SECCO ENCABEZADOGrupo AGVgolden arrow
MAPAL ENCABEZADOPIPE GROUP ENCABEZADCONOSUR ENCABEZADO
Induser ENCABEZADOWICHI TOLEDO ENCABEZADOWEG
VELADERO ENCABEZADO
KNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADOOMBU CONFECATSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
HIDROCONSTRUCCIONESSERVICIOS VIALES SANTA FE ENCABEZADO MININGRIO TINTO LITHIUM
VICUÑANEWMONT COVID
LITHIUM SOUTHCRISTIAN COACH ENCABEZADOGSB ROTATIVO MINING
RIO TINTO RINCONHIDROAR ENCABEZADO
INFA ENCABEZADOABRASILVER ENCABEZADORUCAPANELEPIROC ENCABEZADO
ARGENTINA COBRE ENCABEZADOJOSEMARIA ENCABEZADOCERRO VANGUARDIA
JOFREEXAR ENCABEZADO
Argentina lithium energyGENNEIA MININGMilicic ENCABEZADO
SACDE ENCABEZADOEMERGENCIAS ENCABEZDODELTA MINING
glencore PACHONERAMET CABECERAPAN AMERICAN SILVER
FERMA ENCABEZADOMANSFIELD MINERA HCINTER ENCABEZADO
Internacionales
ARGENTINA: CRISTINA Y DILMA SE REÚNEN POR PROYECTO DE VALE
25/04/2013
Guido Braslavsky

Cristina: YPF será profesional, pero bajo dirección política

Clarín

En un acto que tuvo el clima de los grandes eventos de la era kirchnerista, la presidenta Cristina Kirchner firmó ayer el decreto 660 de promulgación de la ley de expropiación de YPF, y sin tiempo para el suspenso, anunció que el nuevo número uno de la petrolera será Miguel Galuccio, un ingeniero entrerriano de 44 años experto en exploración que se formó en los 90 en la YPF privatizada.

En el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, repleto de funcio- narios, legisladores e invitados, y adonde llegaban los cantos de los militantes que llenaban las galerías de la planta baja, la Presidenta avanzó en definiciones sobre lo que espera de la petrolera nuevamente bajo control del Estado: una empresa "moderna y competitiva", y planteó que se está frente al "desafío histórico de demostrar que desde el Estado se puede ser eficiente".

Aunque insistió en la idea de una YPF con "perfil profesionali- zado", aclaró que "no quiere decir que no vaya a tener dirección política". Pero, en lo que se interpretó como una diferenciación de la experiencia de Aerolíneas Argentinas, que pierde millones de dólares mensualmente y está conducida por sus funcionarios de La Cámpora, la Presidenta aseguró: "Esto (YPF) no va a ser para becas políticas, donde ponemos al político de turno". En línea con disipar esos fantas- mas podría situarse la decisión de encumbrar a Galuccio, ejecutivo "exitoso" en el mundo del petróleo, que es hermano de un dirigen- te industrial de Entre Ríos y cuyo nombre fue propuesto a Cristina por el gobernador de esa provincia, Sergio Urribarri.

El acto de ayer se produjo me- nos de 24 horas después de que la Cámara de Diputados sancionara el jueves la ley por una amplia mayoría de 208 votos a favor, 34 en contra y 5 abstenciones. Todo en un trámite legislativo express que cumplió con las urgencias de la Rosada. La Presidenta, vale recordar, anunció la intervención de YPF y el envío al Congreso del proyecto para expropiar el 51% de las acciones de la española Repsol, el 16 de abril. Para ese momento, según se puede reconstruir aho- ra, Cristina ya había definido que Galuccio -con quien mantuvo una larga entrevista secreta en El Calafate el 4 de abril- iba a ser el nuevo CEO de la petrolera.

Claro que el plan de retomar el control de YPF había arrancado mucho antes. En un vertiginoso giro de su anterior discurso elogioso del management "nacional" del grupo Eskenazi -que desembarcó en Repsol por obra de Néstor Kirchner-, la Presidenta había pisado fuerte el acelerador al regresar de su licencia por la operación de tiroides, a fines de enero, cuando en su reaparición embistió contra las petroleras al advertir que el año pasado se habían tenido que impor- tar más de 9.300 millones de dólares en combustibles, 110% más que en 2010, por falta de inversiones y caída en la producción.

Frente a estos números que in- quietaban profundamente y en un contexto de fuga de divisas, para el Gobierno retomar el control de YPF aparece como una jugada estratégica tan trascendente como fue en 2009 la recuperación de los fondos jubilatorios con la eliminación del sistema de las AFJP.

La Presidenta no dejó de recor- dar la situación de YPF previa a su privatización en 1992 (varios protagonistas entusiastas de ese proceso de la década menemista, hoy reconvertidos, estaban senta- dos ayer en el Salón de las Mujeres celebrando el camino inverso), cómo había sido endeudada y las pérdidas que tenía. Y advirtió que esto "no puede volver a suceder".

Cristina hizo también fuertes reclamos de "reinversión" a los empresarios en general y pidió "un gran esfuerzo" a los trabajadores del petróleo (Ver página 12); y aunque no mencionó que dos tercios de la producción nacional de hidrocarburos seguirá en manos de otras privadas, confió que este paso con YPF implicará un "compromiso de todas las empresas del petróleo" con los objetivos nacionales.

 


 

Duros reclamos a empresarios y gremios en medio de los festejos

Clarín

C on tono enérgico y delante de una platea que la cortejaba en todo momento ­ y que comprendía desde ministros y altos funcionarios hasta sindicalistas y militantes de La Cámpora ­, Cristina Kirchner aprovechó la promulgación de la ley de la expropiación de YPF para enviarles un fuerte mensaje a los empresarios y a los sindicalistas.

La Presidenta instó a los líderes de empresas a "reinvertir utilida- des para no repetir historias y seguir con este crecimiento sostenido", y les anticipó que tendrán que "ajustar bien sus costos porque no vamos a pagar costos ridículos". Y en seguida lanzó una frase que seguramente hará mucho ruido: "Necesitamos eficiencia y ser vivos: Trabajar casi al costo pa- ra desarrollar con más fuerza la industria. Por eso pedimos a los empresarios la reinversión de utilidades, porque además la han juntado en pala en estos 9 años. No me molesta que ganen plata, pero también esa rentabilidad debe ser acorde al desarrollo y sustentabilidad de la economía", expresó en Cadena Nacional.

Los sindicalistas tampoco se la llevaron de arriba. En el mismo tono de reclamo con el que se había referido a la clase empresaria, Cristina les sugirió a los gremios que no se conviertan en "sectas o corporaciones" y afirmó que "nadie restituyó más derechos a los trabajadores" que ella y su esposo, Néstor Kirchner.

En el acto, como era de imagi- nar, no estaba el jefe de la CGT, Hugo Moyano, enfrentado con la Casa Rosada desde hace un buen tiempo y aparentemente sin posibilidad de retorno. Sin embargo, en la primera fila se lo vio a su hijo, el diputado Facundo Moyano, quien aplaudía muy tibiamente, notoriamente incómodo. También estaban Antonio Caló, quien aspira a suceder a Moyano, el taxista Omar Viviani y el diputado moyanista Héctor Recalde.

La Presidenta afirmó que "es necesario que comprendan todos nuestros dirigentes que todavía faltan hacer muchas cosas en el país", y puntualizó que "la palabra sindicato viene de solidaridad, no viene de corporación o de secta, viene de solidaridad".

"En base a esa solidaridad es que tenemos que pensar en los ar- gentinos y argentinas que todavía tiene que recibir una asignación universal por hijo", señaló.

Además, Cristina aseveró que "nadie como el gobierno de Nés- tor Kirchner" y el suyo propio "restituyó los derechos de los trabajadores que los habían perdido por décadas". Esa declaración, poco después, recibió respuesta del moyanista Julio Piumato (judiciales), quien escribió en la red social Twitter que "los que más dieron a los trabajadores fueron Perón y Evita".

Por otra parte, la Presidenta con- denó los paros de los sindicatos del petróleo y les pidió a los trabajadores del sector "no perder un solo segundo de extracción por conflictos laborales". Y detalló: "Los trabajadores del petróleo son de los mejores remunerados del país. Les pido a todos los trabajadores, que tienen la inmensa suerte de ser bien remunerados y estar en blanco, que pongan un gran esfuerzo porque no puede la provincia de Santa Cruz, Chubut, Mendoza, Neuquén, perder un solo segundo de extracción de petróleo por conflictos laborales", afirmó.

La jefa de Estado advirtió que las medidas de fuerza en el ámbito pe- trolero son "absolutamente injustas para el resto de los argentinos y para los millones que todavía no tienen trabajo".

 

Anuncio. Cristina durante el acto en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada en la que promulgó la ley de expropiación de YPF. Hubo un clima festivo de militantes y funcionarios.

Martín de Vedia y Mitre

Cristina: “YPF nos va a exigir un desafío. Debe ser una empresa moderna y alineada con el país"

BAE


Gestión, gestión y gestión es la palabra que repiten en la Casa Rosada y en cada uno de los ministerios cuando buscan definir el período que se abre hoy desde la nacionalización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales hasta las elecciones legislativas del año que viene. La presidenta Cristina Fernández inicia así un nuevo ciclo en el que buscará institucionalizar los cambios hechos para dejar una base de conquistas económicas, políticas, sociales y de libertades individuales al dejar la primera magistratura.

En ese sentido, al reivindicar la nacionalización de la petrolera, ayer Cristina manifestó: “Esta decisión también va a exigir por parte de todos los argentinos, y específicamente por aquellos que tenemos responsabilidades institucionales, sean oficialistas u opositores, el desafío también de una YPF moderna, competitiva, alineada con los intereses del país. Porque no es cierto que no se puedan alinear los intereses de una empresa privada con los de un país; al contrario, cuando se desalinean los intereses de las empresas de los intereses del país, cuando se hace mayor hincapié únicamente en la renta financiera es cuando se caen los países y es cuando se cae el mundo, que es lo que pasó en el año 2008 y lo que nos pasó a los argentinos en el año 2001”.

La de la gestión es una carrera contra el tiempo que los funcionarios de mayor confianza de la Presidenta ya iniciaron, muy parecida a la que se vivió a partir del 25 de mayo de 2003 y que se denominó “Estilo K”. La diferencia es que el país salió del “infierno” y el Estado retomó muchos de los hilos de la política económica de la Argentina, con una ANSES potenciada con la recuperación de los fondos jubilatorios, el desendeudamiento internacional y la reforma a la Carta Orgánica del Banco Central. Las nuevas áreas de gestión, antes dejadas en manos de las corporaciones privadas, precisan de nuevos técnicos que se hagan cargo.

Desde entonces hasta ahora, sobre todo en los últimos meses, ingresó en la gestión pública una amplia camada de jóvenes que en silencio, día a día, se ocupa de llevar a la práctica las políticas de Cristina. La Presidenta busca que sumen experiencia, ralearlos en la gestión, para que sean ellos los que mantengan altas las banderas del kirchnerismo, más allá del 2015.

Por eso, y como es habitual en el Frente para la Victoria, no habrá definiciones electoralistas hasta que finalice el año político. Ya suficiente habrá con las elecciones de la CGT del próximo 12 de julio, donde el actual secretario general, Hugo Moyano, buscará continuar un período más frente a las intenciones del metalúrgico Antonio Caló.

Ninguno de los analistas sindicales consultados se esperanza por estas horas con que la disputa se resuelva ese día y “el que pierda acompañe”. Así se viene una reestructuración completa del mapa político de los gremios con la Casa Rosada, donde no es descartable que se ponga en debate el modelo sindical ni el sistema argentino de salud, dos verdaderos temas tabú en Azopardo 802.


“Desde los 90 que soñábamos con este día”

Los miles de manifestantes que llegaron ayer a la Plaza del Congresos para celebrar la nacionalización de YPF no debieron esperar hasta la madrugada para demostrar su alegría, como ocurrió en el debate de la ley de medios. La votación, por amplio margen, llegó pasadas las 21 y encontró en la misma plaza a los militantes de La Cámpora, Movimiento Evita, Kolina, Corriente Peronista Descamisados, Tupac Amaru, la Juventud Sindical, Sadop, Foetra y la Federación Argentina de Municipios.

“Éste es un día de consenso y mirando hacia adelante con todo el futuro que queda y que se está por construir”, manifestó el secretario general de La Cámpora, Andrés “El Cuervo” Larroque. Y Fernando “Chino” Navarro, del Movimiento Evita, puntualizó: “Quienes militamos en los ’90 y vimos cómo se destruía el Estado y el aparato productivo soñábamos con este día, pero no sabíamos si alguna vez iba a llegar”.

Los muchachos de Facundo Moyano llegaron pasadas las 17 con un par de jóvenes disfrazados como surtidores de YPF a la cabeza de la columna, que avanzó por Rivadavia y se ubicó por Yrigoyen. También fue nutrida la militancia de la Tupac Amaru, que con su orden tan particular se embanderó frente al Congreso. “YPF, CFK, son nuestras, son argentinas”, decían algunas de las banderas y las remeras que se vendían en el lugar. Florencia Kirchner, como una más, recibió el afecto de decenas de jóvenes, trabajadores y ancianos que se le acercaron a saludarla.

Los dirigentes de las organizaciones políticas, sociales y sindicales que festejaron afuera, celebraron la ley adentro del Congreso, desde las tribunas del recinto.


Hitos de la política petrolera

1922
Siguiendo los pasos de Hipólito Yrigoyen, le tocó a Marcelo Torcuato de Alvear la tarea de transformar la primigenia Dirección de Yacimientos Petrolíferos Fiscales en una nueva compañía estatal con presencia integral en toda la cadena del negocio petrolero. El mandatario nombró a Enrique Mosconi al frente de la empresa. La creación de YPF y el lanzamiento de la construcción de la refinería de La Plata (1922) se anticipó a la resonante nacionalización de las compañías norteamericanas que el general Lázaro Cárdenas decretó en 1938 en México, en una etapa previa (1938) al estallido de la Segunda Guerra Mundial.

1958
Contrariando lo escrito en su libro sobre política y petróleo, el presidente Arturo Frondizi, en 1958, resolvió lanzar una “batalla del petróleo” basada en la firma de contratos de producción y exploración con empresas privadas argentinas y del exterior, como Amoco, Astra, Shell y la Banca Loeb que facilitaron en cuatro años triplicar la producción de hidrocarburos, líquidos y gaseosos. Además comenzó un activo proceso de expansión de la ex Gas del Estado y el tendido de nuevos gasoductos que ayudaron a la sustitución de crudo.

1963
Confirmando los postulados de su prédica política de 1963, Arturo Illia elevó al Congreso la consideración de la anulación de los contratos petroleros que fueran considerados leoninos o insanables.
Sin embargo, algunos de esos acuerdos, como el suscrito con la ex Amoco, se revirtieron en contratos de perforación al servicio de la estatal YPF.

1999
El 1º de julio de 1999 la administración de Carlos Menem rompió con la ortodoxia que en materia energética había preconizado por décadas el justicialismo y resolvió profundizar el proceso de apertura y desregulación del sector petrolero lanzado en 1991. En esa dirección, aceptó que la española Repsol concretase a un costo de u$s15.046 millones la compra, a través de una OPA (oferta pública de acciones), la adquisición del 99,22% del capital social de YPF integrado por 353 millones de títulos que estaban en propiedad de las provincias productoras, los inversores bursátiles privados y el Estado nacional.

2008
El presidente Néstor Kirchner transfirió en febrero de 2008 un 10% del capital social de YPF al Grupo Petersen Energía con la idea de avanzar hacia la “reargentinización” de los negocios de esa petrolera, tal como antes se había inducido con la eléctrica Edenor y con Transener. Luego el grupo argentino optó por comprar otro 14,99% del capital de YPF.

2012
Ante el grave desabastecimiento energético registrado en 2011, cuyo crecimiento del PBI de 8,9% obligó a importar GNL, gas natural y combustibles por u$s9.000 millones, la jefa del Estado resolvió renacionalizar el 51% de YPF siguiendo el esquema mixto de una Petrobras liderada por el Estado. La meta política del autoabastecimiento busca torcer doce años de caída imparable de la producción petrolera que Repsol nunca logró torcer por culpa de su baja inversión.

 


 

“No es incompatible la eficiencia con la patria”

Página 12. Nicolás Lantos

Con un llamado a empresarios y trabajadores para que colaboren con el Estado para sacar adelante a YPF en su nueva etapa, Cristina Fernández de Kirchner promulgó ayer la ley que prevé la expropiación del 51 por ciento de las acciones de la petrolera, además de declarar de interés público la exploración, extracción, industrialización y comercialización de hidrocarburos, menos de 24 horas después de que el Congreso le diera sanción por amplia mayoría. En su salsa, la Presidenta alternó bromas con duras críticas, tanto al capital como a los sindicatos, y anunció que la gerencia general de la empresa quedará en manos de Miguel Galluccio, un ingeniero repatriado que había formado parte de YPF durante la década del ’90. “La idea es esencialmente una YPF absolutamente moderna y competitiva, con gente profesional y con dirección política, con la meta de tener autoabastecimiento y superávit carburífero que sostenga el crecimiento de la actividad y el empleo. No es incompatible la eficiencia con la patria”, marcó la cancha la mandataria ante un Salón de las Mujeres abarrotado de figuras de primera línea del Gobierno y por cadena nacional.

“Yo les dije en este mismo lugar, el 16 de abril, cuando envié el proyecto de ley al Parlamento, que íbamos a tener una YPF con un perfil absolutamente profesionalizado, lo cual no quiere decir que no tenga dirección política. Cuando el mundo andaba bien, las empresas estaban alineadas con los intereses de sus países. Cuando las empresas se desprendieron de los intereses de sus países fue finalmente cuando implosionaron esos países. Por eso yo creo que no hay que confundir política partidaria con política de un país en materia de recursos naturales y estratégicos”, recordó.

A su derecha se encontraban los gobernadores y buena parte de su gabinete; a la izquierda, el vicepresidente, Amado Boudou; el ministro de Planificación, Julio De Vido; la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkés, y los jefes de bloque del Frente para la Victoria en ambas Cámaras, que recibieron una mención especial por el rol que jugaron en la sanción de esta ley. “Quiero, una vez más, agradecer a los distintos partidos de la oposición que acompañaron este proyecto, más allá de las lógicas diferencias que tiene que plantear un partido político de la oposición. Lo cierto es que por primera vez tenemos una ley votada con una mayoría como no se había obtenido otra desde el año 2003 a la fecha –señaló–. Y también a nuestra propia fuerza política, porque –como decía ayer nuestro presidente de bloque, el diputado Agustín Rossi– ‘somos un movimiento político que sostiene sus convicciones ya sea con aplausos o con huevazos’.”

En el salón no cabía un alfiler: la primera fila la compartían referentes de La Cámpora como Andrés “Cuervo” Larroque, José Ottavis y Wado De Pedro, con algunos aliados del Gobierno, como el diputado Martín Sabbatella. Junto a ellos, algo nervioso, estaba Galluccio, el flamante CEO de YPF. Sorprendió la presencia de Facundo Moyano y del dirigente de taxistas, Omar Viviani, a pocos asientos de distancia del titular de la CTA, Hugo Yasky. Más atrás completaban la platea la concurrencia habitual: dirigentes, referentes de asociaciones de derechos humanos, empresarios y figuras de la cultura afines al Gobierno.
La posta

“No se puede criticar la emoción, si eso es lo que nos convierte en humanos. Dios nos libre de gobernantes que no sean capaces de tener emociones y sentir emociones”, destacó la mandataria, recordando un pasaje de la sesión legislativa del día anterior, en el que la diputada Anabel Fernández Sagasti destacó que “así como los ferrocarriles definieron la vida de tantísimos otros pueblos, YPF moldeó la historia de casi toda la Patagonia: Caleta Olivia, Pico Truncado, Las Heras, Cañadón Seco, que eran campamentos petroleros que terminaron convirtiéndose en ciudades”.

La Presidenta volvió a destacar “la conformación de un equipo de gente joven” y tomó al caso de Galluccio como un doble ejemplo: no sólo como uno de las nuevas generaciones, sino como un técnico que dejó el país a causa de la crisis y ahora es repatriado. “Es la generación que nos sigue a la nuestra y que tiene el desafío histórico de hacerse cargo de la posta y de demostrar que podemos –desde el Estado– ser eficientes, que no puede haber contradicción, como tantas veces se quiso poner en la cabeza de los argentinos, que los intereses de una empresa pueden ser contradictorios con los intereses del país.” Además, destacó, es necesario “decir cuál fue el fracaso y por qué se vio bien que YPF fuera privatizada en algún momento: porque era una empresa petrolera que daba pérdida”, motivo por el cual ahora es necesario ser “muy eficientes en el manejo de la misma, para demostrar que el Estado puede administrar correctamente”.
Lo privado y lo público

Para asegurar la correcta administración de la empresa, CFK apuntó a empresarios y trabajadores y les pidió colaboración para sacar adelante la petrolera. Los hidrocarburos, recordó, no son “un commodity”, sino “un insumo básico que genera competitividad a toda la producción argentina, primaria, de valor agregado, de ciencia y tecnología, hasta el científico que toma su auto o su colectivo para llegar hasta su laboratorio... atraviesa transversalmente a todos los sectores sociales y económicos”, por lo que destacó la necesidad de “articular muy fuertemente lo privado y lo público”. Al respecto, aseguró que YPF servirá para potenciar la industria nacional, dando trabajo a empresas que funcionarán como proveedoras de la petrolera, pero advirtió que los empresarios argentinos “deberán saber que también tendrán que ajustar muy bien sus costos, porque tampoco se van a pagar precios ridículos, que pueden ser mucho más baratos en otra parte, por el solo hecho de que sean industria nacional”, y pidió “eficiencia” y “cálculo de costos”. También resaltó que no la asusta una buena rentabilidad empresaria, con la que colaboran los subsidios oficiales, siempre y cuando esté acompañada con la correspondiente reinversión en el país. Si alguien no había entendido el mensaje, lo dejó aún más claro: “En estos últimos nueve años se la llevaron con pala”.

Por último, se dirigió a los trabajadores, en el tono que mantiene desde la apertura de sesiones del 2011, cuando pidió por primera vez racionalidad en las protestas. “Seguir cubriéndose la cara, prender fuego o hacer incendios es solamente de patrullas perdidas, pero no de argentinos que comprenden que necesitan ponerle el hombro al país y trabajar. Lo que menos necesita el país son patrullas perdidas que solamente son funcionales a los intereses que siempre atentaron desde las sombras contra el conjunto de la sociedad argentina”, señaló, y dirigiéndose puntualmente a “los trabajadores del petróleo” que, advirtió, “son de los mejor remunerados del país” les pidió “que pongan también un gran esfuerzo porque no puede la provincia de Santa Cruz ni la de Chubut ni la de Mendoza ni la de Neuquén ni ninguna provincia perder un solo segundo de extracción del petróleo por conflictos laborales, es absolutamente injusto para el resto de los argentinos y para millones de argentinos que todavía no tienen trabajo”.

 

 

Las agrupaciones kirchneristas le pusieron calor a los festejos en el Congreso.

La Presidenta firmó, en el acto, el decreto de promulgación de la expropiación de YPF.

Mariano Obarrio

Designan al presidente de YPF y advierten a gremios y empresas

La Nación

En un acto multitudinario y festivo en la Casa Rosada, la presidenta Cristina Kirchner promulgó ayer la expropiación del 51% de las acciones de YPF y designó al ingeniero Miguel Galuccio al frente de la petrolera estatal para ejercer una "conducción profesionalizada", pero con "dirección política". Además, presionó severamente a los empresarios y a los sindicalistas del sector para que no privilegien sus intereses y terminen perjudicando a la petrolera.

La Presidenta precisó que Galuccio, entrerriano de 44 años, asumirá pasado mañana como gerente general de YPF hasta que finalice la intervención estatal. El 4 de junio se reunirá la asamblea de accionistas para designar al nuevo directorio, presidido por Galuccio.

Ingeniero experto en exploración petrolera, el nuevo CEO de YPF vivió los últimos 15 años en el exterior, donde alcanzó una posición de relevancia en la multinacional Schlumberger.

El discurso presidencial, de 46 minutos, transmitido por cadena nacional, dejó en evidencia las dos principales preocupaciones de Cristina Kirchner para que YPF pueda producir y lograr el autoabastecimiento energético perdido en los últimos nueve años de gestión kirchnerista: empresarios y sindicatos.

"Los empresarios la han juntado con pala estos nueve años. Recordemos para no ser tontos", exclamó en el Salón de las Mujeres de Balcarce 50. Se dirigió así a los futuros socios, proveedores y contratistas de YPF para que "no fundan a la empresa".

También apuntó con énfasis a evitar desbordes sindicales, uno de los peores fantasmas en Olivos: "Les pido a los trabajadores petroleros no perder un solo segundo de extracción de petróleo por un conflicto".

Emocionada, aplaudida y vivada por 1500 jóvenes de las agrupaciones kirchneristas La Cámpora, Kolina y JP Evita, Cristina Kirchner también invitó "a las empresas de todo el mundo" a asociarse con YPF y a invertir en la Argentina. Este es el principal desafío hoy de los interventores, el ministro de Planificación, Julio De Vido, y el viceministro de Economía, Axel Kicillof.

"YPF tendrá una conducción totalmente profesional, pero con dirección política", dijo la Presidenta. Y se señaló a sí misma. Ella, De Vido y Kicillof trazarán los lineamientos estratégicos de la empresa.

Quedó sin definir en el discurso qué socios locales y extranjeros tendrá YPF. No hay definición aún. En la Casa Rosada se habla de conversaciones con las petroleras norteamericanas Exxon y Chevron, la brasileña Petrobras, la venezolana Pdvsa o las chinas Sinopec y Cnooc.

Tampoco se esbozó el precio que el Estado propondrá para indemnizar a Repsol por la expropiación. Para eso se deberá conformar de inmediato el Tribunal de Tasación en la cartera de Planificación. Se descuenta que será un valor insignificante, aunque Repsol reclama 10.500 millones de dólares y seguramente entablará un juicio internacional.

"Que vengan las compañías de todo el mundo y van a tener que participar con empresarios argentinos. Y nuestros empresarios tendrán que ajustar sus costos porque no vamos a pagar precios ridículos, que pueden ser mucho más baratos en otros lados", dijo Cristina Kirchner. Minutos antes había firmado el decreto que promulgó la ley sancionada anteayer.

"No me molesta que los empresarios ganen plata, a nadie le gusta perder, pero también esa rentabilidad tiene que estar acorde con el desarrollo, crecimiento y sustentabilidad", dijo Cristina Kirchner ante todo el gabinete, gobernadores, legisladores, intendentes y algunos sindicalistas.

"Los empresarios la han juntado con pala estos nueve años. Recordemos para no ser tontos y repetir conductas y comportamientos", agregó. Allí fue también cuando se dirigió a los sindicatos. "Los trabajadores del petróleo son de los mejores remunerados del país -advirtió-. Les pido a todos los trabajadores que pongan un gran esfuerzo; no puede la provincia de Santa Cruz, Chubut, Mendoza, Neuquén, perder un solo segundo de extracción de petróleo por conflictos laborales."

Y dijo que esas medidas de fuerza son "absolutamente injustas para los argentinos y para los millones que no tienen trabajo".

El diputado Facundo Moyano, hijo del jefe de la CGT, Hugo Moyano, en conflicto con la Casa Rosada, fue el único que no aplaudió.

Durante el discurso, la Presidenta elogió a Galuccio por su experiencia en el sector petrolero, sobre lo cual se informa por separado, relató que lo conoció por medio del gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, que le mandó el currículum el 27 de marzo, criticó al periodismo y agradeció a la oposición por acompañar la sanción de la ley que en Diputados obtuvo 208 votos. "YPF no va a ser para becas políticas", prometió.

CURIOSA TRADUCCIÓN DE PAUL KRUGMAN
Por cadena nacional, la presidenta Cristina Kirchner leyó ayer un texto del prestigioso economista Paul Krugman, en el que elogiaba políticas de la Argentina. Al leerlo, la Presidenta destacó un párrafo en el que Krugman cuestiona que el gobierno kirchnerista tenga prensa negativa. Pero en su traducción incluyó un sutil cambio. Leyó: "La cobertura de prensa de la Argentina es otro de esos ejemplos de cómo el saber convencional, aparentemente, puede hacer que sea imposible obtener datos básicos correctos". En su artículo, Krugman habló de "la prensa", pero no de la "prensa de la Argentina".

 


 

Cristina designó a un profesional con experiencia como gerente de YPF

Martin Piqué. Tiempo Argentino

En un acto con definiciones de todo tipo, con un tono eufórico en el que no faltó el humor, pero en el que también deslizó advertencias para distintos destinatarios, la presidenta firmó ayer el Decreto 660/2012 que promulgó la ley de expropiación de YPF. En cadena nacional, acompañada por gobernadores y buena parte del Gabinete, Cristina Fernández presentó a quien será el gerente general de la empresa petrolera, el ingeniero Miguel Galuccio, de origen entrerriano (ver pág. 4). Desde un Salón de las Mujeres colmado, donde eran mayoría los miembros de organizaciones sociales y de agrupaciones juveniles, la mandataria volvió a agradecer a los legisladores de la oposición que votaron la Ley 26.741. “Lo hicieron con matices y lógicas diferencias, que es lo que debe plantear un partido de oposición. Y quiero agradecer también a nuestra propia fuerza política”, dijo Cristina. También hizo un elogio público para los dos jefes de bloques del oficialismo en el Senado, Miguel Pichetto, y en Diputados, Agustín Rossi, de quien citó una frase pronunciada durante el debate en el recinto. “Somos un movimiento político que sostiene sus convicciones, ya sea con aplausos o con huevazos”, subrayó la jefa de Estado en medio de una ovación y gritos de “Chivo, Chivo” en reconocimiento del rosarino.
Cristina hizo una larga exposición sobre las características que pretende darle a la gestión de la nueva YPF. “Quiero una empresa profesionalizada. Lo cual no quiere decir que la empresa no tenga una dirección política. Vamos a desarrollar una tarea profesionalizada, con profundo sentido político y patriótico”, adelantó. La presidenta se tomó largos minutos para dejar claro que la nueva etapa de YPF debe demostrarle a la sociedad que el Estado puede ser gestionado con “calidad y eficiencia”. En su discurso hizo una advertencia, que no fue la única, a los gobernadores de las provincias petroleras. Les aclaró que la empresa, en la que esos distritos que integran la Ofephi tendrán casi un 25% de las acciones, no se convertirá en una plataforma de “becas políticas”. “Queremos gente sólida, formada en tecnología, petróleo, en legalidad y sociedades, en jurídicos”, instruyó.
Tras elogiar los antecedentes de Galuccio, quien regresó al país para asumir la dirección de la petrolera, la jefa de Estado lo puso como ejemplo del proceso de repatriación de los recursos humanos argentinos. “Lo hicimos con los científicos repatriados, ahora lo vamos a hacer con los ingenieros. Y no va a ser el único que vuelva al país”, avisó en medio de aplausos. Galuccio estaba ubicado en la primera fila de asientos, al lado del viceministro de Economía, Axel Kicillof. En esa fila también estaban los diputados Andrés Larroque, Eduardo “Wado” De Pedro, Mayra Mendoza, Facundo Moyano y Carlos Kunkel, el diputado bonaerense José Ottavis, el secretario de Justicia Julián Álvarez y el legislador porteño Juan Cabandié. La lista de invitados más conocidos seguía con los diputados Edgardo Depetri y Martín Sabbatella; el secretario general de la CTA, Hugo Yasky; el titular de Ctera, Roberto Baradel; su par de la UOM, Antonio Caló; y el intendente de Quilmes, Francisco “Barba” Gutiérrez.
En su discurso, la presidenta cuestionó los vaticinios errados del periodismo económico local. Para hacerlo mencionó una nota de opinión sobre Argentina firmada por el estadounidense Paul Krugman, que apareció el jueves en su columna semanal en The New York Times. Allí, tras elogiar el crecimiento del PBI argentino, Krugman lamenta que “la cobertura de prensa de la Argentina” haga “imposible acceder correctamente a la información”. “Esto lo dice Paul Krugman. Lo aclaro porque no vaya a ser que ahora lo definan como un atacante serial de la prensa”, ironizó la mandataria. Filosa como nunca, con evidente satisfacción por el consenso reunido por la ley que declaró de interés público la producción y distribución de combustibles, Cristina bromeó con el gobernador entrerriano Sergio Urribarri. “¿Viste qué precisión? Por algo yo soy presidenta y vos gobernador”, comentó la jefa de Estado tras corregir al gobernador por la fecha en la que este le había enviado el curriculum de Galuccio.
En su exposición, seguida por trabajadores con remeras con el logo de YPF, la presidenta aportó algunos detalles de la mecánica de funcionamiento de la empresa. Recordó que la compañía, como todas las sociedades anónimas, será supervisada en la Argentina por la Comisión Nacional de Valores. Enseguida agregó que también la monitoreará la Security Exchange Commision (SEC), ya que YPF cotiza en la Bolsa de Nueva York. Luego informó que dentro de un mes, el 4 de junio, se reunirá la asamblea de accionistas para elegir al nuevo directorio. Hasta esa fecha, Galuccio estará en funciones como gerente general, ya que la ley asigna al jefe de Estado las atribuciones para designar a las nuevas autoridades de modo transitorio. Estas aclaraciones técnicas de la mandataria fueron muy aplaudidas por los gobernadores presentes, con Daniel Scioli (Buenos Aires), José Manuel de la Sota (Córdoba), Jorge Capitanich (Chaco) y el entrerriano Urribarri en los lugares más visibles.
El discurso siguió con advertencias a empresarios y a trabajadores, aunque en este último caso el sermón más bien fuera dirigido a los dirigentes sindicales (ver aparte). El pedido a las empresas fue claro. Contundente. “En estos últimos nueve años se la llevaron en pala. No me molesta que tengan rentabilidad, pero tiene que estar en relación con la sustentabilidad social”, amonestó Cristina. Su solicitud estaba dirigida a la formación de precios del combustible, a los que pidió desacoplar de los valores internacionales. Antes de despedirse, y dicho casi como al pasar, la jefa de Estado dejó sentado un mensaje que hizo abrir los ojos de varios asistentes. “Sinceramente, esta presidenta quiere dar sus últimos servicios a todos los argentinos”, dijo. Esa frase disparó miradas de sorpresa y cierta pena entre los militantes que seguían el acto desde una de las pantallas gigantes.

 

 

 

 


Vuelva a HOME

KNIGHT PIESOLD DERECHA NOTA GIF 300
Lo más leído
SERVICIOS VIALES LISTADO MINING
PODER DE CHINA
NOTA MÁS LEIDAs MP GIF