Exxon Mobil, la petrolera más grande del mundo, habría firmado con YPF para explotar yacimientos no convencionales que la compañía argentina opera en Neuquén. Mas allá de ser una noticia de negocios, también posee un fuerte condimento político ya que se conoce en medio del embate del Gobierno y de las provincias contra de la petrolera de la familia Eskenazi.
De hecho, la semana pasada el gobierno neuquino le quitó dos concesiones a YPF.
Ahora, en el caso del acuerdo con Exxon Mobil, abarca yacimientos no convencionales o de Shale Oil en la región de Vaca Muerta considerados entre los tres más grandes del mundo.
Exxon Mobil ya posee yacimientos del mismo tipo en la zona en sociedad con la empresa canadiense Americas Petrogas. Ambas anunciaron el año pasado inversiones por u$s 76 millones para explorar y explotar sus activos en los bloques Los Toldos y Yerba Buena.
Tras el acuerdo con YPF, suma un activo considerado estratégico que fue descubierto el año pasado y podría convertir a la Argentina en una potencia petrolera mundial.
El convenio con YPF habría sido impulsado tras la visita al país de ejecutivos de Exxon Mobil quienes se reunieron con funcionarios del Gobierno para anunciar su interés por continuar invirtiendo en la Argentina, en especial en gas y petróleo no convencional.
El encuentro se llevó a cabo el pasado 23 de marzo. Por el Gobierno estuvieron el secretario el de Política Económica, Axel Kicillof; el secretario de Energía, Daniel Cameron, y el subsecretario de Coordinación y Control de Gestión de Planificación, Roberto Baratta, también representante del Estado en YPF.
Por su parte, los ejecutivos de la petrolera protagonistas de la reunión fueron el vicepresidente de Exxon Mobil, Roger Becker; su vicepresidente Ejecutivo, Johnnie Lee Hall; el gerente de Nuevas Oportunidades para América del Sur, Richard Chuchla y el director de Asuntos Públicos de Esso, Tomas Hess.
Según fuentes del mercado, el acuerdo con YPF contemplaría la explotación de uno o dos yacimientos de YPF en Vaca Muerta, con el consentimiento de la gobernación de Neuquén.
A su vez, los ejecutivos de Exxon Mobil también habrían mantenido reuniones con ejecutivos del grupo Bridas para monitorear la venta de la refinería de Esso de Campana al grupo de los hermanos Bulgheroni.
La operación se anunció en septiembre de 2011 y aun no fue aprobada por el Gobierno.
Con el acuerdo con Exxon, YPF busca enviar una señal a los mercados
En medio de la batalla que libra con el gobierno, los directivos de YPF lograron cerrar un acuerdo estratégico para la compañía con Exxon Móbil para explotar el mega yacimiento de Shale Gas y Petróleo de Vaca Muerta, descubierto el año pasado y que ara muchas cambiará la ecuación energética de la Argentina, convirtiendo al país en uno de los principales jugadores en el mundo del fluido.
Es tan evidente el potencial de este yacimiento que la pelea de YPF con el gobierno no movió ni un centímetro el interés de las principales petrolesras del mundo por asociarse con la petrolera que controlan Repsol y los Eskenasi.
Chevron y Shell, dos de las principales cinco petroleras privadas del planeta fueron las que iniciaron las conversaciones con YPF para explotar Vaca Muerta.
Pero según pudo confirmar LPO, ahora se sumó la norteamericana Exxon Mobil, que ya firmó un acuerdo para desarrollar en conjunto al menos un yacimiento de shale oil, según confirmaron a este medio dos fuentes del mercado.
La búsqueda de socios de gran porte se explica por el elevado costo de extraer el denominado "Shale Oil" que está unicado directamente sobre la "roca madre" generadora del hidrocarburo, que es menos permeable y se encuentra a gran profundidad. La ventaja de Vaca Muerta frente a otros gtandes descubrimientos petrolíferos de los últimos tiempos como el yacimiento ubicado frente a las costas de Río de Janeiro, es que no está en el mar, lo que hace económicamente viable su extración con los precios actuales, cosa que no sucede con el yacimiento brasileño.
La negociación
La semana pasada, directivos de Exxon Mobil –la mayor petrolera privada del mundo, que en el país está cerrando la venta de su refinería de Campana a Bridas, de los hermano Bulgheroni- se reunieron con funcionarios del Gobierno para brindarles detalles de su plan de exploración de yacimientos no convencionales en Neuquén.
Del encuentro participaron el vicepresidente de Exxon Mobil Exploration Company, Roger Becker; su vicepresidente Ejecutivo, Johnnie Lee Hall; el gerente de Nuevas Oportunidades para América del Sur, Richard Chuchla y el director de Asuntos Públicos de Esso, Tomas Hess, entre otros representantes de la compañía. El Estado estuvo representado por el secretario el de Política Económica, Axel Kicillof, cada vez más ascendente en el control de cuestiones ligadas al sector petrolero, el de Energía, Daniel Cameron, y el subsecretario de Coordinación y Control de Gestión de Planificación, Roberto Baratta.
Los ejecutivos norteamericanos aprovecharon su visita a Buenos Aires para cerrar los detalles de su asociación con YPF en una o dos áreas de Vaca Muerta, donde prevén colocar fuertes inversiones. El joint venture cuenta además con el visto bueno de la gobernación neuquina, que estima que en los próximos cinco años deberán desembolsarse US$ 28.000 millones para monetizar las reservas de shale oil y shale gas, según cuantificó el mandatario Jorge Sapag a fines de febrero.
ExxonMobil ya controla 800.000 acres –algo así como 320.000 hectáreas- en Neuquén, en asociación con la canadiense Americas Petrogas, con la empresa provincial Gas & Petróleo (está asociada con la local Ingeniería Sima), y ahora con YPF. Sin embargo, la empresa norteamericana no hará grandes anuncios de inversión hasta que no concluya la embestida del Gobierno contra la petrolera íbero-argentina, que mantiene en vilo a la industria desde principios de año.
Primeros pasos
“El desarrollo de un campo no convencional exige mucha inversión, porque implica construir algo así como una fábrica de pozos para poner en producción los yacimientos de shale oil”, señaló un petrolero que está al tanto de la negociación. ExxonMobil tiene participación en las áreas Los Toldos y Yerba Buena (con Americas Petrogas), y en La Invernada y Bajo del Choique, junto con Gas & Petróleo e Ingeniería Sima. Resta conocer aún los nombres de los bloques que explorará en conjunto con YPF.
En Los Toldos, la petrolera está perforando cuatro pozos verticales de más de 3000 metros de profundidad. Ya extrajo muestras que se están evaluando en los laboratorios de la empresa en Estados Unidos para determinar las características de los reservorios. Se estima que la perforación le demandará más de US$ 50 millones.
Sin embargo, los desembolsos podrían crecer sideralmente en los próximos años. Según explicó Güimar Vaca Coca, director ejecutivo de la canadiense Americas Petrogas, “en los próximos cinco años vamos a desembolsar (en las áreas que explora de forma conjunta con ExxonMobil) entre 1.500 y 2.000 millones de dólares para desarrollar las áreas de Neuquén, fundamentalmente en lo que se refiere a campos no convencionales de petróleo y gas”.
La formación Vaca Muerta de la Cuenca Neuquina posee recursos gasíferos por 774 trillones de pies cúbicos (TCF’s), según datos del Departamento de Energía de EE.UU. (DOE, por su sigla en inglés). De ahí el fuerte interés de las grandes petroleras norteamericanas por desembarcar en la zona. Se trata, según cuantificó el organismos, del tercer lugar con mayores recursos hidrocarburíferos no convencional del planeta, detrás de China y EE.UU. De hecho, en otro play de Vaca Muerta, YPF realizó en diciembre un descubrimiento de 927 millones de barriles de shale oil.
Río Negro
La empresa YPF cerró un primer acuerdo con Exxon Mobil para explorar de manera conjunta áreas hidrocarburíferas que están sobre la apetecible formación geológica Vaca Muerta en esta provincia.
La asociación tiene un mensaje pues se concretó en el marco de la embestida que el gobierno nacional lleva adelante contra la firma hispanoargentina, que busca una alianza que le permita rápidamente multiplicar la exploración y producción de petróleo y gas.
Es que firma norteamericana (la empresa privada más importante del mundo) estaría además interesada en ampliar la alianza en los diferentes bloques que YPF tiene en la Cuenca Neuquina. Si bien a Vaca Muerta se la suele identificar como un megayacimiento se trata de varias áreas (potenciales yacimientos) sobre la formación geológica que lleva ese nombre. E YPF tiene la concesión de 12.000 de los 30.000 kilómetros cuadrados y ha anunciado allí recursos potenciales de 927 mil millones de barriles. La escala de los recursos se multiplica según el informe de una reputada consultora.
Exxon podría transformarse en el socio capitalista que busca YPF para poner en producción las áreas más apetecidas por la industria petrolera en todo el mundo.
La empresa, además, conoce al dedillo este tipo de desarrollos y tiene la tecnología que se requiere para optimizar la producción.
La empresa norteamericana tiene además una excelente relación con el gobierno de Jorge Sapag. De hecho fue la primera en adquirir áreas a partir de una gestión que encabezaron el ministro de Energía Guillermo Coco y el presidente de Gas y Petróleo de Neuquén Rubén Etcheverry,
Fuentes contaron que la semana pasada Sapag y el ministro de Energía mantuvieron una extensa reunión con directivos de Exxon en Buenos Aires.
Las mismas fuentes confirmaron que hubo reuniones con autoridades de Nación y con directivos de YPF.
La compañía no quiso confirmar ni desmentir el acuerdo sellado con Exxon, difundido ayer por el sitio Política On Line.
Exxon, que ya tiene un pie en la provincia, desde hace tiempo está instalada con oficinas en la capital neuquina. La idea de asociarse es para explorar áreas de Vaca Muerta lo más pronto posible.
Con todo, a pesar de la tormenta que desató la embestida de Nación contra YPF, el interés sobre las áreas petroleras que están sobre la formación Vaca Muerta no decrece sino que aumenta.
Exxon tiene en Neuquén dos áreas: Bajo del Choique y La Invernada. En ambas es socia con Neuquén a través de G&P, cabeza de lanza en la estrategia de la provincia para aprovechar la riqueza que se espera derrame la explotación no convencional.