Después de cinco días de idas y vueltas, el Banco Central intervino para intentar destrabar las ventas de dólares, que están suspendidas desde hace una semana.
La autoridad monetaria dispuso este martes un nuevo cambio en el sistema. Ahora estableció que los bancos validen directamente con la web del Central las autorizaciones para hacer transacciones, sin pasar por la base de datos de la ANSES. Con esto se busca agilizar las operaciones.
"El Banco Central de la República Argentina (BCRA) solicitó a la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) la información para que el BCRA valide a los bancos los datos necesarios a los efectos de habilitar a personas humanas la compra de divisas para atesoramiento", dice el comunicado del BCRA.
Y agrega: "A partir de este acuerdo, las entidades financieras dejarán de consultar en la página de Internet de la ANSES para obtener la certificación negativa denegada y realizarán esa certificación contra la base de información del BCRA".
"La ANSES compartirá la información con el BCRA dentro del marco de un acuerdo de colaboración que resguarda la privacidad de la información", destaca.
Al respecto, desde el BCRA confirmaron a Télam que el mecanismo tendrá garantizada la protección de datos de las personas, ya que los bancos no van a tener acceso a la base de Anses ni van a poder identificar el motivo por el que la persona podría no estar habilitada para la compra de dólar ahorro.
Las operaciones de compra de dólares están suspendidas desde hace una semana y podrían seguir así hasta octubre. Lo admitió Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), que nuclea a las entidades extranjeras que operan en el país. Y adelantó que, cuando regresen las ventas, habría que sacar turno para poder operar.
Cesario dijo en declaraciones radiales que una vez superadas las dificultades que frenan la compra de divisas, "se podría volver a comprar en octubre".
Tal vez un anuncio que realizó anoche el Banco Central eche un poco de luz sobre estas trabas. Concretamente, el organismo monetario informó anoche que "solicitó a la ANSES la información para que el BCRA valide a los bancos los datos necesarios a los efectos de habilitar a personas humanas la compra de divisas para atesoramiento.
A partir de este acuerdo, las entidades financieras dejarán de consultar en la página de Internet de la ANSES para obtener la certificación negativa denegada y realizarán esa certificación contra la base de información del BCRA.
El BCRA aclaró que "la ANSES compartirá la información con el BCRA dentro del marco de un acuerdo de colaboración que resguarda la privacidad de la información"
El BCRA también eliminará la validación que disponía la Comunicación A7105 para las transferencias que se cursan entre cuentas.
Los bancos, y los ahorrista, esperan que tras este anuncio se agilicen las operaciones. Hasta ayer, fue un feriado cambiario virtual.
Ocurre que por las nuevas restricciones dispuestas por el Banco Central, los bancos debían hasta este martes chequear que las personas que quieren comprar dólares estén habilitadas para hacerlo. Pero ese cruce de datos es engorroso y aún no encontraron la forma de hacerlo de manera ágil.
Uno de los principales nudos se da con ANSES. Por las nuevas normas ya no podrán comprar dólares quienes reciben planes sociales, como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). Por lo tanto, cada banco debe chequear si la persona que quiere comprar tiene o no un plan de este tipo.
ANSES cuenta con un link que permite hacer este chequeo de forma manual, caso por caso. Los bancos dicen que así el sistema es inviable y piden una solución expeditiva.
"Lo que necesitamos es un "tubo" que nos permita hacer la consultas de forma masiva. De lo contrario, lo demás son parches", dijo Cesario. "Si nosotros no lo hacemos (los controles que pide el Central) hay una ley penal cambiaria que nos sanciona. El problema es que en Argentina siempre se repite la misma historia, la gente no confía en la moneda".
Cesario remarcó que para el resto de las transacciones los homebanking están funcionando, aunque indicó que también están frenadas las transferencias de dólares. Para estas operaciones, el Central pide "los certificados que habiliten a las dos personas".
El ejecutivo advirtió que si no se llega a una solución, lo más probable es que los bancos tengan que poner en marcha turnos para la compra de dólares. Así el interesado debería chequear ante ANSES para ver si está autorizado a comprar, y si lo está, conectarse con el banco que le habilitaría la operación en 48 horas. "La solución sería armar un turno virtual para la compra de dólares", señaló.
"Antes de vender dólares hay que averiguar si (los que quieren comprar) tienen algún subsidio de la seguridad social o entraron en la refinanciación de saldos de tarjeta. A toda la gente que tiene ayuda estatal el propio gobierno les dice que no tiene acceso a los dólares", indicó.
"Lo que propone ANSES es imposible llevarlo a la práctica con cada uno de los clientes.Si pudiésemos realizar una consulta masiva en su base de datos, seguramente la transacción podría ser más expeditiva", afirmó.
La página de ANSES para chequear quienes están inhabilitados funciona con un CAPTCHA, un recurso de validación para establecer que el que está operando es una persona y no un robot. "Tenemos que hackear el sistema de ANSES para saltear el robot y acceder al certificado. El Banco Central dice que la información es pública, pero ANSES dice que no la pueden dar".
Por otra parte señaló que están trabajando para que el primer día de octubre el sistema no colapse cuando se reactive la compra del dólar ahorro, pero dijo que habrá un riesgo adicional que "es que colapse la página de ANSES", tal como ocurrió anoche.
Pero advirtió también que el de ANSES no es el único filtro que hay que pasar para chequear si se pueden comprar dólares o no. "Y no existe una única base de datos que reúna toda esa información".
Ante la pregunta acerca de si todos estos controles lo que buscan es que se deje de vender dólares al público, Cesario respondió: "lo que el Central quiere es que no compre el que no puede, pero el sistema no está fácil. No sé si quieren o no quieren. Estamos metidos en una vorágine donde todos los jueves meten una norma nueva y hay que ajustar todo de nuevo".
