Los despedidos de San Antonio, que desde el jueves pasado ocuparon las oficinas del Sindicato de Petroleros Privados en Caleta Olivia, incrementaron el reclamo incendiando cubiertas, mientras aseguran que la empresa Lufkin ofreció puestos de trabajo, pero la intervención del gremio se niega a tomar cartas en el asunto. Se trata del grupo de petroleros que fue despedido después de la extensa vigilia del sector sobre la ruta provincial Nº 12, en el acceso a Cañadón Seco y quienes el jueves pasado ingresaron a la sede del sindicato, donde permanecían hasta anoche.
A través de Voces y Apuntes, los manifestantes explicaron que durante la medianoche se comunicaron con el interventor Carlos Flaquier y el delegado de Lufkin. “Nos dijeron que hay cuatro ingresos para nosotros, pero falta que Flaquier autorice los ingresos a la operadora. Los autoriza o nos vamos a la planta… está jugando con la gente, lo único que tiene que hacer es levantar el tubo y pedir que los autorice”, cuestionaron y especificaron su reclamo: “otro puesto en la empresa Copesa y con eso ya estaríamos, porque el resto se fue porque se cansaron y nosotros no vamos a poner el pecho para que otros consigan trabajo”, dijeron.