SE EXTIENDE EL SERVICIO PREPAGO DE ELECTRICIDAD, SIN CARGOS NI ABONOS
Clarín, Buenos Aires
El ahorro se estima en 30%. Edenor instaló 4.500 medidores en Merlo y Escobar.
Por ahora sigue siendo una experiencia piloto, pero todo indicaría que puede convertirse en una alternativa válida para miles de usuarios.
Se trata del sistema prepago de suministro de electricidad, por el cual los clientes residenciales pueden adquirir la cantidad diaria de kWh que utilizan en sus hogares y lograr un ahorro en el consumo del 30% promedio.
Si bien en algunos lugares del interior bonaerense existen desde la década pasada, los medidores prepagos de electricidad comenzaron a tallar con fuerza a partir de la crisis económica de 2001.
En la región metropolitana, sobresalen en el área de concesión de Edenor. Hasta ahora, la distribuidora tiene instalados 4.400 medidores prepagos en el partido de Merlo y alrededor de 100 en Escobar. Y en el interior del país el servicio se encuentra implementado en varias zonas de Tucumán, Jujuy, Misiones y Mendoza.
El sistema prepago de Edenor va camino a cumplir cuatro años y ya vendió cerca de 1 millón de tickets por valores que oscilaron entre 1 y 10 pesos.
De acuerdo con un informe elaborado por Fundelec (Fundación para el Desarrollo Eléctrico), en los últimos doce meses la cantidad de energía vendida por el sistema prepago de Edenor creció un 21,8% superando la suba del 15,4% que se había registrado entre marzo de 2005 e igual es de 2006.
Si bien esta modalidad de venta y consumo no tiene una fuerte incidencia en el negocio global de Edenor, su aplicación promete seguir creciendo entre los usuarios que no cuentan con ingresos fijos y optan por administrar sus gastos en función de los recursos disponibles.
El sistema funciona de la siguiente manera:
• A los usuarios que registran un comportamiento irregular con la cancelación de las facturas, la distribuidora les ofrece el nuevo servicio prepago que incluye la instalación sin cargo del medidor especial que se ubica dentro de la vivienda.
El medidor denominado "Cashpower" cuenta con un tablero de números similar a un teléfono digital y un visor que informa en tiempo real la cantidad de kWh disponibles y el nivel de carga que aún le queda al usuario.
• Junto con la instalación del equipo, el usuario recibe una tarjeta magnética que utilizará para adquirir los tickets de energía en las máquinas expendedoras y para introducir los kWh comprados en el medidor de su casa.
• Las cargas de energía prepaga se pueden adquirir en las oficinas comerciales de Edenor o en las máquinas expendedoras que son similares a las boleteras de los colectivos y se encuentran en las estaciones de servicio, locutorios y la terminal de trenes de Merlo. Según la normativa vigente, las expendedoras automáticas deben estar a no más de 15 cuadras del domicilio de los usuarios y en lugares que permanezcan abiertos la mayor parte del día.
Las máquinas aceptan únicamente monedas y la carga mínima es de 1 peso. Con billetes sólo se pueden adquirir tickets en las oficinas comerciales.
El 95% los tickets vendidos hasta ahora correspondieron a valores inferiores a los 6 pesos y el 33% de los pagos anticipados oscilaron entre 1 y 2 pesos.
Al sacar un ticket de 1 peso, se adquieren 10,5 kWh de energía que, en promedio, equivalen a un día y medio del consumo eléctrico que tiene una familia.
Tal como está planteado, el sistema prepago tiende a beneficiar tanto a las empresas distribuidoras como a los usuarios, que según los cálculos de Fundelec y los técnicos del sector pueden lograr un ahorro de hasta el 30% respecto a los clientes tradicionales.
Las compañías eléctricas se ven beneficiadas por varios motivos: la morosidad se reduce a cero, no tienen que pasar a leer los medidores cada dos meses, afrontan menos costos administrativos, evitan el robo de energía y cobran el servicio por anticipado.
Por el lado de los usuarios, la gran ventaja es que pueden controlar el consumo y hacer un uso racional de la energía. Con el medidor interior que indica cuánto están consumiendo, los usuarios saben exactamente lo que gastan las lámparas y cada uno de los electrodomésticos que tienen en sus casas. También se evitan los trámites y los gastos, que van de $ 7,40 a 46,40, por las reconexiones del servicio derivados de atrasos en los pagos.
"UNA CARGA PARA DOS O TRES DÍAS"
Clarín, Buenos Aires
Cuando ya empezaba a asomar la noche del jueves santo, Damián Alberto Sosa arribó más que apurado a la cola formada frente a la expendedora de electricidad prepaga. Se había olvidado de pasar más temprano y ahora el medidor de su casa tenía la luz roja encendida, señal de que en cualquier momento se iba a quedar sin electricidad por falta de carga.
La máquina salvadora para comprar los tickets está a un lado de la entrada al maxikiosco de la estación de servicio de Saladas y Bebedero en la localidad bonaerense de Merlo.
Antes que Sosa, la que se lleva un ticket de electricidad prepaga es Jésica Gutiérrez, que vive con su familia en la calle Curapaligüe. A cambio de dos monedas de 1 peso, la máquina le entregó un vale con un código que deberá colocar en el medidor por el equivalente a 21 kWh.
"Con esta carga nos alcanza para dos o tres días, según los aparatos que pongamos en funcionamiento", señaló Jésica.
Agregó que "en mi casa tenemos el medidor prepago desde hace tres años y la verdad es que nos resulta muy práctico y conveniente. Podemos controlar lo que gastamos y pagamos menos que antes cuando teníamos el medidor común".
Una vez por semana, Sosa acude a la expendedora automática para comprar anticipadamente el suministro eléctrico. Tras pasar su tarjeta de identificación como usuario prepago, la máquina le pide que ingrese las monedas que quiere cambiar por electricidad.
"Si cuidamos el consumo, con una carga de 5 pesos tenemos para una semana aproximadamente. A nosotros este sistema nos conviene porque nos permite administrar lo que gastamos y no derrochar la electricidad", destacó Sosa.
Para este usuario que reside en Altos de Merlo una de las claves para controlar el consumo es no excederse con el uso del calefón eléctrico, la plancha y las lámparas durante la noche.
A la hora de marcar las desventajas del sistema, apunta que cuando la máquina se rompe, demoran varios días en arreglarla. "En esos casos hay que ir corriendo a los otros lugares para ver si se pueden adquirir los tickets antes de que se corte la luz", señaló Sosa.