El director de Petróleos Mexicanos, Juan José Suárez Coppel, aseguró que como empresa no está buscando más activos petroleros en otros países, sino que busca aprovechar la experiencia de trabajar con industrias con avances mayores a la nuestra.
Por ello, consideró que se podrían obtener buenos resultados si Repsol aprovecha la experiencia de Pemex en materia de mejora de gobierno corporativo, en tanto que la paraestatal mexicana aprendería de sus avances en exploración de aguas profundas.
“Nosotros no estamos buscando activos petroleros, estamos buscando darle más valor al activo del cual somos accionistas. Sentimos que esta colaboración aumenta la valía a las dos empresas”, señaló en entrevista con Jorge Fernández Menéndez para Grupo Imagen Multimedia.
El director de la paraestatal explicó que el rechazo manifestado por Repsol a las acciones que propone, se debe a los deseos de mantener su territorio intacto, y a la tranquilidad que le ofrece su status quo actual.
Sin embargo, detalló que el acuerdo establecido con Sacyr busca conseguir mejores resultados financieros, optimizar la gestión actual, así como el gobierno corporativo de la petrolera española.
“Tenemos un acuerdo, las dos empresas que sumamos más del 29 por ciento de las acciones. Lo que buscamos es encontrarle mayor valor accionista a Repsol”, aseveró.
“Repsol es española, y seguirá siendo española… (pero) Hay oportunidades de mejora en gobierno corporativo. Eso es lo que queremos; y es lo que creemos que deben querer todos los consejeros independientes y todos los accionistas minoritarios y medianos”, indicó.
“Pusimos un ejemplo en el convenio: el separar la presidencia del Consejo de la Dirección General de la empresa”, enunció.
En cuando a la solicitud que presentó la Comisión de Auditoría y Control de Repsol a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de España, para investigar un volumen inusitado de negociación desde que Pemex y Sacyr anunciaran su acuerdo de sindicación, Suárez Coppel aseguró que está tranquilo, pues las autoridades españolas ya descartaron invervenir en el caso.
Juan José Suárez Coppel aseguró que la inversión que se hizo en la empresa ibérica no afecta de ningún modo a las transacciones al interior de la paraestatal.
“Lo que hicimos es invertir en nuestros recursos con nuestras subsidiarias o filiales en el extranjero. Ningún peso que se invirtió en Repsol, pudimos invertirlo en México”, aseveró.
La paraestatal no se endeudó
La Comisión de Energía del Senado acordó reunirse con Suárez Coppel para que les explique los detalles sobre la compra de acciones que le permitió aumentar su participación en la empresa española Repsol.
Anoche, los senadores hicieron público un informe que les envió la Secretaría de Hacienda para explicar que dicha compra no significó deuda para Pemex.
“Es de señalar, que en términos de la normatividad aplicable, P.M.I Holdings, B.V. (subsidiaria de Pemex) no califica como una empresa de participación estatal mayoritaria; es decir, no es una entidad paraestatal”, explica el documento.
“P.M.I Holdings, B.V., celebró operaciones financieras con las que obtuvo parte de los recursos con los que adquirió las acciones de Repsol YPF, SA, sin embargo en dichas operaciones los acreedores no tienen recurso alguno en contra de Petróleos Mexicanos, toda vez que este organismo no fungió como aval, garante, responsable solidario o cualquier otra figura similar, razón por la cual dichas transacciones financieras no se ubican en los supuestos del artículo 1ro. y demás aplicables de la Ley General de Deuda Pública, y por tal motivo, no constituyen deuda pública externa a cargo de Pemex”, aclara el informe.
Proponen dar autonomía a la paraestatal
El Senado abrió ayer la ruta para una segunda reforma a Pemex, esta vez al sacarla del Presupuesto de Egresos de la Federación, para que no sea la Secretaría de Hacienda la que determine sus inversiones o proyectos de desarrollo.
El presidente de la Comisión de Energía, el priista Francisco Labastida; el secretario de la comisión, el perredista Graco Ramírez, y el panista Juan Bueno, hicieron el anuncio y consideraron ilógico que los indicadores macroeconómicos impidan a Pemex invertir en los proyectos necesarios.
Con el planteamiento de los senadores, que también buscarán que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) logre esta liberación presupuestal de Hacienda, Pemex se mantendría como una empresa que entrega una renta al Estado mexicano vía impuestos.
Graco Ramírez explicó que “sacarlo del presupuesto no implica dejar sin recursos al gobierno, es un trato fiscal responsable a una empresa fundamental en el país, de otra manera tenemos lo que es Pemex, una empresa que medio camina, que se privatiza cada vez más sobre la base de las debilidades, no de las bondades”.
El objetivo es que Pemex ahora decida por sí misma, como empresa del Estado, en qué áreas y cuánto dinero canaliza al desarrollo. Así, funcionaría de forma similar a Petrobras, de Brasil, y Statoil, de Noruega, empresas de Estado que generan altas ganancias