Perú se ubicó en el último lugar en el Índice de Competitividad Minera debido a un peor desempeño en los pilares geológico y de entorno social, según reveló Gonzalo Tamayo, economista de la consultora Macroconsult, quien presentó dicho estudio en PERUMIN 35.

Durante su ponencia en Arequipa, el ex ministro de Energía y Minas precisó que en el 2019 el país se ubicó en el penúltimo lugar y este año retrocedió un escaño y se situó en el último puesto.

Dicho índice comparó al Pebrú con otros países también mineros como Australia, Canadá, Sudáfrica, Chile, México y Colombia, sobre cinco aspectos fundamentales: potencial geológico, política fiscal, infraestructura, regulación y entono social.

“La región ha perdido competitividad, no nos está pasado solo a nosotros; pero al Perú le está pasado con mayor fuerza. Tuvimos el desempeño más complicado, tal es así, que la percepción de ventaja geológica aparece muy golpeada”, dijo Tamayo en su presentación.

Los factores que explican esta caída en la competitividad tienen que ver con los indicadores de política fiscal, regulación y entorno social donde se evidenció que aún existe una brecha.

El estudio señala que el 90% de los encuestados del sector minero cree que los procedimientos para la aprobación de los permisos necesarios para desarrollar actividades mineras son complicados o muy complicados. Mientras tanto, un 67% cree que los conflictos sociales en torno a la minería están en una situación mala o muy grave.

Asimismo, destaca que la inversión en exploración minera migra a países con mayor seguridad jurídica que la que se percibe en Perú. En este indicador de inversión en exploraciones el país figura en el quinto lugar de los siete países analizados, con un 8% del total de recursos destinados a nivel mundial en el 2021 hacia la exploración (US$ 11.240 millones).

La menor percepción de seguridad jurídica es algo que ha empeorado de forma significativa entre el 2019 y 2022 en nuestro país, de acuerdo a datos del Instituto Fraser. Mientras que en 2019 un 58% de encuestados del sector respondió que la seguridad jurídica en Perú incentivaba la inversión, este 2022 apenas un 12% volvió a afirmarlo.

Sostuvo que la parte positiva es que se evitó el impacto en el aspecto tributario, sin embargo, aún hay una alta percepción de que los procedimientos son complicados. “Una inversión de largo plazo y requiere certidumbre y uno de los temas claves para el largo plazo es la tributación, a fin de tener un horizonte predecible”, comentó.

Asimismo, resaltó que, a pesar del entorno inflacionario, Perú ha mantenido su competitividad energética. “Nos va bien en costo de energía ya que hay disponibilidad de electricidad, gas y hay un potencial importante en energía eólica”, indicó.

En el aspecto de entorno social, el economista indicó que las tres principales razones que explican la conflictividad social son: la precariedad institucional, la falta de servicios públicos y falta de infraestructura básica, que, dijo, están vinculadas al Estado.

El Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) encargó a Macroconsult la elaboración de este nuevo estudio que fue presentado hoy a los convencionistas que asistieron a la Cumbre Minera. Esta herramienta permitirá establecer una línea de base, y con sus actualizaciones periódicas, apreciar sus tendencias en el futuro.

Claudia Cooper, presidenta de PERUMIN 35, en conferencia de prensa, remarcó que la caída no es un tema menor ya que una decisión de inversión se basa en una económica competitiva. “Sin competitividad no hay proyectos, y sin proyectos no hay recursos, y sin recursos no hay gestión social”, dijo.

En otro momento, economista de la consultora Macroconsult ,refirió que en el índice Fraser, Perú ha ido bajando sistemáticamente hasta ocupar el puesto 42, por debajo de Ecuador que está en el 24 y de Colombia que está en el 29.