A principios de mayo, comenzaron a reabrir más los grifos de oro negro ante la mejora de la crisis sanitaria, una estrategia gradual prevista hasta julio
Los precios del petróleo subían el lunes y el Brent operaba cerca de 70 dólares por barril, apuntalado por el positivo panorama para el crecimiento de la demanda de combustible el próximo trimestre, mientras los inversores esperan la reunión de esta semana de OPEP+ para ver cómo responderán los productores.
Los futuros del crudo Brent subían 69 centavos, o un 1%, a 69,41 dólares por barril, luego de tocar un máximo de sesión de 69,82 dólares. El petróleo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos ganaba 68 centavos, o un 1%, a 67 dólares por barril.
Ambos contratos están en camino a anotar una segunda alza mensual, ya que analistas esperan que el crecimiento de la demanda de petróleo supere a la oferta a pesar del posible retorno de las exportaciones de crudo y condensado iraníes.
"A pesar de las restricciones a la movilidad que aún existen, la demanda de petróleo se está recuperando dinámicamente en todo el mundo", dijo Commerzbank.
Irán ha estado en conversaciones con las potencias mundiales desde abril, trabajando en los pasos que Teherán y Washington deben tomar sobre las sanciones y las actividades nucleares para volver al pleno cumplimiento del acuerdo nuclear de 2015.
El lunes, el ministro de petróleo de Irán, Bijan Zanganeh, fue citado diciendo que Teherán puede alcanzar fácilmente una capacidad de producción de 6,5 millones de barriles por día (bpd) cuando se levanten las sanciones de Estados Unidos.
En tanto, la producción de crudo de Estados Unidos se disparó un 14,3% en marzo, informó el viernes la Administración de Información de Energía, mientras que los datos de Baker Hughes mostraron que las plataformas de petróleo y gas subieron por décimo mes consecutivo la semana pasada.
OPEP+ Producirá más
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) reúne el martes a sus miembros y diez aliados en un encuentro en el que decidirá probablemente aumentar de nuevo la producción para satisfacer la subida de la demanda.
A principios de mayo, los 23 —que dejan bajo tierra millones de barriles para no inundar un mercado debilitado por la pandemia del nuevo coronavirus— comenzaron a reabrir más los grifos de oro negro ante la mejora de la crisis sanitaria.
Pero se enfrentará a Arabia Saudita, un peso pesado del cartel partidario de la cautela que apoyará su posición en el resurgimiento de los contagios por COVID-19 en Asia.
A pesar de la reimposición de las restricciones de desplazamiento en varios países asiáticos, lo cual frenó el consumo de petróleo, "la demanda debería seguir aumentando con la intensificación de los viajes de verano en Europa y Estados Unidos", asegura Melinda Earsdon, de Oanda, "gracias al rápido despliegue de las vacunas" en estas regiones del mundo.
La OPEP también se muestra optimista sobre la recuperación de la demanda: el cártel mantuvo sus previsiones a principios de mes y espera un repunte de seis millones de barriles diarios este año con relación a 2020, hasta los 96,5 millones consumidos a diario en el planeta.
Esto (junto con el recorte voluntario de la oferta por parte del cártel y sus aliados) provoca un "saldo de crudo mundial claramente deficitario", según los cálculos de analistas de JBC, "de alrededor de tres millones de barriles por día en julio-agosto".
La OPEP no solo está atenta a la demanda de oro negro, sino que sigue de cerca la oferta de sus competidores, como Estados Unidos, el mayor productor mundial, y de sus propios miembros, un tema de discordia en las cumbres ministeriales.
Libia ha vuelto a producir gradualmente un millón de barriles diarios a finales de 2020 y la producción iraní volverá al mercado en un futuro más o menos cercano, "un punto de discusión clave", precisa Croft.
Si las negociaciones tienen éxito, el levantamiento de algunas sanciones económicas, como el embargo sobre el petróleo en vigor desde 2018, despejaría el camino para un aumento de la producción de casi 1,5 millones de barriles diarios si se compara el nivel actual de Teherán con el de hace tres años.