultados negativos «se originan por las condiciones imperantes en el sector eléctrico, con altos niveles de demanda, bajos precios de la energía, restricciones en el suministro de gas natural, alta generación con combustibles líquidos y acumulación de acreencias por los retrasos en los pagos por ventas al mercado eléctrico mayorista».
Tras ese informe de Central Costanera, De Vido afirmó que «Endesa debería recordar las fabulosas ganancias que obtuvo en los últimos veinte años», y que «la difusión de resultados negativos, que de ninguna manera se corresponden con los números globales de la empresa, es una operación mediática para evitar la revisión de costos que se está haciendo en todas las actividades que reciben subsidios».
Endesa es una empresa española que desde hace dos años está controlada por la italiana Enel. Las dificultades en Europa y la necesidad de obtener utilidad de los activos en la Argentina explicarían la insistencia en polemizar con el Gobierno, luego de la declaración de De Vido. Endesa controla Edesur, las centrales Costanera, El Chocón y Dock Sud, y CEMSA.
La empresa Edesur reportó ayer una pérdida neta de 461 millones de pesos durante el ejercicio 2011 y la atribuyó al "retraso tarifario que provoca un desequilibrio entre ingresos y gastos operacionales". El dato, difundido ayer por la distribuidora en un comunicado, se conoció pocos días después de que el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, cuestionó a Central Costanera (también controlada por el grupo Endesa) por informar públicamente sus pérdidas.
Edesur destacó que sus inversiones ascendieron en 2011 a $ 680 millones, "superando en un 52% las del año anterior". Y recordó que ya en 2010 había registrado una pérdida neta de $ 53 millones.
"Las pérdidas registradas a lo largo de los últimos años se originan en el progresivo deterioro de la ecuación ingresos y gastos operacionales de la compañía", afirmó la empresa, que abastece de luz a más de 2,3 millones de clientes en el sur de la Capital Federal y 12 partidos del Gran Buenos Aires. Y señaló que "el último reconocimiento parcial de mayores costos se registró en el año 2008". "En consecuencia, resulta evidente que el margen de distribución percibido por la compañía a través de la tarifa es claramente insuficiente para recomponer la condición económico-financiera del negocio, atendido el continuo incremento verificado en los costos operativos", añadió. El resultado operativo arrojó una pérdida de $ 410 millones (en 2010 había sido de $ 70 millones).
La situación de Edesur es similar a la de otras distribuidoras de jurisdicción nacional, pero no a la de aquellas compañías que responden a regulaciones provinciales. En 2010, Edenor había perdido $ 74 millones y Edelap (que hace poco pasó a depender de la provincia), $ 89 millones. En cambio, EDEA (centro y este bonaerense) y Edemsa (de Mendoza) registraron ganancias netas por 37,5 millones y 19,1 millones, respectivamente.
La semana pasada, Endesa Costanera, la mayor generadora térmica del país, anunció ayer que durante 2011 registró pérdidas netas por $ 170,7 millones. Y también atribuyó el resultado a "la insuficiente remuneración de la energía generada cuyo precio no refleja los aumentos de costos experimentados".
El ministro De Vido le recordó "las fabulosas ganancias que obtuvo en los últimos 20 años" y dijo que la difusión de resultados negativos era "una operación mediática" destinada a evitar avances en el proceso de revisión de costos.
A comienzos de 2011, luego de una serie de cortes de luz, De Vido había amenazado con quitarle la concesión a Edesur. La tensión se aquietó cuando el CEO de la española Endesa (propiedad del grupo italiano Enel), Andrea Brentan, se reunió con las autoridades locales y se comprometió a invertir $ 550 millones durante 2011. No obstante, De Vido le aplicó multas por $ 64 millones, muy por encima de los valores que debieron pagar Edenor y Edelap.
DEJÓ SU CARGO EL CEO DE EDENOR
Renunció ayer Alejandro Mac Farlane, CEO de la eléctrica Edenor, y ahora se hará cargo de Edelap, con actividad en la provincia de Buenos Aires. Fue uno de los aludidos por la Presidenta el día en que cuestionó el nivel salarial de los ejecutivos, según interpretaron muchos empresarios.
Pérdidas de argentina Edesur en 2011 se elevaron al 770 por ciento
EFE
La distribuidora de electricidad Edesur, filial argentina de la española Endesa, registró el año pasado una pérdida neta de 461 millones de pesos (105,7 millones de dólares), un 770 por ciento más que el rojo obtenido en 2010.
La empresa dijo en un comunicado que obtuvo ese resultado "como consecuencia del retraso tarifario que provoca un desequilibrio entre ingresos y gastos operacionales".
La compañía registró en 2011 unas pérdidas operativas por 410 millones de pesos (94 millones de dólares), que se compara con una pérdida de 70 millones de pesos (16 millones de dólares) en 2010.
En tanto, las inversiones de la empresa ascendieron en 2011 a 680 millones de pesos (156 millones de dólares), un 52 por ciento más que en 2010.
Edesur dijo que "las pérdidas registradas a lo largo de los últimos años, se originan en el progresivo deterioro de la ecuación ingresos y gastos operacionales de la compañía."
La empresa señaló que es "evidente" que el margen de distribución que percibe a través de la tarifa "es claramente insuficiente para recomponer la condición económico-financiera del negocio, atendido el continuo incremento verificado en los costos operativos".
"Así lo confirman las pérdidas acumuladas durante los últimos dos ejercicios, que ascienden a 514 millones de pesos" (117,8 millones de dólares), destacó la firma, que presta servicios de suministro de electricidad en la capital argentina y su periferia.
Edesur dijo que, pese a estos restados y "con el objeto de proveer el mejor servicio posible y satisfacer de manera adecuada el crecimiento de la demanda", entre 2010 y 2011 sus inversiones sumaron 1.128 millones de pesos (258,7 millones de dólares).
"Los esfuerzos realizados ratifican el compromiso de la compañía para seguir prestando el servicio de distribución eléctrica en los niveles requeridos y que los usuarios merecen", aseguró la distribuidora, que en 2010 registró una pérdida neta de 53 millones de pesos (12,1 millones de dólares).
