Para Galuccio, la nueva YPF será más competitiva
Infobae
El flamante directivo de la petrolera aseguró que la compañía "saldrá adelante" y además podrá "ayudar a la Argentina en su desarrollo energético". "Podremos tener una empresa moderna y profesional que a su vez tenga un sentido nacional muy fuerte", prometió.
Miguel Galuccio fue designado gerente general de YPF por la presidente Cristina Krichner en el acto que tuvo lugar en Casa Rosada el viernes pasado. El ingeniero ocupará ese cargo hasta que la asamblea de socios de la empresa decida su continuidad el día 4 de junio.
Sin embargo, desde que fue nombrado como directivo al frente de la petrolera, el ex directivo de Schulmberger no había hecho declaraciones a la prensa. En la tarde de hoy, tras haberse reunido con quien lo presentó al gobierno nacional, el gobernador entrerriano Sergio Uribarri, el ingeniero realizó sus primeras declaraciones como gerente general.
"YPF es una empresa muy importante para mí, que quiero mucho. Estoy seguro de que podremos tener una empresa moderna, competitiva, profesional, que a su vez tenga un sentido nacional y argentino muy fuerte que va a ayudar a la Argentina en su desarrollo energético", expresó a la salida del encuentro.
Galuccio destacó además el rol que el gobernador cumplió en su llegada a la conducción de la petrolera y lo consideró un amigo. "En todo este proceso Urribarri ha sido de gran apoyo", señaló, al recordar que fue el mandatario de Entre Ríos el que lo presentó con la Presidente.
Miguel Galuccio junto a Sergio Urribarri en la reunión que mantuvieron este sábado.
Galuccio, un experto en petróleo con vínculos con el poder político
Clarín
E n algunos de los países más desarrollados del mundo, los titulares de las empresas del Estado son elegidos tras pasar du- ros procesos de estudio, e incluso también sus designaciones deben ser aprobadas por los parlamentos.
Así pasa en España, por ejemplo, con el presidente de la corporación Radiotelevisión Española (RTVE).
El viernes, la presidenta Cristina Kirchner reveló que había elegido a Miguel Galuccio como nuevo gerente general de la estatizada YPF después de que se lo recomendara el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, con quien la familia Galuccio tiene vínculos políticos y comerciales. También contó que pidió referencias sobre este ingeniero al ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
Galuccio tiene 44 años, y una amplia experiencia en la industria petrolera. Egresado del Instituto Tecnológico de Buenos Aires, trabajó en la YPF de José Estenssoro, luego pasó por Maxus y hasta abril se desempeñó como presidente de Schlumberger Production Management. Trabajó en diferentes destinos, como Las Heras, Santa Cruz; Indonesia, EE.UU.; Medio Oriente, Asia, Rusia y China.
La especialidad de Galuccio es la exploración y extracción de hi- drocarburos, uno de los grandes desafíos que afrontará desde la flamante empresa reestatizada.
En su acto del viernes, la Pre- sidenta dijo que pensaba en una nueva YPF con "perfil profesionalizado" y también con "dirección política", en lo que pareció ser una contracara del management de Aerolíneas Argentinas, encabezada por La Cámpora.
La Presidenta se había decidido por Galuccio después de haber te- nido con él una reunión a solas, en El Calafate, que duró dos horas y media. Fue en Semana Santa.
Galuccio estaba en la órbita de Urribarri porque su familia, oriun- da de Paraná, está muy vinculada al oficialismo provincial.El hermano del gerente de YPF, Carlos Galuccio, fue titular de la Unión Industrial de Entre Ríos. Está casado con una de las hijas del fundador de una constructora en la que él trabajó durante toda la vida, llamada Luis Losi S.A. Esa empresa se benefició en los últimos años con contratos millonarios firmados con la administración Urribarri.
Los Galuccio -cuatro hermanos, de los cuales tres son ingenieros- tienen una empresa familiar: Sembrador. Es una distribuidora de bebidas importante en Paraná. A fines de diciembre, el gober- nador Urribarri viajó a Londres con una comitiva oficial en la que estuvo Carlos Galuccio, hermano de Miguel. Allí el gobernador se entrevistó con el hoy titular de YPF: consultó a la empresa en la que este trabajaba, Schlumberger, sobre técnicas de exploración hidrocarburíferas para Entre Ríos.
Carlos Galuccio acompañó a Urribarri en varias de sus últimas misiones comerciales. La relación entre ellos es de amistad.
Gracias a esos contactos políti- cos y comerciales, Miguel Galuc- cio llegó a la gerencia general de YPF. Su curriculum demuestra que es un experto en el área. Resta saber si la Presidenta, y sobre todo el ministro De Vido, le permitirán armar un equipo propio y profesionalizado.
La despedida y la "oportunidad única"
Miguel Galuccio envió una carta de despedida interna en la empresa en la que hasta ahora trabajaba, Schlumberger Production Management. Sin hacer alusión expresa a su nuevo puesto en YPF, Galuccio dice en ese texto, al que tuvo acceso
Clarín que "como todos ustedes sabrán, decidí dejar Schlumber- ger para
encarar una oportunidad única, y establecer desafíos en otro sector de la industria". Di- ce además que dejar su puesto privado para pasar a la administración pública nacional "fue
una decisión extremadamente difícil de tomar".
Y agrega que "la decisión se hizo más dura por todos los colegas y amigos que conocí e hice en Schlumberger en los últimos diez años".
Galuccio aseguró también que está "listo para asumir nuevos y diferentes desafíos y tomé mi decisión ampliamente basado en eso". También agradeció a "cada uno" de los empleados de Schlumberger "por su contribución al crecimiento y éxito" y "su apoyo y los momentos compartidos conmigo que recordaré por el resto de mi carrera".
A la espera del nuevo directorio, Galuccio toma hoy el control de la petrolera estatal
El Cronista
Miguel Galuccio, el hombre designado por la presidenta Cristina Fernández para conducir la estatizada YPF de forma “profesional”, debutará hoy como gerente general de la compañía, a la espera de que una asamblea de accionistas lo formalice, el próximo 4 de junio, como número uno de la petrolera y designe a los directores que lo acompañarán en sus funciones. Su debut con la “camiseta” de YPF será al mediodía en Comodoro Rivadavia, donde se reunirá con trabajadores de la petrolera.
Según sus allegados, Galuccio quiere hablarles a los operarios, sin políticos, en el lugar donde se encontró petróleo por primera vez en el país. A la dirigencia la verá mañana, cuando pise por primera vez las oficinas de YPF en Puerto Madero para planificar los primeros cien días de gestión.
Entrerriano y con una extensa trayectoria en el mercado petrolero, Galuccio fue el elegido para dirigir a la petrolera de forma “profesional” y con “eficiencia”, tal como repitieron numerosos voceros oficiales en los últimos días. “ ‘YPF tendrá un perfil totalmente profesional, lo cual no quiere decir que no tendrá una conducción política”, insistió la Presidenta el viernes, al oficializar la designación de este ingeniero al frente de la compañía. Con 44 años, trabajó en la YPF de José Estenssoro, en la firma Maxus y en Shlumberger Production Management, de donde renunció a la presidencia, en Londres, para volver a radicarse en su país.
Según trascendió el fin de semana, Galuccio continuará con la búsqueda de socios para exploración y desarrollo de nuevas tecnología que comenzaron los interventores Julio De Vido y Axel Kicillof. Por ahora, los caminos conducen a los Estados Unidos, donde el Gobierno busca interesar a firmas como Chevron y Exxon. De allí son también las compañías líderes en la extracción del shale oil, el recurso que yace en Vaca Muerta, Neuquén, de difícil elaboración.
El tridente
Habrá que ver qué margen de maniobra tiene Galuccio y qué poder conservan De Vido y Kicillof en la conformación del directorio de YPF, lo que sucederá el próximo 4 de junio. Una vez promulgada en el Boletín Oficial de hoy la expropiación del 51% de las acciones de la firma, el directorio la Comisión Nacional de Valores (CNV) se reunirá, a las 15.30, para dictar una resolución que convoque a los accionistas de YPF para el mes que viene.
Según explicó la entidad que preside Alejandro Vanoli, en la reunión se tratarán la remoción de la totalidad de los directores y síndicos titulares y suplentes, lo que allanará el camino para la designación de las nuevas autoridades.
Según trascendió, se incorporaría al directorio el economista de Flacso Eduardo Basualdo, vinculado a la CTA e integrante del Conicet. En la actualidad, el director por el Estado es Roberto Baratta, secretario de Coordinación Económica del ministerio de Planificación y hombre de De Vido.
Arranca la gestión de Galuccio en la petrolera
La Nación
La nueva gerencia de YPF designada por el Gobierno iniciará hoy su gestión cuando asuma sus funciones el nuevo CEO de la petrolera, Miguel Galuccio.
Esa designación, oficializada el viernes pasado por la presidenta Cristina Kirchner, quedará formalizada hoy con la publicación del nombramiento en el Boletín Oficial.
Asimismo, la Comisión Nacional de Valores realizará también esta tarde, a partir de las 15.30, una asamblea para implementar lo dispuesto en la ley de expropiación, según informó la Presidencia.
En la reunión, según la CNV, se tratarán, "entre otros asuntos que se consideren necesarios y relevantes", la remoción de la totalidad de los directores y síndicos.
Cristina Kirchner realizó un acto el viernes para promulgar la norma, que había sido sancionada el día anterior con una abrumadora mayoría en la Cámara de Diputados.
Rápidamente, el Gobierno avanzó con la puesta en marcha de la nueva gestión que se estrenará hoy mismo.
En forma paralela, tal como exige la ley aprobada por el Congreso, el Tribunal de Tasaciones de la Nación deberá fijar el precio que el Estado deberá pagar por el 51 por ciento de las acciones de la petrolera YPF expropiadas a la compañía española Repsol.
En acción. Miguel Galuccio, en una foto tomada en 2008, cuando trabajaba para Schlumberger en Londres.
Martín Granovsky
El desafío de Galuccio, el nombre de la Presidenta en YPF
Página 12
Lo que más atemoriza al
Financial Times no parece intimidar a
Miguel Galuccio, el experto en petróleo que la Presidenta quiso como gerente general de Yacimientos Petrolíferos Fiscales. El diario con sede en Londres se mostró crítico, ayer, con la idea presidencial de que la profesionalización de YPF tenga una dirección política. Cuando
Cristina Fernández de Kirchner lo dijo, el viernes, Galuccio la estaba escuchando. Si aceptó el puesto es que admitió el criterio y piensa que es compatible con lo que, según dijo uno de sus amigos a Página/12, siente en estos días: conducir YPF supone el gran desafío de su vida.
“YPF es una empresa muy importante para mí, que quiero mucho”, fueron las únicas declaraciones conocidas hasta ahora. Galuccio habló el viernes para la televisión entrerriana al salir de la Casa Rosada junto con el gobernador Sergio Urribarri, que sugirió su nombre a la Presidenta.
“Estoy seguro de que podremos tener una empresa moderna, competitiva, profesional, que a su vez tenga un sentido nacional y argentino muy fuerte, que va a ayudar a la Argentina en su desa-rrollo energético”, dijo al tiempo que agradecía a Uribarri el papel clave en su cambio de vida.
Galuccio, de 44 años, fue tentado por Cristina Fernández de Kirchner cuando era ejecutivo de la empresa de servicios petroleros con sede en Londres Schlumberger. Considerada como la mayor firma de suministros tecnológicos para la industria petrolera, Schlumberger ya opera en Neuquén.
Allegados a Galuccio aceptaron explicar el pensamiento del nuevo gerente general sobre Vaca Muerta, el yacimiento neuquino que ya aparece como la gran esperanza de explotación.
“Espera que se aceleren las posibilidades de explotar Vaca Muerta con la incorporación de nuevas tecnologías específicas para el desarrollo de los recursos no convencionales, sumado a la amplia experiencia operacional desarrollada en los Estados Unidos”, dijo uno de ellos.
Y agregó otro de los consultados: “Galuccio cree que el shale gas va a revolucionar la posición de la Argentina como actor central en el mundo de la energía”.
El shale gas es un derivado que podría obtenerse de un yacimiento basado en los sedimentos rocosos como el de Vaca Muerta.
“El proyecto es que este tipo de explotación permita el desarrollo de contratistas y emprendedores locales, la creación de nuevas empresas tecnológicas y la formación de personal en estas nuevas tecnologías”, agregó uno de quienes accedieron a hablar a condición de mantener el anonimato.
Esquemáticamente, éstas serían otras de las líneas de Galuccio:
- “Lograr en YPF un vuelco histórico.”
- “Valorizar al personal de YPF. Galuccio repite que YPF tiene profesionales reconocidos en el mundo por su capacidad, demostrada en el desarrollo de proyectos innovadores y exitosos en la industria, lo que la hacen una compañía técnicamente rica, con 90 años de historia en la producción de petróleo.”
- “Introducir una nueva modalidad de trabajo, formando equipos interdisciplinarios entre el upstream y el downstream.”
- “Potenciar la transversalidad en la empresa al mismo tiempo que asigna libertad de acción a los profesionales.”
- “Producir un cambio de paradigma en la industria petrolera que significa hacer una YPF profesional y competitiva, con visión global y capaz de transgredir para ser vanguardia.”
- “Implementar una política agresiva para retener los talentos, repatriar a los argentinos valiosos en la profesión dispersos por el mundo y valorizar el conocimiento técnico. Apostar a la formación técnica que capacite y motive al personal y prepare a los contratistas y empresarios argentinos para los nuevos desafíos.”
- “Llevar a la práctica un esquema económico y comercial que estimule el desarrollo de las reservas de gas y petróleo convencional y no convencional que permita atraer inversiones (locales e internacionales) y tecnología.”
- “Convertir a corto plazo a YPF en un experto mundial en el desarrollo y rejuvenecimiento de yacimientos marginales a través de la aplicación de métodos de recuperación terciaria.”
Como adelantó la Presidenta, el plan es integrar el directorio y formalizar la continuidad de la gerencia general en junio, cuando se cumplan 90 años desde la fundación de YPF por parte del entonces presidente Hipólito Yrigoyen. En octubre de ese mismo año, 1922, ya con Marcelo Torcuato de Alvear de presidente, asumió Enrique Mosconi, el ingeniero y general que construyó la primera petrolera del mundo integrada verticalmente en el Occidente capitalista. YPF fue estatal hasta que Carlos Menem decidió su privatización, con José Estenssoro, que fue el jefe, entonces, de un Galuccio en plena formación, y luego su extranjerización completa hasta ponerla en manos de Repsol.
Sin hacer futurología, lo cierto es que Galuccio aceptó un puesto con conocimiento del mercado y, naturalmente, de las fricciones políticas nacionales e internacionales de la decisión oficial de controlar YPF por parte del Estado.
El tablero
El desafío que Galuccio se plantea a sí mismo se produce en medio de un debate político sobre el derecho a la expropiación por parte del Estado. Y no sólo en la Argentina, como lo muestran los tres conceptos que siguen. Uno, la medida tuvo “gran apoyo popular”. Dos, una parte se opuso y sigue oponiéndose “de manera apocalíptica”. Tres, ningún indicador económico señala peligro, sino exactamente lo contrario. Las tres frases no pertenecen a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sino a Amanda Dávila, vocera de Evo Morales con rango ministerial, y aluden a los efectos de la nacionalización de la empresa española Red Eléctrica, el 1º de mayo. Las tres frases podrían aplicarse a la Argentina tras la expropiación de Repsol por parte del Estado para lograr el control de YPF. Acaso, además, convenga ir registrando una línea de análisis que despunta también en los países centrales: la nacionalización aleja a la Argentina de la timba financiera.
El 2 de mayo, cuando faltaba todavía la sanción de Diputados y la promulgación de la ley, Richard Dreyton escribió en el diario británico The Guardian una columna con sabor global en el título: “Las democracias pueden frenar a los depredadores financieros, y la Argentina y Bolivia están mostrando cómo”. Su tesis es sencilla: “Las nacionalizaciones han sido caracterizadas como demagogia populista. Pero son una respuesta a la especulación tóxica”.
El razonamiento de Drayton es que en ambos casos, el boliviano y el argentino, “las multinacionales españolas priorizaron la repatriación de dividendos por sobre la inversión”. La prioridad estuvo fijada por banqueros de Londres y Nueva York. Agrega el autor de la columna: “Detrás del asunto Repsol-YPF, en particular, había algo muy cercano al capitalismo enfermo que causó la crisis de 2008”. Describe las maniobras riesgosas y sin sustentación real a través de los numerosos subproductos financieros que la jerga conoce como “derivativos”. Repsol sería, según Drayton, una empresa con doble vida. Por un lado es una firma petrolera y por otro un canal para timbear. Si el petróleo es una mercancía, luego esa mercancía termina generando recursos para la especulación sobre la especulación misma. Igual que los bancos: algunos invierten, pero en general su negocio es tomar dinero barato y tomar ganancias en otro lugar del mundo. El petróleo funciona, así, como el origen de una burbuja, como sucedió con las hipotecas-basura respecto de los préstamos originarios para llegar a la casa propia.
A la Argentina, en términos petroleros, le estaban quedando las hipotecas-basura, papeles invendibles y problemas reales por delante, mientras Repsol podía colocar dinero con ganancias del 9 por ciento en 2011.
Para Drayton, la furia de diarios como The Financial Times, de Londres, y The Wall Street Journal, de Nueva York, no se debe tanto a la expropiación en sí misma como a uno de sus efectos. Al nacionalizar, la Argentina cortó una cadena importante que relacionaba el petróleo de Repsol con bancos de inversión en esas dos ciudades, poseedores de los productos financieros de baja calidad derivados de la ganancia original.
En su discurso de cierre, el presidente del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, desarrolló esa línea de pensamiento. También argumentó en el mismo sentido Carlos Heller, aliado del oficialismo en Nuevo Encuentro, mientras informaba que las petroleras siguen estando en el pelotón de las empresas más importantes del mundo en el ranking de Forbes. Pino Solanas habló del petróleo como de “un surtidor del que sale oro”. También pidió reconocer la grandeza de los que votaban a favor de un paso importante impulsado por un Gobierno que cuenta a funcionarios responsables, a su juicio, de las sombras en la gestión reciente.
La conclusión de Drayton: “Al nacionalizar, la Argentina mostró que un gobierno democrático puede frenar a los depredadores financieros. Y esto no significa que ahuyente a nuevos inversores: ya están buscando acceso a las reservas argentinas de shale oil, las terceras del mundo, las empresas Talismán, ConocoPhillips, Chevron y compañías chinas”.
Con quién asociarse
El shale oil, de origen sedimentario rocoso, está en los yacimientos de Vaca Muerta. En los Estados Unidos se encuentra en pleno desarrollo como reemplazo del crudo tradicional, gracias a tecnología operada por la empresa donde hasta hace poco trabajaba Galuccio y a Halliburton. La última es la misma firma que encabezaba Dick Cheney. La dejó para ser vicepresidente de George Bush. Halliburton ascendió en el ranking de servicios petroleros por su papel en Irak, luego de la guerra. Halliburton también opera ya en la Argentina.
Como en 1922, cuando se fundó YPF, poner nombres propios en el mundo del petróleo y la energía lleva al corazón del poder y de los nuevos fenómenos políticos y financieros en el mundo.
“No soy un especialista, pero me quedaría más tranquilo si pudiéramos articular la nueva YPF con Petrobras y Pdvsa”, dijo Heller en alusión a las empresas petroleras de Brasil y Venezuela.
Más allá de qué empresa se asocie a YPF, el Apocalipsis no aparece como un escenario cercano ni siquiera para algunos análisis ortodoxos. Un despacho de la agencia Bloomberg del viernes indicaba que, a pesar de las amenazas de castigo comercial, los Estados Unidos deberán tener en cuenta que Cristina “ya pidió ofertas de compañías extranjeras para operar algunos yacimientos de YPF”. Añadía que “sin duda dará la bienvenida a inversores extranjeros que quieran desarrollar las reservas de shale gas, que puesto que son las terceras en el mundo, seguro atraerán a esos inversores pese a la experiencia poco reconfortante de Repsol”.