A marzo, cuando se produjo el freno, la empresa ya había trasladado el 40 por ciento de la escombrera
JUAN FACUNDO OLIVERA
La crisis sanitaria que se produjo en Chile y en Argentina por el avance del coronavirus frenó el retiro de la escombrera Cerro Amarillo en Calingasta. Según indicaron desde el Ministerio de Minería, las tareas que lleva adelante la minera Pelambres se paralizaron en marzo por disposición de Cancillería de ambos países. A esa fecha, las tareas tenían un avance del 40 por ciento respecto a las 40 millones de toneladas de material y rocas que la compañía había depositado en territorio sanjuanino.
Según el plan original, que la empresa venía sobrecumpliendo, el movimiento del 40 por ciento debía producirse al 30 de junio de este año, por lo que el freno ha producido una demora de tan solo dos meses. Por eso, según indicaron fuentes oficiales, las autoridades provinciales y nacionales, tanto de Chile como de Argentina, están trabajando para retomar el retiro "lo antes posible", a través del OK de ambas Cancillerías.
Las fuentes indicaron que Pelambres ya le envió un escrito al embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa, para que este interceda con Felipe Solá, ministro de Relaciones Exteriores, para que se habilite el paso exclusivo que se creó en Calingasta para hacer el traslado del material. Es que, en ese lugar, las autoridades nacionales dispusieron personal para llevar adelante el control de las máquinas y de verificación para los que ingresan a territorio argentino para hacer el retiro. El Ministerio de Minería, que conduce Carlos Astudillo, a través de la Secretaría de Gestión Ambiental y Control Minero, también realiza auditorias en el lugar.
Al ser consultado sobre el retiro, el ministro Astudillo indicó que "a marzo, cuando se produjo el freno, la empresa ya había trasladado el 40 por ciento de la escombrera. Con esa cifra, ellos habían sobrepasado el plan original. Incluso, se estimaba que ese porcentaje se iba a alcanzar a fines de junio". La cifra representa 16 millones de toneladas de escombros que ya fueron devueltos a territorio chileno. Con el avance que la empresa había logrado hasta marzo y con el parate producto del cierre de las fronteras, no se generaron retrasos hasta el 30 de junio, pero luego el tiempo comenzó a correr generando una demora que, hasta la fecha, comprende a los meses de julio y agosto.
El retiro de la escombrera Cerro Amarillo comenzó en diciembre de 2017, con un plazo de ejecución de cinco años y medio para concluir las tareas, según había dispuesto el juez federal Leopoldo Rago Gallo, quien tiene a su cargo la causa penal (Ver nota vinculada página 9). Dicho plazo indica que, para mediados de 2022, el retiro debe estar concluido. La finalización de tal tarea no es menor, ya que los representantes legales de Pelambres apuestan a solicitarle a la Justicia la extinción de la acción penal por haber remediado el conflicto. Además, una mayor velocidad se traduce en un ahorro para la empresa, economía que podría alcanzar los 120 millones de pesos.
La escombrera Cerro Amarillo tiene una dimensión estimada en 24 millones de metros cúbicos de material. En principio, según las aproximaciones, el costo total del retiro iba a rondar unos 210 millones de dólares. Todos los fondos, incluso la maquinaria, son asumidos por la empresa minera Los Pelambres.
24 Es la cantidad de millones de toneladas de material que queda en la cordillera, en territorio sanjuanino, a la espera de ser removido por parte de la empresa minera Los Pelambres.
Según la resolución del Juez federal Leopoldo Rago Gallo, la empresa tiene cinco años y medio para retirar los escombros, con un año más de plazo si es necesario. La compañía estuvo cinco años para armar la escombrera, desde el 2007 hasta el 2012, cuando la situación fue denunciada en la Justicia Federal.
La primera medida que llevó adelante la empresa Pelambres fue el retiro de 570 neumáticos que estaban en territorio sanjuanino, al pie de la escombrera. El movimiento se inició en noviembre de 2016, luego de que la Dirección General de Aduana notificara al Ministerio de Minería el dictado de una resolución que se habilitaba el Paso Fronterizo exclusivo "Escombrera Cerro Amarillo".
El movimiento finalizó el 31 de enero del siguiente año. La tarea fue supervisada por personal de Gendarmería Argentina y Carabineros de Chile, quienes contribuyeron a habilitar un paso fronterizo ocasional y custodiaron que el trabajo se efectuara respetando las legislaciones de ambos países.
Los neumáticos fueron reubicados en un patio de acopio temporal dentro de las instalaciones de la minera Pelambres en Chile.
2013 La empresa Xstrata (hoy Glencore) envió una notificación a Pelambres en la que le hizo saber que la escombrera estaba ocupando territorio argentino.
2015 Sin tener respuesta por parte de la compañía chilena, las autoridades de Pachón decidieron radicar una denuncia contra Pelambres.
2016 Como primera medida, la compañía dispuso el retiro de los 570 neumáticos. A fines de enero de 2017, ya se habían retirado todos.
2017 El juez federal Leopoldo Rago Gallo ordenó el retiro de las 40 millones de toneladas de rocas que la minera chilena arrojó en suelo calingastino.
2019 Por no informar a tiempo la existencia de la escombrera Cerro Amarillo, la provincia sancionó a Pachón con una multa de 41.491.200 de pesos.
