EL ARI PORTEÑO ESTÁ EN CRISIS Y ESPERA ALGUNA SEÑAL DE CARRIÓ
Clarín, Buenos Aires
Hay dos grupos enfrentados. Y la candidatura de Enrique Olivera no despega.
Todos andamos interpretando a Lilita (Carrió), pero lo real es que nadie sabe qué es lo que quiere." Un legislador porteño reflexionaba así respecto a la incertidumbre que reina en el ARI Capital. El viernes vence el límite de presentación de listas para autoridades del distrito. "Puede haber internas, aunque Carrió no quiera", dijo otro diputado.
La crisis en el ARI porteño salió al descubierto en julio, con la renuncia de Fernando Melillo a las presidencias del bloque de legisladores porteños y del ARI-Capital. Días atrás hubo otro cimbronazo. "Vos sos un pelotudo o un corrupto", dicen que le soltó el legislador Juan Velasco a su compañero de bloque Facundo Di Filippo. Ocurre que un asesor de éste había presentado un recurso judicial para declarar la inconstitucionalidad de las llamadas "leyes del aire y del ruido", dos normas por las que había batallado Velasco. Di Filippo retiró el recurso, pero el episodio no terminó: el recurso llevaba la firma del asesor de Di Filippo Enrique Viale y de Eduardo Losoviz. Este último sería pariente de Horacio Losoviz, ex presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores, lo que echó a andar muchas especulaciones por los pasillos legislativos: las leyes en cuestión promueven acciones de control a las emanaciones de vehículos. "El diputado está en la Cumbre de Países No Alineados, vuelve la semana próxima", respondieron desde el despacho de Di Filippo.
Las elecciones de 2007 asoman como un interrogante de respuesta complicada para el ARI. La precandidatura a jefe de Gobierno de Enrique Olivera parece perder fuerzas. "Yo no tengo ninguna compulsión a ser candidato; lo seré si hay consenso suficiente en el ARI y los grupos de radicales e independientes que me acompañan", explicó Olivera, aún afiliado a la UCR.
Dos grupos podrían dirimir la interna para autoridades porteñas antes de fin de año. Uno de ellos está encabezado por Fernando Cantero (titular del bloque que suma 10 legisladores). Lo acompañan varios diputados. Desde aquí surgen voces muy críticas a Carrió. "Nos preocupa que coincida con Mariano Grondona o Patricia Bullrich", dicen. El otro sector podría candidatear a Fernando Sánchez, joven dirigente oriundo del Chaco. "Es el candidato de Carrió", comentan desde el otro lado. También dicen que el grupo de Sánchez se ganó el apodo de "cornalitos": "No les da para ser sushi", chicanean, en alusión al grupo que encabezaban los hijos de Fernando de la Rúa cuando era presidente.
Nadie puede garantizar que no haya más deserciones. "No estoy por armar un Partido Verde", se atajó Velasco, aunque reconoció que está por viajar a Europa, donde se contactará con diputados de partidos ecologistas, entre ellos, el mítico Daniel Cohn Bendit.
Ir solos o integrando alguna alianza se debate en el ARI. El panorama político porteño se presenta áspero: "En soledad, sin un candidato fuerte a jefe de Gobierno, el ARI va hacia una catástrofe electoral", auguran unos.
Otros ven complicado avanzar en alianzas: distintos sectores del centroizquierda coquetean con el oficialismo nacional o con Jorge Telerman; en el centroderecha, la figura de Mauricio Macri o de Ricardo López Murphy es indigesta para muchos dirigentes. "Nos hemos quedado sin espacio político", evaluaba con desánimo un legislador porteño. Mientras, Carrió insiste en que no es momento para desesperarse: "Es un tiempo importante de moderación, de silencio, de no ingresar a la confusión general ni a los extremos en los que se está debatiendo la política argentina", reflexionó días atrás.
