El presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, dio hoy una conferencia de prensa en la sede central de la petrolera, en Buenos Aires, en la que brindó información sobre el estado de situación del Complejo Industrial La Plata (CILP) y sobre el plan de normalización, que incluirá como principal punto la aceleración de la construcción de una nueva planta de coke, que demandará una inversión de alrededor de 800 millones de dólares.
El presidente de YPF señaló que, como consecuencia de la pérdida de la unidad de Coke A, disminuirá la producción de combustibles, con un impacto del 7% sobre la producción total de la compañía.
Galuccio dio mayor información sobre las causas del incendio en la refinería. Explicó que el sistema de tratamiento del CILP consta de una planta de tratamiento de efluentes con capacidad para procesar 1450 m3/h y de un sistema de captación y almacenaje para situaciones extraordinarias, de 86.000 m3. Entre ambos hacen pueden procesar y disponer adecuadamente 95.000 m3 de agua de precipitación en seis horas. La pluviometría recibida ese día por el sistema de efluentes del CILP, según un estudio de la Universidad Nacional de La Plata, fue de 315.000 m3 en seis horas.
Galuccio destacó el “enorme esfuerzo y valor del personal propio, de los bomberos voluntarios e integrantes de la Prefectura que permitieron defender la refinería”.
Al explicar las causas del incendio, dijo que “hubo un incremento en los niveles de líquido que colmó la capacidad de almacenamiento y provocó la pérdida del confinamiento del hidrocarburo en la pileta de tratamiento de efluentes número 9, con la consecuente incursión del combustible hacia la unidad de Coke A. El incendio se extendió casi en su totalidad a las instalaciones de este proceso industrial y, parcialmente, a la unidad contigua denominada Topping C”.
Galuccio destacó la rápida puesta en marcha del plan crisis en la refinería que permitió evitar muertes y heridos, a través de la inmediata evacuación del personal de la refinería.
Luego de dominar la situación, YPF comenzó a regularizar las instalaciones. Se realizó el drenaje completo de los niveles de agua, que en algunas zonas llegaron a los 70 centímetros, se liberaron las subestaciones eléctricas para iniciar el secado de los equipos y se realizó la limpieza de toda la planta industrial.
A su vez, la compañía definió el uso de las instalaciones logísticas para almacenar crudo y contrató un barco a flote para almacenar el crudo no procesado. El sábado fue reabierta la Terminal de Despacho, con la salida del primer camión de combustible.
Luego de la presentación, Galuccio contestó una serie de preguntas a los periodistas. Entre otros, se trataron los siguientes temas, con sus principales conceptos:
Abastecimiento: “El mercado está hoy abastecido completamente. Tenemos stock, que cuando es necesario lo volcamos al mercado. Los camiones que se despacharon el domingo forman parte de nuestro stock”.
Importación: “Para cubrir la brecha de producción faltante tendremos que importar algo más, pero el número no es significativo para la envergadura económica de la empresa. De lo que ya importamos, tendremos un incremento del 6 por ciento”. “Tenemos alternativas muy viables y creativas, nueve o diez, que nos podrían ayudar a mitigar el volumen faltante”.
Precios: “Nuestra política de precios no está directamente relacionada con el incidente, tenemos un plan que contempla costos y volúmenes. Vamos a continuar con este plan”.
Plan de reconstrucción de la refinería: “Hoy está en operación el Topping 4, que produce 4.000 m3/día. El Topping C fue dañado, en menor proporción que el Coke A, y calculamos que nos llevará entre 30 y 45 días ponerlo en funcionamiento”.
Seguros: “En cuanto al seguro, estamos cubiertos para daños materiales y lucro cesante”.
NOTA
Luego de la conferencia de prensa, YPF confirmó que se puso en marcha la unidad Topping D, llevando la producción a 7200 m/día.
Descomunal esfuerzo de los bomberos durante el combate contra el incendio.
El incendio de la refinería de YPF en Ensenada provocará un incremento de entre 50% y 60% en las importaciones de la petrolera expropiada. Así lo aseguró ayer Miguel Galuccio, presidente y CEO de la compañía, al evaluar el impacto de las llamas en el petróleo.
Según Galuccio, un 10% de la producción de YPF en 2012 provino de importaciones. Este año, el combustible comprado afuera representará entre un 15% y 16% de la producción.
Aunque el ejecutivo declinó de dar cifras, YPF importó nafta y gasoil por más de US$ 800 millones en 2012. Eso implica que este año tendrá que comprar, al menos, US$ 1.200 millones. Son US$ 400 millones más de lo previsto.
Según estimaciones que manejan otros especialistas del sector, esas importaciones podrían trepar hasta los US$ 1.400 millones.
“Para el tamaño de la compañía, que factura US$ 16.000 millones anuales, el costo no es de una magnitud importante ”, expresó Galuccio. “No estamos preocupados por el costo. Tenemos seguros para el lucro cesante”, agregó.
Clarín informó, en su edición del 2 de abril, que varios ex secretarios de Energía auguraban para este año una importación de energía récord, de US$ 15.000 millones, debido a la caída de la producción.
“ Vamos a asegurar abastecimiento de nuestras estaciones de servicio, aunque tenemos menor capacidad de refinación”, puntualizó Galuccio.
La refinería de La Plata es la mayor que posee YPF, ya que representa un 60% de su producción. Ahora, esa planta está funcionando al 15% de su capacidad. Según Galuccio, hacia el final de esta semana estará llegando a un 56% (procesará 16.000 metros cúbicos sobre 28.500 metros cúbicos posibles). En dos meses, cuando se haya reparado el topping C (que se incendió), estará al 84% de su capacidad (24.000 metros cúbicos), según la compañía.
El 16% de combustible que le faltará se sustituirá a través de importaciones.
“Veníamos importando el 10% de lo que se producía. Vamos a tener que movernos posiblemente al 15%-16%, depende de cuán efectivos seamos”, detalló Galuccio.
Según los datos de la secretaría de Energía, YPF importó un 1% de las naftas que despachó en 2012. En gasoil, en cambio, trajo de afuera casi un 10% de lo que vendió Para compensar esta salida de dólares, YPF cuenta con crudo (petróleo) que podría exportar, ya que no cuenta con la capacidad para destilarlo, según recalcaron en la compañía. Aunque ese precio varía según la calidad del petróleo y el momento de venta, de esa forma podría obtener US$ 400 millones requeridos.
En las estaciones de servicio circuló el rumor de un aumento de precios para afrontar esta situación. Galuccio no descartó la posibilidad de incrementos, pero trató de desvincularlo del incendio.
“ Nuestra política de precios está totalmente desconectada de este incidente. Tenemos un plan que contempla costos, contempla volumen, por supuesto también contempla precios y vamos a continuar con ese plan”, aseguró Galuccio. Es la segunda vez en el año que el presidente de YPF afirma que su compañía incrementará los importes tal como lo venía planeando.
Galuccio recibió a los medios en el anfiteatro de la torre de la compañía en Puerto Madero. Aunque se guardaron dos filas para funcionarios oficiales (de Planificación y Economía), al presidente de YPF lo acompañó el director de Estrategia Fernando Giliberti.
A YPF se le quemó el horno de coque A y tendrá que esperar un año para la construcción de una nueva instalación.
Costará US$ 800 millones.
“No tendremos problemas de dinero para campear esta situación”, recalcó Galuccio. “En los próximos meses tendremos algo cerrado de inversión con socios, además de las exitosas emisiones de ON que hicimos”.
Ámbito Financiero/ Silvia Peco
Como consecuencia del siniestro que afectó a la refinería La Plata de YPF el martes de la semana pasada, la empresa estima que deberá aumentar la importación de combustibles desde el 10% del total de su producción al 15% o al 16%, según dijo ayer el titular de la empresa, Miguel Galuccio. Si se consideran las cifras de la Secretaría de Energía, entre junio de 2012 y febrero de este año, los ocho meses de la nueva gestión, YPF importó por u$s 828 millones, cifra que anualizada implica u$s 1.242 millones. Si éste es el 10% de la producción, llevarlo al 16% significaría un gasto adicional de u$s 745 millones, que impactará en el saldo comercial del país y en los números de YPF, porque el producto importado se vende al público por debajo de su valor.
Galuccio dijo ayer que "para el tamaño de la compañía no es un costo importante" el que tendrá el siniestro. "Estamos más preocupados por recuperar la producción que por los costos y, además, tenemos los seguros de la refinería", afirmó y puntualizó que "YPF factura u$s 16.000 millones anuales, por lo cual el volumen a importar (por la baja en la producción de la refinería) es completamente manejable".
Galuccio se negó a comentar si el Gobierno estudia aumentar el porcentaje de biodiésel y etanol en los combustibles para atenuar las consecuencias del accidente, y también afirmó que "la política de precios de YPF está desconectada del incidente y va a continuar tal como está planeada", sin entrar en detalle sobre si habrá un aumento en fecha próxima.
También aseguró que maneja entre 9 y 10 opciones para optimizar la producción y reducir el volumen a importar. Aunque Galuccio insistió en que la prioridad es el abastecimiento de las estaciones de servicio, YPF podría resignar algún punto de su participación en el mercado (que hoy promedia el 55% entre naftas y gasoil, según el directivo), llevando a una merma de los stocks en los surtidores que obligaría a los expendedores a poner cuotas al público para no quedarse sin producto y cruzar las mangueras. Esto es así porque en manos del Estado, YPF no puede fijar precios por encima de sus competidoras para disminuir la presencia en el mercado y aliviar la pérdida por la caída en la producción propia.
Galuccio explicó que la refinería La Plata tiene una capacidad total de producción de 28.500 metros cúbicos diarios. Tras el incendio provocado por la inundación en la zona, la planta produce actualmente 4.000 metros cúbicos, estimándose que en los próximos días se reanudará la actividad en la unidad de Topping D que elevará la producción a 16.000 metros cúbicos. En tanto, se espera que en un plazo de 30 a 45 días se pueda reactivar la unidad Topping C y llevar la refinación a 24.000 metros cúbicos. Ése sería el nuevo límite de la capacidad luego de que quedó inutilizada la unidad de coke. "De 24.000 a 28.500 es el déficit por la pérdida de Coke A", dijo Galuccio, lo que significa el 15,8% de la producción del complejo La Plata, y un 7% sobre la producción total de YPF, según los números suministrados por la empresa.
El directivo afirmó que "la nueva planta de coke que fue aprobada por el directorio en diciembre pasado llevaría la producción en la refinería a 33.500 metros cúbicos". Dijo que se están tomando "las acciones para acelerar la construcción de esa instalación", que requiere una inversión de u$s 800 millones, pero estimó que estará en operaciones "en los próximos años", estimándose que podría ocurrir entre 2014 y 2015.
Galuccio explicó que el siniestro en la refinería se debió a que el sistema de descarga del agua de lluvia está ideado para la caída de hasta 95 milímetros en seis horas, mientras el martes 2 cayeron 315 milímetros en esa cantidad de tiempo. Añadió que se trató de "una situación meteorológica sin parangón estadístico en 10 años", y que cuando desbordó la pileta que separa agua de hidrocarburos, "todavía el horno en la unidad de coke estaba entre 200 y 300°", lo que originó la explosión. Explicó que "a diferencia de una ignición puntual, la ignición inicial se propagó a lo largo del agua que tenía hidrocarburos", lo que habría motivado dificultades para confinar el fuego. Los focos de incendio cesaron después de ocho horas, sin víctimas personales ni heridos.
El Cronista/ Dolores Ayerra
El incendio que sufrió YPF en su refinería de Ensenada (la más grande le país) por el temporal desatado el pasado 2 de abril demandará a la petrolera estatal importar combustibles por aproximadamente u$s 400 millones más de lo previsto. De esta manera, el total de importaciones de la empresa podría incrementarse hasta el umbral de u$s 1.400 millones en todo el año, según estimaciones de la industria y que se pueden calcular a partir de algunos números oficiales.
Aunque no detalló ni las cantidades ni los costos, el titular de la compañía, Miguel Galuccio, confirmó ayer en una conferencia de prensa que brindó para explicar las causas y algunos alcances del incidente, que el siniestro –uno de los peores que padeció la industria petrolera– obligará a la firma a elevar en un 60% el nivel de importaciones que tenía previsto para este año. “No puedo hablar ni de volúmenes ni de costos, pero puedo decir que para garantizar el abastecimiento calculamos importar 6% más desde el nivel del 10% de la producción total que teníamos previsto importar en el año y fue lo que importamos en 2012. Es decir, estaremos en un nivel de entre 15% y 16% ahora”.
Si bien existen varios factores que influyen en el costo de cada importación (tipo de producto, contrato, precio relativo internacional, entre otros), lo cierto es que las compras al exterior significarán un desembolso mayor al que la empresa afrontó el año pasado por importaciones. Según datos de la Secretaría de Energía fueron casi 900.000 m3 en concepto de gasoil y nafta y le insumieron a la empresa entre u$s 750 millones y u$s 800 millones. Si se toma un promedio de lo que la firma ya gastó en el primer bimestre de 2013, que según cifras oficiales fueron más de u$s 155 millones–enero registró pagos por u$s 54.803.396 y febrero por u$s 101.922.384 millones–, previo al incidente YPF habría importado combustibles por u$s 930 millones en el año. Ahora, teniendo en cuenta el aumento del 60% en el nivel de compras externas, el costo adicional rondaría unos u$s 400 millones.
Pero las importaciones solas no alcanzan para paliar las graves consecuencias del incendio, con una reducción del 7% sobre la producción total de la compañía. Galuccio reveló que tomará cerca de 45 días recuperar recién el 80% de la capacidad diaria de producción del establecimiento (28.500 m3). Para contrarrestar esta situación, el ingeniero destacó que “tenemos un stock de combustibles y estamos analizando nueve o diez alternativas muy viables para mitigar la pérdida de volumen”, aunque no las detalló. Según pudo saber El Cronista, dentro de las opciones, se contempla pedir a las empresas competidoras que aumenten su producción para auxiliar a YPF. Mañana, de hecho, habrá una reunión clave en el Palacio de Hacienda, donde la Comisión de Hidrocarburos integrada por el ministro de Planificación, Julio De Vido; el viceministro de Economía, Axel Kicillof y el secretario de Energía, Daniel Cameron, recibirán a los ejecutivos de las petroleras Shell, Petrobras y Axion–ex Esso–. También estará presente Galuccio.
Con todo, ayer el CEO de YPF prometió que no habrá faltantes en las estaciones de servicio en ningún momento. El ejecutivo afirmó que todavía no se pueden contabilizar el impacto económico del incendio (en una o dos semanas habrá un informe de una comisión investigadora), pero que aseguró que “para el tamaño de la economía no es un costo importante, ni le genera problemas de dinero”. Asimismo, garantizó que no habrá modificaciones en sus planes de inversión, ni modificaciones en los precios de sus productos.
La Nación/ Pablo Fernández Blanco
El martes de la semana pasada a las 16 comenzó a llover en La Plata. Dos horas más tarde, YPF suspendió la operación de la refinería de Ensenada, que procesa el 30% del crudo que se utiliza para producir combustibles. Entre otras cosas, apagó el horno de Coke A, que trabaja a 500 grados centígrados. Pero la lluvia siguió llenando la denominada pileta API, una instalación contigua que separa el petróleo del agua. A las 19, el producto que estaba en su superficie desbordó, por lo que una capa de agua con hidrocarburos se deslizó hasta el Coke A, que estaba todavía a una temperatura de entre 200 y 300 grados centígrados.
La combinación de producto inflamable y fierros calientes, que nunca se deben mezclar, inició el fuego que destruyó una parte de la mayor destilería del país y le puso por delante un problema imprevisto a la gestión estatal. Ocho horas más tarde, el fuego estaba apagado. Pero la reparación total del daño a la planta llevará un tiempo que aún no fue determinado.
Palabras más, palabras menos, ése fue el relato que expuso ayer en una conferencia de prensa el presidente de YPF, Miguel Galuccio, en la torre de la empresa estatal en Puerto Madero. Galuccio contestó preguntas y se excusó por no haber dado explicaciones personalmente antes. Justificó esa decisión en que sus equipos estaban abocados a contener el problema, al cual no dudó en llamar "crisis". Y en segundo lugar porque YPF no tenía del todo claros los motivos del fuego ni los daños.
La empresa buscará ahora recuperar la producción. La planta tiene una capacidad para procesar 28.500 metros cúbicos diarios de petróleo. Hoy está en condiciones de usar 20.000 m3; es decir, un 70% de su capacidad. "El Topping C, al lado del Coke A, tuvo un daño menor. Calculamos que su reparación podría llevar entre 45 y 60 días. Lo estamos relevando. Cuando esté listo, llegaríamos a 24.000 m3", sostuvo Galuccio.
La diferencia entre la capacidad de la planta y ese número es el déficit que hoy tiene la empresa. Son 4500 m3, de manera que la planta demorará el lapso que plantea Galuccio para funcionar a un 85% de su capacidad original. Y en el mediano plazo, mediante una inversión de US$ 800 millones, intentará aumentar más su oferta.
Déficit energético
La empresa está dispuesta a comprar en el exterior el combustible que le falte, aunque la decisión va en contra del principal objetivo de la gestión estatal, que busca reducir el déficit energético. "Creemos que con esta brecha vamos a tener que importar algo más (de lo que la empresa venía comprando en el exterior). El número no es significativo. Hoy el mercado está plenamente abastecido", explicó el presidente de YPF. "No puedo dar valores, pero porcentualmente en esta relación producto producido/importado, vamos a tener un incremento de 6 puntos en cuanto a la importación. Hoy estructuralmente importamos el 10% de lo que producimos. Podemos llegar al 15 o al 16 por ciento", dijo Galuccio. Esos números implicarían un incremento de las compras al exterior del orden del 50 por ciento.
Entre enero y febrero, YPF importó por casi 157 millones de dólares. En 2012, en tanto, gastó por esa vía US$ 767,19 millones. De manera que, de acuerdo con las estimaciones de Galuccio, podría sumar a esa erogación otros 380 millones de dólares. Para el presidente de la compañía, sin embargo, no es un número sustancial para una empresa que "factura 16.000 millones de dólares" al año. La empresa, además, quiere reducir las importaciones con respecto al año pasado.
Galuccio también sostuvo que intentarán mejorar la operación. "Hay al menos diez medidas que nos permitirían mejorar la producción", destacó, y deslizó que el uso de "un mayor volumen de biocombustibles impactaría (positivamente) en el volumen total que se produce en el país".
El presidente de la petrolera prometió que el incendio en Ensenada no afectará sus planes de inversión, dado que las erogaciones implicadas "no tienen una relevancia importante desde el punto de vista de los costos para una empresa de la envergadura de YPF". Y aunque no descartó aumentos, dijo que no remarcará los surtidores por el incidente: "No conectamos de ninguna manera nuestra política de precios con lo sucedido", sostuvo.
Página 12
El presidente de YPF, Miguel Galuccio, afirmó que en un plazo de 45 días la refinería de La Plata volverá a operar al máximo de su capacidad. El funcionario hizo estas declaraciones durante una conferencia de prensa realizada en el edificio central de la compañía, con el objetivo de explicar los pormenores del accidente sufrido el pasado 2 de abril como consecuencia de la tormenta e indundación. Galuccio ratificó que la empresa garantizará el abastecimiento a partir del stock existente, sumado a un incremento del 7 por ciento en las importaciones sobre las ya previstas. “Quiero destacar el enorme esfuerzo y valor del personal propio, de los bomberos voluntarios e integrantes de la Prefectura que permitieron defender la refinería”, manifestó. Además, adelantó que se acelerará la construcción de una nueva planta que demandará una inversión cercana a los 800 millones de dólares.
El número uno de la petrolera argentina dio cuenta del estado de situación del Complejo Industrial La Plata. Según el funcionario, las causas del accidente estuvieron vinculadas con un “incremento en los niveles de líquido que colmó la capacidad de almacenamiento y provocó la pérdida del confinamiento del hidrocarburo en la pileta de tratamiento de efluentes”. Esto provocó que una cantidad importante de combustible entrase en contacto con los hornos de otra unidad, y de ahí el incendio que afectó la unidad denominada Coke A. El siniestro se extendió casi en su totalidad a las instalaciones de este proceso industrial y parcialmente a la unidad contigua denominada Topping C.
Con motivo de este accidente, la capacidad de refino de la unidad de La Plata se redujo en un 15 por ciento, lo que representa una disminución a nivel nacional cercana al 7 por ciento. “Para paliar esta situación redefinimos el uso de las instalaciones logísticas para almacenar crudo y contratamos un barco a flote para almacenar el crudo no procesado. El sábado fue reabierta la Terminal de Despacho, con la salida del primer camión de combustible”, explicó Galuccio.
Una de las medidas de la compañía sería redistribuir el crudo a los complejos industriales que la compañía tiene en Luján de Cuyo y Plaza Huincul, con capacidad para refinar 106.000 y 25.000 barriles diarios, respectivamente.
Durante la conferencia de prensa, el funcionario aclaró que no hay riesgo de desabastecimiento. “El mercado está hoy abastecido completamente. Tenemos stock, que cuando es necesario lo volcamos al mercado. Los camiones que se despacharon el domingo formaban parte de ese almacenaje”, aclaró.
Asimismo, el accidente repercutirá en la estrategia comercial de la compañía, ya que habrá que aumentar el nivel de las importaciones por sobre lo ya presupuestado. Este incremento será cercano al 7 por ciento. “Para cubrir la brecha de producción faltante tendremos que importar algo más, pero el número no es significativo para la envergadura económica de la empresa. De lo que ya importamos, tendremos un incremento del 7 por ciento. Contamos con alternativas muy viables y creativas, nueve o diez, que nos podrían ayudar a mitigar el volumen faltante”, respondió Galuccio.
Luego de los primeros trabajos de reconstrucción, ya se puso en operación el Topping 4, que produce 4000 metros cúbicos por día. Ayer por la tarde, entró en funcionamiento la unidad Topping D, incrementando la producción a los 7200 metros cúbicos diarios. La unidad que resultó dañada estará reconstruida en un período que va de los 30 a 45 días.
Por otro lado, el presidente de YPF afirmó que a partir de este incidente la empresa acelerará los planes de inversión previstos para esta refinería. Concretamente, se apurará la inversión de una nueva planta de coke que demandará una inversión de 800 millones de dólares, aproximadamente, y permitirá incrementar en 35.000 metros cúbicos la producción de la refinería de La Plata. “Parte de sus equipos ya están comprados, y su puesta en marcha permitirá a la refinería aumentar su producción, mejorando los resultados de toda la empresa”, concluyó Galuccio.
Urgente 24
El secretario General del Sindicato Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos de Ensenada -SUPeH- dialogó con REALPOLITIK sobre la situación que atraviesa la destilería YPF luego del incendio en la planta de coque A y topping C. En ese sentido, Ramón Garaza remarcó “el coraje que han tenido todos los trabajadores dentro de la refinería ante semejante siniestro”.
A continuación, la entrevista completa.
-¿Cuál es la situación de la destilería YPF?
-En primer lugar, quiero resaltar el coraje que han tenido todos los trabajadores dentro de la refinería ante semejante siniestro. El temporal dejó toda la refinería inundada y esto provocó que todo el combustible derramado por todas las plantas haya provocado la explosión en la planta de coque A.
En estos días lo que se está haciendo es retirar toda el agua de adentro del complejo para posteriormente hacer toda la limpieza. La planta de coque A está totalmente destruida, por lo tanto está fuera de servicio. Y también quedó afectado el topping C. Ahora se están armando los equipos para comenzar a trabajar y poner lo más pronto posible en marcha a la refinería, porque de lo contrario afectará el abastecimiento de la región.
-¿Han tenido reuniones con directivos de la empresa YPF?
-Están viniendo todas las autoridades de YPF. En primer lugar estuvo el ingeniero Carlos Alfonsi, responsable de todo el refinado a nivel nacional; y luego concurrieron Axel Kicillof y Miguel Galuccio para saber las pérdidas millonarias que ha tenido la destilería y cómo se llevará adelante la reconstrucción.
Nosotros nos estamos organizando para integrar el comité de seguridad y los equipos de trabajo, porque ahora viene toda lo relacionado a las tareas de la limpieza, la puesta en marcha y la recuperación de la empresa.
Para esto se necesitan trabajadores idóneos. Como suelo decir, la refinería no es una fábrica de dulce de leche, por lo tanto hay que tener trabajadores preparados.
Nos reuniremos en la organización gremial todo el cuerpo de delegados, la comisión directiva, el movimiento Celeste, los activistas, para trabajar y demostrar una vez más -como pasó en el siniestro- quiénes son los que realmente queremos a la empresa.
Los que le ponen el corazón a la empresa, son los trabajadores, y no solamente en los siniestros sino también en recuperar la refinería para que pueda trabajar normalmente y pueda asistir a toda esta comunidad.
Este es el esfuerzo grande, maravilloso y extraordinario que hacen los trabajadores petroleros, y que suele no ser reconocido de la forma que realmente se merece.
- ¿En qué situación quedaron los trabajadores del coque A y el topping C?
-Esta fue otra preocupación. Estuvimos reunidos con el gerente, el ingeniero Gustavo Chap, en donde como gremio fuimos a plantear la continuidad de los 25 trabajadores efectivos del coque A y los compañeros de mantenimiento que son de la empresa GLC.
Se estaría garantizando la continuidad de los trabajadores. La postura de la organización gremial es clara: que ni se les ocurra alguna locura de que por esto que pasó tengan que reducir personal o haya despidos porque nos van a encontrar en la otra vereda.
Domo de almacenamiento de carbón de la nueva planta de coke, ya construido.
La Justicia, ecologistas y opositores cuestionan el manejo del incendio
Clarín
Un fiscal de La Plata, diputados opositores y la organización ecologista Greenpeace cuestionan el manejo del incendio por parte de YPF.
El fiscal Marcelo Romero (titular de la UFI 6 de La Plata) denunció a las autoridades de YPF por la posible comisión del delito de “incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos”. El incidente “fue groseramente minimizado (por la empresa), tal como si se tratara de la quema de un momo de fin de año”, señaló.
“En las jornadas sucesivas (al siniestro) la zona permaneció cubierta de partículas de coque, carbón o sustancia similar de color negro y fuerte olor, que hasta el momento se observa en la atmósfera y en la superficie”, argumenta en su presentación. “Ante semejante cuadro, las autoridades titulares del directorio de la empresa estatal, en tanto funcionarios del Estado, no brindaron a los habitantes de la zona afectada la debida información acerca de si tal sustancia es nociva para la salud y qué actitud tomar frente a su presencia”.
Galuccio explicó ayer su versión del incendio. A las 16 del martes 2 de abril la lluvia era muy fuerte y a las 18 se produjo una interrupción de la energía eléctrica.
“Por las fuertes lluvias, los niveles de líquidos crecen de una manera inusual y se colma la capacidad de agua del complejo perdiendo el confinamiento de hidrocarburos en la pileta API (contenedora)”, explicó Galuccio.
“El producto del combustible que se derrama en la pileta API llega al coke A y se origina el incendio. Esto es poco común en una destilería, que veamos un derrame de una pileta API de esta magnitud”, analizó el ejecutivo.“Generalmente en una refinería para que haya fuego tiene que haber dos condiciones: un punto caliente y combustible o producto. En este caso, el punto caliente fue el coke A y el combustible fue el que desparramó desde la pileta API”, detalló.
“Como no pudimos manejar todo el efluente que teníamos que descargar en el canal, no pudimos manejar todo el volumen de lluvia que recibíamo s. Al desbordarse la pileta API, el producto que estaba por encima de la pileta corrió y tocó el coke A que estaba a una temperatura alta y esa temperatura alta hizo que se produjera la ignición”, reconstruyó Galuccio. “Detuvimos en menos de 8 horas todos los focos ígneos”, aseguró. Según su relato, cayeron 315 milímetros, y la refinería estaba lista para 95 milímetros.
El diputado Enrique Thomas (del Frente Peronista) presentó un pedido de informe junto con Ricardo Gil Lavedra (titular de la bancada de la UCR) Julián Obiglio (PRO) y Patricia Bullrich (Unión por Todos). “Como dice YPF, si el problema fue ocasionado por la cantidad de agua acumulada, ¿cómo es que no se tomaron las medidas pertinentes ante una contingencia como esta? Es altamente peligroso que ante una inundación se produzca un siniestro de tales características teniendo además el entorno densamente poblado en el que se encuentra situada la planta”, planteó Thomas.
“Si las llamas alcanzaban los tanques de almacenamiento de hidrocarburos se hubiera generado un desastre ambiental.
Esa situación estuvo muy cerca de producirse”, marcó Lorena Pujó, coordinadora de la campaña de Tóxicos de Greenpeace. “YPF evacuó a sus empleados, pero no avisaron nada a los vecinos que se encuentran a metros del lugar”, criticaron. Y pidieron que “informen públicamente sobre los planes de remediación de aguas y suelos afectados por el accidente, y que presente planes de adaptación frente a eventos climáticos recurrentes”.
La Nación
Un fiscal de La Plata presentó una denuncia penal contra las autoridades de YPF por el "delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público", por considerar que subestimaron el incendio desatado en la refinería ubicada en la vecina ciudad de Ensenada, durante la noche en que se produjo el trágico temporal del 2 de abril.
El titular de la Fiscalía Nº 6 de La Plata, Marcelo Romero, consideró en su denuncia que el siniestro "fue groseramente minimizado, tal como si se tratara de la quema de un momo de fin de año". Para el representante del Ministerio Público, frente al incendio se registró una "ausencia de información certera", por lo que "ante semejante cuadro y la ausencia de información certera acerca del temperamento a adoptar, muchos de los vecinos decidieron autoevacuarse".
En la demanda -que recayó en la Fiscalía Nº 5, a cargo de Juan Cruz Condomí Alcorta-, se consigna que a raíz del incendio en el horno de coque A y en la unidad de destilación Topping C, "la zona permaneció cubierta de partículas de coque, carbón o sustancia similar de color negro y fuerte olor, que hasta el momento se observa en la atmósfera y en la superficie". Y añade: "Las autoridades de YPF, en tanto funcionarios del Estado, no brindaron a los habitantes de la zona afectada la debida información acerca de si la sustancia es nociva para la salud".
Romero enfatizó que "la correcta información y la obligación de que ésta llegue en debida forma a los ciudadanos es una de las tantas responsabilidades por las que los funcionarios públicos debemos velar", por lo que "su incumplimiento acarrea la sanción prevista en el art. 249 del Código Penal".
Para el fiscal platense, "el silencio empresarial estatal no necesariamente implica que dichas partículas depositadas en toda superficie sean inocuas, debiendo someternos a decisiones y conductas transmitidas de boca en boca, generando rumores y trascendidos".
Mientras, el diputado nacional Enrique Thomas, del bloque Frente Peronista, presentó un pedido de informes para conocer "de manera fehaciente" lo ocurrido en la explosión. El texto fue acompañado por Ricardo Gil Lavedra (UCR), Julián Obiglio (Pro) y Patricia Bullrich (Unión por Todos)..
Galuccio brindó una conferencia de prensa en la que detalló las causas del incendio y el plan de recuperación de la refinería La Plata.