Forrest y Cannon-Brookes son los principales patrocinadores de Sun Cable
La empresa australiana Sun Cable avanza en sus planes para construir una infraestructura de 22.000 millones de dólares que suministrará electricidad generada por energía eléctrica a Singapur, a más de 5.000 km, a través de cables submarinos de alta tensión.
En concreto, la compañía acaba de cerrar una ronda de financiación en la que los multimillonarios australianos Mike Cannon-Brookes y Andrew Forrest han invertido us$ 152 millones de dólares estadounidenses para financiar su desarrollo. Cuando se inauguré en 2027, se convertirá en el cable submarino de corriente continua de alta tensión más largo del mundo.
El denominado proyecto Australia-Asia PowerLink tiene previsto crear un gigantesco "recinto solar Powell Creek" de 12.000 hectáreas a unos 800 km al sur de Darwin. El lugar, escogido por ser uno de los lugares más soleados de la Tierra, contará con la mayor instalación de generación de energía solar a nivel mundial (hasta 20 GWh) y una batería con capacidad para almacenar hasta 42 GWh de electricidad.
Forrest y Cannon-Brookes son los principales patrocinadores de Sun Cable. El primero de ellos es el fundador del productor de níquel Minara Resources y de la minera de hierro Fortescue Metals Group. Forrest ha invertido en Sun Cable a través de Squadron Energy, una filial de su empresa de inversión privada Tattarang. Para él, el proyecto de Sun Cable transformará la capacidad de Australia para "convertirse en el líder en generación y exportación de electricidad renovable a nivel mundial", según recoge Forbes.
Cannon-Brookes, por su parte, cofundó la empresa de software de colaboración Atlassian. En los últimos años, ha duplicado sus inversiones en energías renovables y otros proyectos sostenibles. Tiene previsto invertir más de 670 millones de dólares en el sector, además de los 670 millones que ya ha invertido a través de Grok Ventures. Sobre el proyecto Australia-Asia PowerLink, Cannon-Brookes asegura que es un modelo de cómo exportar energía limpia a todo el mundo.
Disminuye el atractivo económico de la energía solar
El año pasado, en Australia se instalaron 3,2 GWh de energía solar en tejados, lo que eleva el total a más de 16 GWh en 3 millones de sistemas en tejados. Gracias a este incremento, la generación de energía en el país representó el 31,4% del total de la electricidad producida, un nuevo máximo histórico y más del doble de la cuota registrada cuatro años antes.
Sin embargo, la reducción de los subsidios del gobierno federal y la aprobación de nuevas normas para limitar y controlar las exportaciones de energía están provocando que el atractivo económico de la energía solar disminuya. A todo esto hay que sumar, además, un aumento del tiempo que los hogares tardan en amortizar sus sistemas debido a las tarifas minoristas.
En 2022, el mercado solar residencial de Australia superará su pico del año anterior, aunque el deterioro de la economía reducirá las nuevas instalaciones y la capacidad anual caerá a 2,5 GWh, estima Leonard Quong, analista de Bloomberg. Según él, "es posible que los hogares dejen de ser un motor tan importante en la transición energética de Australia".
Pese a que la inversión en energía renovable a gran escala se ha reducido un 67% desde su máximo histórico en 2018, Quong se muestra optimista de cara al futuro. "Las ambiciones de los Estados por sí solas podrían hacer que Australia supere el 60% de suministro de energía renovable en 2035", sostiene.
YOUTUBE: EL PROYECTO SOLAR SUBMARINO DE SUNCABLE