Cochilco destacó el incremento de los proyectos activos, que representaron un 45%
Un total de 101 compañías con proyectos de exploración en Chile identificó el “Catastro de empresas exploradoras 2020”, trabajo que desarrolla desde 2012 la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), caracterizando estas firmas de pequeña y mediana escala. Y aunque la cantidad es similar en los períodos previos, una de las diferencias que arroja la última versión de este documento es el número de proyectos activos, que durante este año representó un 45%, superior al 36% en 2019.
Según la entidad, un 45% de los 234 proyectos asociados a estas compañías reportó actividades durante el año, mientras que el 31% de estos se encuentran paralizados y un 24% fueron desistidos por las empresas.
El vicepresidente ejecutivo de Cochilco, Marco Riveros, puntualiza que, “si en 2018 destacó el número de proyectos desistidos, por sobre el leve aumento en los activos, esta condición se acentuó en 2019. En cambio, en este año predominan los proyectos activos”. Pero deja en claro: “Este presupuesto de exploración no alcanza aún a reflejar el efecto completo de la pandemia, lo cual se vería el próximo año”.
En este escenario, el presupuesto en exploración minera en Chile durante este año alcanzó los US$ 458 millones, cifra inferior en US$ 196 millones a la registrada en el período anterior, lo que representa una disminución del 30%. Si se analiza desde 2012, esta caída es la más relevante desde 2016, cuando el presupuesto de exploración nacional cayó 28%.
Este retroceso es consistente con la tendencia internacional, no obstante la resiliencia que ha mostrado el sector. El presupuesto para la exploración minera a nivel global llegó a US$ 8.328 millones, siendo un 10% menor al registrado el año pasado (US$ 9.285 millones), lo que es atribuible -según la Comisión- al contexto de la pandemia y la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Según explica Riveros, al comparar con el pasado, se puede observar ciertas similitudes respecto a lo acontecido posterior a la crisis subprime, cuando en 2009 el presupuesto de exploración en Chile cae 31% y el mundial un 42%. No obstante, “la caída de ahora se explica por una multiplicidad de factores, entre ellos el efecto de la pandemia, que se notará más en los presupuestos 2021, un mercado de commodities aún afectado, compañías que han avanzado en estudios de ingeniería de algunos proyectos que hace un par de años estaban aún en exploración”.
Otra razón para la baja en Chile, agrega Riveros, “puede estar relacionada al hecho que las compañías privilegiaron la continuidad operacional, con lo que se postergaron actividades como la exploración”.
Pese a lo anterior, Chile se mantuvo entre las naciones más importantes, conservando el cuarto lugar en el mundo, con un participación porcentual de 5% este año. “Si comparamos con otros países, se tiene que en China cayó 20,4%, Brasil disminuyó 20,3%, en México -18,7%, en Ecuador -11,6% y Perú -11,2%”, detalla Riveros.
Cochilco enfatiza que aún no es posible dimensionar en qué magnitud la crisis sanitaria afectó la exploración en el país. “En Chile se espera que el impacto sea menor debido a que la industria ha respondido bien, se ha mantenido operativa y sin mayores contratiempos. De todas formas, en los próximos meses será posible visualizar algún impacto, considerando que los meses de mayor actividad exploratoria son entre noviembre y enero, por temas de mejores condiciones meteorológicas en altura”, reconoce.
Consultado en relación a cómo se vislumbra la exploración en los próximos años, prevé que a partir de 2022 se verá una mayor actividad, ya que el próximo año aún se notarán los efectos de la pandemia, con presupuestos estables o una baja marginal.
“La atención se centrará en Perú, Ecuador o Brasil, países donde el impacto de la pandemia ha sido aún mayor que en Chile”, asegura.