El Senado de Chile aprobó un proyecto de ley respaldado por el Gobierno que permite a las personas acudir a sus ahorros de pensión por segunda vez, mientras que rechazó un proyecto de ley similar presentado por la oposición.
El Senado respaldó el jueves la propuesta con 35 votos a favor y uno en contra, luego de una medida similar aprobada a principios de este año. Rechazaron el proyecto de ley rival adelantado por la oposición, que el presidente Sebastián Piñera se había comprometido a llevar ante el Tribunal Constitucional.
Piñera y legisladores de la oposición se han enfrentado por los fondos de pensiones de gestión privada de Chile, los cuales se han convertido en un tema central en las protestas sociales de los últimos meses. A principios de este año, el Congreso desafió la presión del Gobierno al aprobar una legislación que dio lugar a US$17.000 millones en retiros de pensiones. Cuando los legisladores presentaron más tarde otro proyecto de ley en la misma línea, el presidente contraatacó desafiándolo en el Tribunal Constitucional, mientras presentaba a regañadientes su propia propuesta.
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Los senadores aún deben votar sobre los artículos que podrían modificar algunas partes del texto antes de pasar a la Cámara de Diputados. Se espera que el proyecto de ley genere aproximadamente US$15.000 millones en nuevos retiros.
La legislación forma parte de una lucha más amplia por el futuro de las pensiones de Chile, que tienen aproximadamente US$200.000 millones en inversiones. El sistema actual, introducido durante la dictadura de Augusto Pinochet, ha sido blanco de los manifestantes por sus bajos pagos a los jubilados.
Los detractores perciben los fondos de pensiones privados como una causa de desigualdad en un país con grado de inversión que tiene mayor capacidad de gasto en su gente. La población ha usado el dinero de los primeros retiros para pagar deudas, comprar bienes de consumo como electrodomésticos e incluso hacer pagos iniciales para viviendas nuevas.
Por otro lado, los inversionistas señalan que las AFP financian inversiones e infraestructura cruciales a nivel nacional. Será un tema sensible en un país que reescribirá su Constitución el próximo año.
En medio del brote de coronavirus, el Gobierno de Piñera prometió ayuda de emergencia por un valor de 12% del producto interno bruto, con medidas que incluyen préstamos a tasas de interés bajas y programas de protección laboral. No obstante, los retiros de pensiones se destacaron por su impacto directo, impulsando un crecimiento más fuerte de lo esperado en el tercer trimestre y agregando 1,2% al PIB solo este año, según el banco central.
El Ministerio de Hacienda de Chile espera una contracción de la economía de 5,5% este año antes de recuperarse 5% en 2021.
La Tercera
El segundo retiro de los fondos de pensiones camina a paso rápido para ser ley. Y si bien aún no se sabe con certeza si será el proyecto de la oposición o del gobierno, lo cierto que las personas ya comenzaron a sacar cuentas en qué gastaran esos dineros.
De acuerdo a lo declarado por los consumidores en una encuesta realizada por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) y Kawesqar, aparecen algunos cambios relevantes en la intención de gasto, con un aumento importante en los destinos asociados a ahorro, inversión y emprendimiento, en desmedro de la compra de alimentos y productos de primera necesidad que pasó de 51% a 44%.
También disminuyó de forma significativa la intención de pago de cuentas de servicios básicos, de 29% a 25%. En ambos casos se intuye que el alivio financiero que supuso el primer retiro de fondos ha disminuido la presión sobre los gastos de primera necesidad, considerando además los contextos temporales en que se dan las dos iniciativas: la primera, cercana a los momentos más complejos de la crisis, mientras que la segunda ocurre en un escenario de progresivo desconfinamiento, con reapertura de actividades productivas y ocupaciones laborales.
El pago de préstamos se mantuvo entre los destinos de los fondos más mencionados, subiendo incluso 2 puntos, hasta un 30% de los encuestados, lo que sugiere un interés por estar al día en las cuotas crediticias durante diciembre y la necesidad de aliviar la situación de endeudamiento de los hogares luego de los meses más duros de la crisis.
La intención de compra de bienes durables y semi durables muestra una leve disminución, congruente con la fuerte incidencia que tuvo este tipo de bienes dentro del gasto del primer retiro, que permitió actualizar parte del equipamiento de los hogares. La intención de compra de estos bienes disminuyó de 19% a 18%, mientras que la de vestuario y calzado bajó de un 16% a un 14% y automóviles se mantuvo en 6%. La inversión en arreglos y mejoramiento de hogar, en tanto, se mantuvo en el 16% de las menciones de consumidores.
Entre los resultados más interesantes se observa un significativo aumento de 11% a 16% en la intención de invertir en un emprendimiento o negocio, y de un 11% a un 15% en instrumentos de ahorro.
De cualquier forma, tanto estos resultados como los relacionados a los gastos de primera necesidad debieran estar influidos también por el perfil de los cotizantes que efectuarán el segundo retiro, ya que, dependiendo de la formulación final del proyecto, es muy probable que aumente la participación de los quintiles de más altos ingresos, con mayor propensión al ahorro.
