NICOLINA LAMHAUGE
Mientras los países se reúnen en Bonn para las negociaciones climáticas de mitad de año, que comienzan el 16 de junio de 2025, para debatir un conjunto de indicadores propuestos para medir el progreso hacia el Objetivo Global de Adaptación, ¿qué conclusiones se pueden extraer de los marcos internacionales de presentación de informes existentes? Este blog destaca las lecciones de un nuevo documento del Grupo de Expertos sobre el Cambio Climático (CCXG) para que los negociadores las consideren a medida que avanzan en este proceso.
Hace casi una década, se estableció el Objetivo Global de Adaptación (OGA) con la adopción del Acuerdo de París, lo que refleja el compromiso de la comunidad internacional de mejorar la capacidad de adaptación, fortalecer la resiliencia y reducir la vulnerabilidad a los impactos del cambio climático. En 2023, se adoptaron 11 metas temáticas y dimensionales para guiar el logro del objetivo y se estableció un proceso para identificar indicadores que permitan evaluar el progreso. Un conjunto de indicadores propuesto por el grupo de expertos técnicos encargado de apoyar este proceso servirá de base para los debates durante las negociaciones climáticas de mitad de año en Bonn, que comenzarán el 16 de junio. Se espera que el conjunto definitivo se acuerde en la COP30 en Belém.
A medida que los países trabajan para perfeccionar el conjunto de indicadores en los próximos meses, ¿qué conclusiones podemos extraer de los marcos internacionales de información existentes? Un nuevo documento del Grupo de Expertos sobre el Cambio Climático (CCXG) describe algunas consideraciones clave para los negociadores.
Empezar a trabajar desde el principio o aprender haciendo
El desarrollo de un nuevo conjunto de indicadores inevitablemente plantea la cuestión de qué se debe medir y cómo. ¿Debería priorizarse lo que se puede medir con los recursos ya disponibles? ¿O deberían centrarse los esfuerzos en indicadores que generen información más relevante, incluso si inicialmente no se dispone de datos ni de la capacidad para informar sobre ellos?
Si bien la respuesta puede estar en un punto intermedio, será importante un enfoque iterativo con evaluaciones periódicas del enfoque adoptado para corregir el rumbo. Por ejemplo, el marco para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) incluyó inicialmente indicadores considerados útiles, pero sin metodologías ni estándares establecidos, los llamados "indicadores de nivel III". A través de ajustes anuales y dos revisiones exhaustivas, los indicadores de nivel III han madurado conceptualmente o han sido reemplazados, refinados o eliminados. Si bien un enfoque en nuevos indicadores puede guiar los esfuerzos en la recopilación de nuevos datos o el desarrollo de nueva capacidad, también se puede perder tiempo valioso en probar la viabilidad de indicadores que podrían no madurar. En comparación, el marco de presentación de informes del Marco Mundial de Diversidad Biológica Kunming-Montreal (KMGBF) se centró desde el principio en indicadores que pueden implementarse de inmediato.
Uniendo las piezas del rompecabezas
La evaluación del progreso hacia la Meta de Adaptación Global (GGA) dependerá de los informes nacionales presentados a la CMNUCC. La transmisión de información sobre las iniciativas de adaptación de los países, tanto a nivel local como nacional, al ámbito global requerirá: i) la integración de las metas de la GGA en los procesos nacionales de planificación de la adaptación (según corresponda, reflejando las circunstancias nacionales); ii) la inclusión de los próximos indicadores de la GGA en los sistemas nacionales de monitoreo, evaluación y aprendizaje; y iii) la presentación periódica de informes sobre los indicadores a través de los instrumentos de presentación de informes de la CMNUCC.
Dado que la presentación de informes sobre adaptación es voluntaria, es posible que no se informe toda la información relevante sobre los esfuerzos de adaptación de los países o que la información presentada no sea comparable. La experiencia de los Exámenes Nacionales Voluntarios de los ODS y la presentación de informes sobre las metas de biodiversidad de Aichi han demostrado que, cuando la presentación de informes es voluntaria y se basa en una lista indicativa de indicadores, será inconsistente, lo que limita su contribución a las evaluaciones globales del progreso.
Para abordar este desafío, el marco de monitoreo del KMGBF incluye cinco tipos de indicadores, de los cuales la presentación de informes sobre dos (es decir, los indicadores principales y los binarios) es obligatoria. Para limitar la carga de presentación de informes, los países pueden recurrir a los datos ya recopilados y gestionados por las denominadas organizaciones custodios; alternativamente, pueden presentar sus propios datos.
Si bien los países continuarán informando sobre adaptación a través de los instrumentos internacionales de presentación de informes establecidos, el uso de bases de datos globales cuando estén disponibles, y si los países desean utilizarlas, podría aumentar la armonización de los datos presentados.
Construyendo las herramientas para el trabajo
El desarrollo del conjunto de indicadores de la GGA requiere un enfoque complementario en el fortalecimiento de las capacidades de datos y estadísticas de los países para la presentación de informes. Las evaluaciones del progreso logrado hacia la GGA deben fundamentarse en la presentación de informes sobre los indicadores de la GGA que abarcan a todos los países, captando las necesidades y contribuciones de los diferentes segmentos de la sociedad y en todos los niveles de gobernanza.
Un obstáculo clave para dicha desagregación de datos, como se ilustra en la presentación de informes para otros marcos internacionales, es la disponibilidad de datos y las capacidades de presentación de informes estadísticos de los países. Por lo tanto, será importante la colaboración temprana con los sistemas estadísticos que facilitan la presentación de informes nacionales. En el caso de los Exámenes Nacionales Voluntarios de los ODS, la elaboración de hojas de ruta de datos ha facilitado una mayor participación de los sistemas estadísticos nacionales en la presentación de informes y ha apoyado el desarrollo más amplio de dichos sistemas.
¿Que sigue?
En Bonn, se espera que los negociadores proporcionen orientación sobre cómo perfeccionar el conjunto propuesto de indicadores de la GGA antes de la decisión final prevista para Belém. El CCXG seguirá apoyando a los países en este proceso, y las discusiones en el próximo Foro Global del CCXG sobre Medio Ambiente y Cambio Climático, que se celebrará los días 16 y 17 de septiembre de 2025, se centrarán en cuestiones relacionadas con los posibles indicadores de la GGA sobre los factores que facilitan la implementación de medidas de adaptación, incluyendo los medios de implementación.