FEBRERO REGISTRÓ OTRO DATO POLÉMICO DE INFLACIÓN: 0,3%
La Nación, Buenos Aires
Siguen las dudas sobre la medición de turismo y prepagas; la canasta básica subió 0,8%
El índice de precios minoristas (
IPC) registró en febrero una muy leve suba del 0,3% que, como en enero, originó fuertes dudas por los rubros del turismo y la medicina prepaga, mientras que la canasta básica alimentaria exhibió una importante suba del 0,8 por ciento.
En medio de otra protesta de sus trabajadores, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (
Indec) difundió ayer el segundo índice del año, después del polémico 1,1% de enero; la inflación minorista acumuló así un alza del 1,5% en el primer bimestre del año, la que se ubica 0,2 puntos menos que en el mismo período de 2006. Por rubros, alimentos y bebidas subió 0,7%; vivienda y servicios básicos, 0,6%; equipamiento y mantenimiento del hogar, 1,3%; transporte y comunicaciones, 0,4%, y educación, 0,3 por ciento.
Mostraron bajas la indumentaria, 1,4%; atención médica y gastos para la salud, 0,6%, y esparcimiento, 0,8 por ciento. La carne exhibió una baja del 0,2% y las frutas del 0,6%, mientras que las verduras subieron 0,1%, según el relevamiento del Indec, que ahora está controlado por Beatriz Paglieri, una funcionaria designada por el polémico secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
Alimentos y bebidas consumidos fuera del hogar crecieron 1,3%, un índice similar al de los alquileres de viviendas y cerca de las bebidas (1,2 por ciento).
La caída más importante y curiosa fue la del sector de turismo, con 3,9%, ya que no se tomaron en cuenta los paquetes al exterior y sólo se relevaron los destinos en los que la Secretaría de Turismo logró "paquetes con descuentos".
Los servicios para la salud cayeron 0,8% porque se midieron sólo los planes con copagos en las prepagas (a los que se les anuló el aumento del 2% que habían anunciado) y se descartaron aquellos sin adicionales, sobre los que se aplicó un aumento del 22% invisible para los registros oficiales.
La inflación "resto", que no considera la estacionalidad ni los precios regulados, fue del 0,7%, mientras que la sensible canasta básica alimentaria subió 0,8%, por lo que si se suma el 2,6%, ya presentó un aumento del 3,4% en los primeros dos meses del año. El Ministerio de Economía señaló que la canasta se ubica en $ 428,65 y que la suba estuvo traccionada por productos de panificación, lácteos y aceites, mientras que hubo una baja significativa en pollos (3,8) y no varió el valor de la carne vacuna.
Según el Palacio de Hacienda, en los últimos 12 meses se registró una suba del 9,1% en la canasta, lo que equivale a 5,9 puntos menos que el acumulado en los 12 meses previos. Además, Economía destacó que, a diferencia de lo que ocurría a principios de 2006, los bienes y servicios exhiben ahora subas "más homogéneas": 0,4 y 0,2 por ciento, respectivamente.
Por otra parte, el índice de precios mayoristas aumentó un 0,7% por el aumento de la energía eléctrica a los grandes usuarios (16,9%) y los productos primarios el 1,3%. Igual resultado (0,7%) presentó el índice de precios de la construcción, empujado por la energía que derivó en "gastos generales", que crecieron un 4,2 por ciento.
Los analistas consultados por LA NACION se dividieron entre quienes creen que el IPC ya perdió credibilidad y los que afirman que si bien el Gobierno le dio un "sesgo" al cambiar los valores en turismo y la prepagas, el valor de febrero pasado fue parecido al de 2006 (0,4%). Además, tal como indicó Economía & Regiones, "el Gobierno no obtuvo el resultado en su política de acuerdo de precios, ya que varios rubros incluidos en los convenios, y particularmente los de la alimentación, fueron los que más subieron".
Luciano Laspina, de Macrovisión, dijo que se perdió "un ancla, y eso es peligroso, porque en la medida en que la demanda convalide los aumentos de precios éstos subirán, más allá de que sean medidos o no por el IPC. El Gobierno revisa cuando los precios suben, pero no cuando bajan, lo cual genera una importante distorsión", expresó Laspina.
Por el contrario, Enrique Dentice, de la Universidad de San Martín, dijo que el IPC de febrero "no contiene mentiras, sino que se repiten los componentes inerciales de febrero de 2006". Agregó que en este mes puede haber un salto importante por la educación, ya que más allá de cómo se contabilicen las cuotas en los colegios privados "los útiles subieron 30 por ciento", junto con el turismo.
"En el año vamos a estar en 9,8 por ciento, y hay tres elementos por observar: qué pasa con los servicios, cómo se sale del control de precios y si esta política que alienta el consumo responde a la demanda o no", dijo Dentice.
Los analistas privados habían pronosticado en su mayoría un alza del 0,7 por ciento para febrero, "en buena medida porque se creía que la suba en la medicina prepaga que no se contabilizó en enero se iba a tomar en cuenta en febrero", expresó el economista Jorge Todesca, director de Finsoport.
"El índice no está lejos de febrero de 2006, en el que no hubo ningún escándalo. Si se observa al interior del IPC, se ven los cambios en el relevamiento, no una digitación completa. De hecho, el 0,8 por ciento en la canasta alimentaria refleja que el índice contiene resultados variados", expresó Todesca. Para este mes, agregó, el IPC podría subir 0,9 por ciento.
De ahora en adelante, si se calma la agitación por el IPC, habrá que ver si Economía pone en marcha una discusión amplia sobre los cambios en la metodología del IPC que se estudiaron en 2006 y que quedaron empañados por el conflicto con el Indec.
Por Martín Kanenguiser