La compañía cerealera estadounidense Louis Dreyfus Commodities (LDC) desembolsará u$s 40 millones en Rosario para levantar una nueva planta de biodiesel, el combustible con el que se reemplaza al gasoil. De esta forma, se convertirá en la mayor elaboradora del producto en la Argentina a partir de marzo de 2012, cuando la firma planea terminar su nueva fábrica, que tendrá una capacidad de producción de 300.000 toneladas anuales.
LDC tendrá entonces una capacidad de producción anual de 600.000 toneladas en dos plantas iguales. La primera planta de biodiesel de la firma comenzó a operar en 2008 y fuentes de la compañía que confirmaron la inversión a El Cronista indicaron que la producción irá al mercado interno y a la exportación. Pese a formar parte del grupo de empresas que están siendo investigadas por la AFIP por presunta evasión en el comercio de granos, LDC sigue apostando al negocio de las energías verdes, que tiene un foco de crecimiento exponencial en la Argentina, tercer productor mundial de soja. La compañía fue suspendida del Registro de Operadores de Granos en marzo pasado, por las denuncias que pesan sobre ella por parte de la AFIP. La presencia en dicho registro otorga a las empresas beneficios fiscales.
El segundo puesto del ranking de productoras del combustible verde es compartido por dos grandes: Renova, propiedad de Molinos Río de la Plata, Glencore y Vincetín, y Terminal 6, de Aceitera General Deheza y Bunge, que acaba de ampliarse. Ahora, ambas producen 480.000 toneladas anuales, aunque Renova también tiene planes de expansión. La compañía acaba de obtener un préstamo de la Corporación Andina de Fomento para costear parte de una inversión total de u$s 430 millones destinada a levantar una nueva planta de molienda de soja con producción de biodiesel, también en el polo productivo de la zona de influencia de Rosario.
La inversión de LDC se suma a otros anuncios dentro de un negocio dinámico y de fuerte expansión.
Por caso, UnitecBio, de grupo Eurnekian, está invirtiendo u$s 70 millones para construir una nueva planta de elaboración de biodiesel y duplicar su actual nivel de producción. Otro caso es el de Cargill, que anunció un desembolso de u$s 450 millones para levantar dos plantas y entrar en el negocio nacional de los biocombustibles.
El mercado incluye a otras grandes elaboradoras como Viluco, del Grupo Lucci; Explora del grupo chileno Meck; Diaser; Aripar Cereales; Oil Fox; Patagonia Bioenergía, de Grupo Cazenave & Asociados y Energía & Soluciones y Vicentín.
Se espera que en 2011 la Argentina produzca poco más de 3 millones de toneladas de biodiesel, con un crecimiento de más de 2.200% en los últimos cinco años, y del 47% desde que LDC comenzó a producir en el país.
La Argentina exporta más de la mitad de su producción, siendo Europa el principal destino, en tanto que el resto se consume en el mercado local, con un corte del 7% sobre el diesel.
Por la rápida expansión de la producción local y las complicaciones del mercado de combustibles en la Argentina, las firmas pujan ahora por que el corte obligatorio con biodiesel se incremente al 10%. Cuando el sistema de corte obligatorio se puso en vigencia en 2010, la proporción para el biodiesel era del 5%, volumen que fue rápidamente elevado en dos puntos.
Dreyfus invertirá u$s 40 M en nueva planta de biodiesel
Nosis
La cerealera estadounidense Louis Dreyfus Commodities (LDC) invertirá 40 millones de dólares para duplicar su producción de biodiesel en Rosario.
En marzo de 2012, cuando se terminarán las obras, LDC se convertirá en la mayor productora de biodiesel en Argentina con 600.000 toneladas anuales.
Las otras grandes productoras de biodiesel de Argentina son Renova, del grupo Molinos Río de la Plata, Glencore y Vicentín, y Terminal 6, de Aceitera General Deheza y Bunge. Entre los dos grupos producen 480.000 toneladas anuales.
LDC es además una de las cerealeras que está investigando la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) por posible evasión en el comercio de granos, por lo que fue suspendida del Registro de Operadores de Granos en marzo y perdió los beneficios fiscales que le otorgaba.
Por su parte, UnitecBio, del grupo Eurnekian está invirtiendo 70 millones de dólares para construir una nueva planta de elaboración de biodiesel con la que duplicará su volumen de producción.
Al mismo tiempo, Cargil anunció que destinará 450 millones de dólares para montar dos plantas y empezar a operar en el mercado nacional de biocombustibles.
Entre las grandes elaboradoras de biodiesel se encuentran además, Viluco, del Grupo Lucci; Explora, del grupo chileno Meck; Diaser; Aripar Cereales; Oil Fox; Patagonia Bioenergía, del Grupo Cazenave & Asociados y Energía & Soluciones.
En conjunto, las plantas alcnzarían a producir el año próximo más de 3 millones de toneladas de biodiesel, lo que representaría un crecimiento de 2.200 por ciento en los últimos cinco años. Más de la mitad se destina a exportación. El resto se consume en el mercado local, aunque con un corte del 7 por ciento sobre el diesel y que las petroleras quieren elevar al 10 por ciento.
En 2012 el 90% del aceite de soja producido por Dreyfus en Gral. Lagos se destinará a la elaboración de biodiesel
Punto Biz
Dreyfus levantará una nueva planta de biodiesel en General Lagos, al sur de Rosario, con capacidad de 300 mil toneladas por año.
Las obras arrancaron en abril y están haciendo el movimiento de suelos y preparación de pilotes a la espera de que la Secretaría de Medio Ambiente de la Provincia apruebe el estudio de impacto ambiental. Según las estimaciones de Dreyfus, la planta estará elaborando biocombustible en base a aceite de soja en marzo de 2012.
La nueva planta se levantará dentro del predio de 70 hectáreas donde la multinacional ya tiene una planta de biodiesel de otras 300 mil toneladas, que inauguró en julio de 2008, y dos fábricas aceiteras que juntas pueden elaborar 12.000 toneladas por día.
“La mayor demanda tanto externa como interna explican las decisión de realizar esta fuerte inversión”, explicó Luis Zubizarreta, director de Relaciones Institucionales de Dreyfus Argentina.
A su lado, Eduardo Cabreriso, a cargo de las relaciones institucionales de Dreyfus en la zona de Rosario, agregó que “cuando la nueva fábrica entre en actividad, el 90% del aceite que se produce en Lagos se destinará para la elaboración de biodiesel”. En la actualidad, explicó, la planta que ya está en marcha demanda casi el 50% del aceite producido en el complejo de General Lagos. “El que gana es el país porque se exportan productos con mayor valor agregado”, resaltó.
En Argentina la industria aceitera se está volcando cada vez más al biocombustibles no sólo por la menor retención que tiene frente a la exportación de aceite sino también para sortear la decisión de China de dejar de importar aceite argentino por razones comercial.
Y, de la mano de la mayor demanda interna, el negocio no sólo es la exportación. Ya en 2010, según un estudio de CREA, la capacidad teórica de pago de una industria que dedicara toda la producción de aceite de soja para elaboración y comercialización de biodiesel con destino interno fue sustancialmente superior al resto de los modelos de negocios como exportación de pellet más aceite de soja y de pellet más biodiesel.
La nueva planta de Dreyfus se levanta tipo “espejo” de la fábrica que está en actividad desde 2008. Esto es, será igual –incluso hasta en la misma tecnología alemana (Gea Westfalia)- y estará ubicada frente a la actual. La planta puede almacenar 25.000 toneladas para biodiesel y 7.000 toneladas de glicerina, subproducto del proceso. El puerto tiene un ritmo de carga de 500 toneladas por hora.
Dreyfus abrió ayer sus puertas a un contingente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), que previamente había recorrido Ecofuel, la planta de biodiesel de Terminal 6 en Puerto San Martín. Allí fueron recibidos por los ejecutivos del grupo, encabezado por su director Juan Carlos Vilanova.
Ecofuel comenzó a operar en 2007 con una capacidad de 240 mil toneladas por año y desde marzo pasado, cuando puso en marcha la ampliación, dio el salto a las 420 mil toneladas por año. Además, tiene una planta de refinado de glicerina (subproducto del biodiesel) de 40 mil toneladas.
El 10% de la producción de biodiesel de Ecofuel va al mercado interno, mientras que prácticamente la totalidad de la glicerina se exporta.
Como novedad, Vilanova contó que ya se completó la absorción de Ecofuel por parte de T6 industrial. Terminal 6, el principal puerto cerealero del país, es en la actualidad 60% de AGD y 40% de Bunge. En cambio, la división industrial (la que tiene la aceitera) está repartida al 50% entre ambos socios. Como Ecofuel arrancó primero de la mano de AGD y luego sumó a Bunge en partes iguales de las acciones finalmente se decidió ponerla bajo paraguas de T6 Industrial.
