La industria descendió 1,2% durante 2012. Es la primera recesión que registra el INDEC en diez años. En 2009, cuando ocurrió la crisis mundial y la mayoría de los analistas privados estimó una caída de la actividad local, el organismo oficial no solo no reconoció la recesión sino que publicó un crecimiento de 0,1% de la industria.
El INDEC explicó ayer que la caída de la actividad fabril en 2012 estuvo asociada a la menor producción en las industrias automotriz y siderúrgica. En cambio, el escenario fue distinto para las producciones textil y de alimentos, que cerraron el año con números positivos.
La contracción que midió el INDEC es menor a la de los privados. La consultora del ex viceministro de Economía, Orlando Ferreres, estimó que la baja del año pasado fue 1,9%. Y la Unión Industrial Argentina estima un retroceso de 2,1% en los primeros once meses de 2012.
La fabricación de vehículos descendió 6,6% y la menor actividad de las industrias de metales básicos (como aluminio crudo y acero) registró una pérdida total para todo el año de 8,7%.
El ex secretario de Industria y actual titular de la consultora abeceb.com, Dante Sica, asoció la caída de la industria a las menores exportaciones de autos a Brasil. El economista jefe de la consultora Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina, agregó que los controles a las importaciones impactaron negativamente porque dificultaron el acceso a los insumos a muchas compañías.
“Fue un año complicado tanto por la dinámica de Brasil, como por el estancamiento de las economías desarrolladas”, añadió Rodrigo Álvarez, director de la consultora Analytica.
También la sequía afectó. La molienda de cereales y oleaginosas descendió 6% durante el año pasado y la venta de maquinaria agrícola también cerró 2012 con números rojos.
Si bien 2012 fue un mal año para la industria automotriz y la de metales básicos, no sucedió lo mismo con las compañías vinculadas a la producción de alimentos (1%), textiles (3,2%) y productos químicos (2,9%). “El control cambiario y el cepo a las importaciones favorecieron, por ejemplo, al sector textil porque las dificultades para conseguir dólares frenaron el contrabando y el cepo, el ingreso de productos importados”, manifestó Sica.
¿Qué se puede esperar para la industria en 2013?
Para Sica, el crecimiento de la industria va a explicarse por cuatro sectores: la mayor producción automotriz, de máquinas para el campo, de agroquímicos y molienda. Para Álvarez también 2013 será más favorable. Y señala que dependerá de la demanda interna que de la externa.
“El crecimiento a tasas chinas quedó atrás, pero este año Brasil va a ser más pujante y el agro va a generar más dólares lo que permitiría financiar más importaciones”, agregó Sigaut Gravina. La consultora Orlando Ferreres&Asociados estimó que “la expectativa es más alentadora considerando que se espera una moderada recuperación de la industria brasileña y que el sector automotor está empezando a evidenciar tasas de crecimiento positivas en los últimos tres meses”.
La industria fue uno de los sectores que más puestos y de mejor calidad generó desde la salida de la convertibilidad. Sin embargo, y pese su participación en la economía es menor que en la década del noventa (ver página 2). Tampoco pude reducirse la dependencia que tiene la industria argentina de los bienes importados. En 2012 el sector en su conjunto importó más de lo que exportó. Y por eso registró un déficit comercial de U$S 24.000 millones.
La última recesión
En 2002, el año en que la Argentina abandonó la convertibilidad, la industria se contrajo 10,6%. De ahí en adelante, y hasta 2012, la actividad industrial creció nueve años consecutivos. Incluso en 2009, cuando según muchos analistas privados la economía entró en recesión, el INDEC registró para la industria un crecimiento leve (0,1%). La recesión de 2002 había sido precedida por tres años de contracción: entre 1999 y 2001 la caída acumulada fue de 14,4% según el organismo oficial.
A diferencia del 2009, cuando el país se vio golpeado por la crisis internacional pero los números oficiales no lo reflejaron, el Indec reconoció una caída de la industria en 2012. A partir de magros desempeños de los sectores automotriz y de metales básicos, el organismo estadístico informó que la actividad se derrumbó 1,2% durante el año pasado.
Si bien el número difiere del que postulan las consultoras privadas y las cámaras empresarias, no se encuentra tan alejado como en otros momentos. Para la UIA, hasta noviembre la industria acumulaba una merma de 2,1%.
Según el Indec, la actividad en diciembre mostró una disminución de 3,8% en términos interanuales y de 0,6% respecto del mes anterior. La central empresaria aún no publicó su cierre anual, pero sí lo hizo el estudio Orlando Ferreres & Asociados, cuyo Indice de Producción Industrial reflejó una caída de 1,3% en diciembre y de 1,9% durante todo el año.
Para el organismo de estadísticas oficial, la del 2012 fue la primera caída de la industria desde el 2002. Para el Gobierno, en 2009 la actividad no llegó a caer mostró un crecimiento de apenas 0,4%, mientras que para la UIA, ese año la actividad se derrumbó 5,9%.
La caída de 1,2% en 2012 estuvo explicada exclusivamente por dos sectores que mostraron mermas: el automotriz, que se cayó 6,6% afectado por la menor demanda brasileña a raíz de la crisis europea, y el de metales básicos, que se desmoronó 8,7% influido básicamente por la menor producción siderúrgica. También el resto del sector metalmecánico, excluido el automotriz, registró una baja del 1,6%.
El resto de los sectores mostraron alzas, aunque muy moderadas, lo que no ayudó a revertir la tendencia bajista. El sector alimenticio trepó 1%; la industria del tabaco, 6,6%; la textil escaló 3,2% en el año y los rubros de papel y cartón y edición e impresión crecieron 0,1% y 0,3% respectivamente.
En tanto, la refinación del petróleo registró un alza de 2,6%, mientras que la producción de sustancias y productos químicos fue 2,9% mayor que la del 2011. Los productos de caucho y plástico tuvieron una suba de 1,8% y los minerales no metálicos crecieron 0,1%.
La magra performance de la industria en el año se concentró, con mayor fuerza, en el segundo y tercer trimestre, cuando las caídas alcanzaron el 3,2% y el 2,5% respecto de los mismos períodos del año anterior. Los primeros tres meses del año habían sido alentadores (+2,3%) y el último reflejó una caída, pero de apenas 0,9%.
Expectativas
Si bien el 2012 fue un año negativo en términos de actividad debido a una mala cosecha agrícola y al contundente freno en el comercio exterior, para el 2013 las estimaciones prevén una mejora a partir del reacomodamiento de estas circunstancias que golpearon al país el año pasado. Para las consultoras privadas, la economía crecerá este año alrededor de 3% y la actividad industrial acompañaría esta tendencia.
De acuerdo con la encuesta cualitativa que realiza el Indec y que mide expectativas de las empresas, el 67,7% espera un ritmo estable en la demanda interna para el primer trimestre del año y el 19,8% prevé una suba. A su vez, el 58,3% de los encuestados estima que sus exportaciones se mantendrán estables y el 26,1% anticipa un aumento. Con respecto a las importaciones, el 72,3% de las firmas prevé un ritmo estable de las compras al exterior hasta marzo.
Los empresarios fueron contundentes al responder acerca de las proyecciones de incorporar personal. El 98,1% respondió que no advierte cambios y apenas un 1% estima que tomará gente. El 0,9% anticipa una baja.