Por estos días Francisco Javier Errázuriz Ovalle vive uno de sus desafíos profesionales más importantes: busca ingresar al mercado del litio y, por lo mismo, ha activado una intensa agenda de reuniones con autoridades.
A mediados de enero acudió al Ministerio de Minería. Se reunió por medio de una reunión por lobby con el Subsecretario Pablo Terrazas y posteriormente hizo lo mismo con el encargado del Grupo de Control y Ventas de Litio de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), Mauricio Maureira. En ambas citas abordó la política del gobierno con los CEOL (Contratos Especiales de. Operación del Litio), y también entregó detalles de los proyectos asociados a las pertenencias mineras de la Empresa Cominor (filial del Grupo Errázuriz) para tratar la salmuera de Salar de Maricunga.
Para llevar a cabo la iniciativa el Grupo Errázuriz junto a su socia taiwanesa Simbalik, evalúa la instalación de una planta de carbonato y otra de hidróxido, pero la decisión aún no la ha tomado y, por lo mismo, anticipó que requerirá más tiempo para los estudios de inyección.
El Grupo Errázuriz pretende desarrollar una planta de litio que permitirá la producción de 5.700 toneladas del mineral al año y de 9.100 toneladas de hidróxido de litio anual. Sin embargo, se trata de una cantidad muy baja en comparación con SQM -ligada a Julio Ponce Lerou-, cuya planta en Salar del Carmen alcanzaría las 100.000 toneladas durante 2019 con mejoras productivas.
No es secreto para nadie que en círculos empresariales y de abogados especialistas en litigios que Ponce y Errázuriz no se pueden ni ver. Desde que este último asumiera el liderazgo de los negocios del grupo que fundó su padre, Francisco Javier Errázuriz Talavera, las escaramuzas en tribunales por el control del agua en los mercados en que compiten, como yodo y potasio, ha sido cada vez más fuerte.
A los 38 años de edad, Francisco Javier Errázuriz Ovalle debió asumir la presidencia del directorio del grupo que cuenta un portfolio diversificado en materia de inversiones e intereses; desde la pesca hasta a la minería no metálica. No estaba en sus planes, pero en octubre de 2011, su padre, ex senador y candidato a la Presidencia de Chile, sufrió un derrame cerebral, dejándolo convaleciente hasta el día de hoy (76). Según ha comentado, Frafrá “se encuentra estable dentro de su gravedad”.
Con 46 años, Errázuriz Ovalle está prácticamente está todo el día conectado a los negocios. Quienes se relacionan con él, cuentan que sus llamadas son casi siempre cortas y al grano. No le gusta perder tiempo con rodeos. Un ejemplo gráfico de su estilo: suele llevar consigo su calculadora personal y en las reuniones a las que cita, la pone sobre el amplio mesón en el que recibe a sus invitados.
Ingeniero comercial de la Universidad de Chile, cuentan que le gusta enfrentarse a grandes conglomerados en los sectores en los que compite. Sin embargo, existen otros que aseguran que por medio de conflictos judiciales logra abrir las bases para negociaciones que finalmente le resultan favorables.
Ejemplo de ello son los numerosos litigios de Cosayach, minera que pertenece al Grupo Errázuriz, con Soquimich -ligada a Julio Ponce Lerou, el hombre más rico de Chile según Forbes 2019- por el acceso al agua en la Pampa del Tamarugal. Se trata de antiguos conflictos que arrastran por años y en los cuales ha debido intervenir la Dirección General de Aguas (DGA). Ejemplo de ello es la disputa judicial que ambas mineras llevaron adelante entre 1994 y 2014.
La batalla más polémica ocurrió en 2012, cuando SQM ganó uno de los Contratos Especiales de Operación de Litio (CEOL). Sin embargo, la minera no metálica no cumplía a cabalidad las bases de la licitación debido a que mantenía litigios con el Estado. Al percatarse de aquello, el Grupo Errázuriz por medio de la minera NX Uno de Peine -representada por el abogado Cristián Rosselot, el mismo que la semana pasada estuvo detenido por amenazas- se sumó a la impugnación que realizó la coreana Li Energy del contrato que benefició a SQM.
Cuatro años más tarde, Francisco Javier Errázuriz Ovalle y Julio Ponce Lerou por primera vez se verían las caras. No fue en tribunales. Tampoco en un seminario de Casa Piedra, sino que en una celebración conmemorativa de aniversario del estudio de abogados Cubillos & Evans. En un salón del Hotel Hyatt ambos cruzaron palabras, no hubo mayor interacción, pero sí se saludaron “caballerosamente”, recordó uno de los protagonistas a sus cercanos.
Con una facturación anual que se ubica entre los US$600 millones y US$700 millones, el Grupo Errázuriz genera 4.500 puestos de trabajo directos y 4.000 indirectos. Cada área productiva del conglomerado posee un directorio, compuesto por un conjunto de profesionales, los siete hermanos Errázuriz Ovalle y asesores externos e independientes. Entre ellos están: Alejandro Puelles Ocaranza, gerente de Gestión hace cinco años en el grupo. Anteriormente fue jefe de Proyectos de la consultora ambiental Arcadis, y durante 14 años se desempeñó como ejecutivo de SCM Cosayach.
En el área de pesca Nestor Velásquez, está a cargo de la gerencia general de Bahía Coronel. En tanto la salmonera Holding & Trading es liderada por Roberto Pradenas. De igual manera, Hernán Mora se encarga del brazo inmobiliario. Mientras que como gerente general de la Compañía de Seguros Renta Nacional se desempeña Jorge Sims San Román.
