PROTESTAS OBLIGAN A PARALIZAR CAMISEA
El Diario Financiero, Chile
El consorcio
Perú LNG decidió detener las obras de construcción de la planta de licuefacción de Camisea en ese país, por las protestas que vienen realizando desde el lunes los obreros de Construcción Civil de Chincha.
Los reclamos apuntan a demandar a la empresa concesionaria la contratación en partes iguales de obreros de las provincias peruanas de Cañete y Chincha, ya que la planta se construye en el límite entre ambas.
La empresa señaló que la suspensión de las obras se decidió como una manera de resguardar la seguridad de sus trabajadores y de la población que vive en las zonas aledañas.
Según la gerente general de Perú LNG, Bárbara Bruce, las oficinas de la firma han sido atacadas, se han prendido neumáticos y varios autos han sido apedreados. Trabajadores de la provincia de Chincha intentaron tomar durante la madrugada de ayer el terreno donde se construye la planta de licuefacción.
Bruce descartó que detrás de las protestas estén los trabajadores de Perú LNG, asegurando que son los dirigentes del Sindicato de Trabajadores de Construcción Civil los que están fomentando los disturbios.
El plan, que considera una inversión de US$ 2.000 millones, incluye la construcción de un puerto y una tubería paralela al gasoducto que lleva el combustible a la costa desde los campos de Camisea, ubicada en la selva sudeste del Perú. Perú LNG prevé exportar el gas natural a México a partir 2009, y estima que los envíos anuales ascenderían a US$ 1.500 millones.
El consorcio Perú LNG está integrado por la estadounidense Hunt Oil, la surcoreana SK y la española Repsol YPF.