La inauguración de la mina Buriticá por parte de Zijin-Continental Gold en ese municipio del Occidente antioqueño, marcará un hito en la minería del país, ya que este yacimiento, cuando esté en plena producción, aumentaría hasta en un 25 % la extracción de oro en Colombia.
Al acto está invitado el presidente Iván Duque, quien hará un recorrido por una parte del complejo que hoy tiene 37,5 kilómetros de desarrollo subterráneo (cuatro veces el túnel de La línea), genera 2.318 empleos, terminará el año con una inversión de 610 millones de dólares y pagará en impuestos y regalías unos 3 billones de pesos en 14 años.
James Wang, director de Zijin-Continental Gold, le explicó a EL COLOMBIANO que la operación comercial plena de la mina arrancará en diciembre y se estima que en el primer año de actividades se producirán unas 240.000 onzas de oro (7,4 toneladas).
Según las cuentas de la empresa se espera que en su pico productivo totalice unas 300.000 onzas troy de oro (9,33 toneladas), volumen que equivale a una cuarta parte de la producción nacional alcanzada el año anterior que fue de 1,17 millones de onzas (36,6 toneladas).
Wang también resaltó el trabajo realizado con los mineros artesanales en la región. “Estamos trabajando con el Gobierno sobre la formalización, y sabemos que debemos trabajar más con este grupo de personas, entrenarlas, y tecnificarlas. Mi visión, es que podemos trabajar juntos para entender más sobre cómo extraer más mineral, y ejecutar otros proyectos. Es un proceso desafiante”.
En ese sentido, la compañía sostuvo que actualmente apalanca siete empresas de formalización integradas por personas de Buriticá que trabajan a través de subcontratos, con licencia ambiental.
El Espectador
Están vinculados 130 mineros, y se benefician unas 390 personas. Entre 2017 y 2019 estos grupos extrajeron 2.726 onzas de oro (84,7 kilos), sumando una facturación de 5.232 millones de pesos.
En el futuro al oro de Buriticá deberán sumarse los recursos de otros jugadores relevantes del sector en este departamento como Mineros que extrajo 296.444 onzas (9,2 toneladas en 2019) y Gran Colombia Gold que reportó 239.991 onzas (7,4 toneladas).
Desde la óptica de Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), la entrada en operación del complejo es un hito en la sostenibilidad económica del país.
“Esta nueva operación es un ejemplo de minería moderna, tecnificada y con los mayores estándares sociales, ambientales y de seguridad. Para el sector, significa un incremento en la producción legal de oro: la que paga impuestos, regalías, aporta al desarrollo local a través de inversión social y ambiental, genera empleo de calidad e impulsa el encadenamiento productivo de la región”, declaró.
A su turno, Jorge Jaramillo Pereira, secretario de Minas de Antioquia, resaltó que cuando se alcance una producción de nueve toneladas de oro, esta representará un aumento del 45 % en la extracción de ese metal en el departamento, que ha estado en unas 20 toneladas por año desde 2017.
“La importancia de Buriticá es que es minería moderna, tecnificada, que genera actualmente empleo para 2.138 personas. Lo relevante para el Occidente antioqueño radica en los encadenamientos productivos y el desarrollo de proveedores locales”, expresó el funcionario.
Desde el 2017 cuando arrancó la construcción y montaje de la mina, Zijin ha adquirido productos y servicios por unos 35.000 millones de pesos en la zona y ha apoyado a 332 proyectos productivos en Buriticá y localidades aledañas como Santa Fe de Antioquia, Giraldo, Frontino y Cañasgordas.
El experto del sector minero, Eduardo Chaparro Ávila, mencionó que la inauguración de la mina de Buriticá pone fin a un largo periodo de malas noticias para el sector minero colombiano, que en el primer semestre del año se contrajo un 12,1 %.
“Esto demuestra que la minería bien hecha, independiente de su tamaño, es factible, productiva, útil y necesaria para el desarrollo del país, más aún en una época de crisis como la actual. Es el rey de oros de la minería colombiana en este momento”, concluyó.
Según el informe Colombia. Explotación de oro de aluvión. Evidencias a partir de percepción remota 2018, presentado por el Ministerio de Minas y Energía, el 66 % de las evidencias detectadas, que corresponden a más de 64.700 hectáreas, son de explotación ilícita de oro de aluvión.
El informe también afirma que la explotación ilegal de oro de se encuentra concentrada en tres departamentos: Antioquia, Chocó y Bolívar, con el 88 % del total nacional.
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Informe Ministerio de Minas y Energía
Por otro lado, los departamentos con presencia de alertas por evidencias de explotación de oro de aluvión (Evoa) en agua son Amazonas, Guainía, Caquetá, Putumayo, Vaupés, Guaviare y Cauca, especialmente en los ríos Apaporis, Caquetá, Cotuhé, Inírida, Negro y Atabapo.
Informe Ministerio de Minas y Energía
El informe también resalta que la explotación ilegal en tierra, el 52 %, se encuentra en las zonas excluibles de minería o protegidas ambientalmente, las cuales corresponden a territorios de protección y desarrollo de recursos naturales renovables y ambientales, donde la ley determina que no se pueden ejecutar obras de exploración y explotación minera.
El Gobierno Nacional encontró actividad ilegal en el Parque Nacional Natural Puinawai y en el Parque Nacional Natural Farallones de Cali. Asimismo, se encuentran en riesgo los parques nacionales naturales de Paramillo, Munchique, Serranía de los Churumbelos y Acandí Playón.
Por otro lado, los parques de Serranía de Chiribiquete, Yaigojé Apaporis, Cahuinarí, Amacayacu y Puinawai están en alerta por presencia de actividades de minería ilegal en agua.
Una de las conclusiones que arrojó el informe fue que la explotación de oro de aluvión sucede en territorios ambiental y socialmente vulnerables, donde la ilegalidad se expresa de diferentes maneras; en el 43 % de los territorios con Evoa, también se identificó la presencia de cultivos de coca.
Actualmente, el Gobierno Nacional se encuentra trabajando en un proyecto para que los mineros transiten hacia la legalidad, con el cual se pretende crear herramientas para facilitar el paso de alrededor de 27.000 mineros, de los cuales 12.000 ya se encuentran en proceso..
El ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, explicó que el proyecto de ley es necesario, pues con las reglas de juego actuales las autoridades deben demostrar la gravedad del daño ambiental producido para que la actividad sea considerada explotación ilícita, no se castiga el uso del mercurio a pesar de que está prohibido y no hay relación entre estas actividades ilegales con los delitos de lavado de activos o de financiación del terrorismo.
Así, pues, el proyecto de ley que deberá hacer su curso en el Congreso busca que se pueda judicializar solo por explotar minerales sin permiso de la autoridad competente y la pena mínima del delito pasaría de 2 a 5 años. Según explicó Mesa, la explotación ilícita de minerales tendrá más penas cuando financie al terrorismo.
Además, el proyecto crea el delito de “comercialización, beneficio y transporte de minerales con origen ilegal”, se penaliza el uso del mercurio y se endurecen penas en todas estas conductas, incluido cuando se realicen en parques naturales o zonas protegidas.
Por su parte, el ministro de Minas, aseguró que “la minería ‘con todas las de la ley’ cumple con altos estándares técnicos, sociales y ambientales, y genera recursos que se traducen en obras y beneficios para el país y las regiones. Por el contrario, la explotación ilícita de minerales atenta contra el medio ambiente, se apropia de recursos de todos los colombianos y es una de las principales fuentes de financiamiento del crimen organizado”, recalcó.
Con un portafolio de 33 proyectos priorizados que atraerán más de $36 billones en inversiones y con una generación estimada de 54.000 oportunidades de empleo en los próximos años, el sector minero energético se convierte en pieza clave en la reactivación de la economía.
Durante la Novena Versión de Colombia Genera, organizada por la ANDI, el ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, destacó la importancia del sector en la reactivación sostenible del país. La minería y energía aporta el 7% del PIB Nacional, representa el 34% de la Inversión Extranjera Directa y el 56% de las exportaciones.
Un año después de la subasta de contratos de largo plazo que le permitirá a Colombia avanzar en en la Transición Energética, y pasar de tener menos de 50 megavatios de capacidad instalada a más 2.500 megavatios en energía solar y eólica. Este tipo de energía pasará de participar en la matriz energética de menos del 1% a más del 12% en 2022.
Recuerda el ministro Dias que esta mayor participación de las energías verdes será conseguirá tras la ejecución de los 14 proyectos adjudicados en la subasta. Son nueve iniciativas de tecnología eólicas en La Guajira y cinco solares en Cesar, Córdoba, Valle del Cauca y Tolima.
Estos proyectos se complementan con la construcción de 16 proyectos de transmisión, con inversiones por US$360 millones, y una gran apuesta por el almacenamiento de energía a través de baterías. Este será el primer sistema de este tipo en Colombia y deberá comenzar a operar en el primer semestre de 2022 en Barranquilla.
Teniendo en cuenta que la pandemia ha traído dificultades adicionales que pueden afectar la caja de las industrias, el ministro Diego Mesa también anunció que, junto con la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), se emitirá una resolución que ampliará en un año el plazo para que los usuarios, en su mayoría industriales, realicen las inversiones necesarias para bajar los niveles de energía reactiva.
Para contribuir a la diversificación de la canasta minera, se tiene ocho proyectos que generarán más de 12.000 puestos de trabajo y atraerán inversiones por US$4.500 millones.
Junto con la Agencia Nacional de Minería (ANM), se lanzará en 2021 un Proceso de Áreas Estratégicas, que incluirá 37 bloques potenciales ubicados en Tolima, Cesar, La Guajira y Antioquia, con el fin de dar un gran dinamismo al sector en Colombia, explicó Diego Mesa.
En hidrocarburos, el ministerio de Minas y Energía indicó que en noviembre se realizará el Proceso Permanente de Asignación de Áreas (PPAA) y en el primer trimestre de 2021 se llevará a cabo por parte de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) un cuarto ciclo.
Adicionalmente, en el propósito de diversificar la oferta de gas y asegurar el suministro de este combustible esencial a todos los colombianos, la gran apuesta será la construcción de la Planta de Regasificación del Pacífico. Los pliegos definitivos de este proyecto, que incluye el gasoducto Yumbo – Buenaventura, quedarán en firme a finales de octubre y la audiencia de adjudicación será en marzo de 2021.
