China ha emitido silenciosamente sus primeras cuotas de minería y fundición de tierras raras para 2025 sin la típica declaración pública, dijeron esta semana fuentes con conocimiento del asunto, otra señal de que Beijing está reforzando su control sobre el sector crucial.

Las cuotas se vigilan de cerca como barómetro del suministro mundial de tierras raras, un grupo de 17 elementos utilizados en vehículos eléctricos, turbinas eólicas, robots y misiles. China es el mayor productor mundial de estos minerales y el gobierno suele otorgarlas dos veces al año a empresas estatales, pero este año se han retrasado.

El gobierno emitió el primer conjunto de cuotas del año apenas el mes pasado, sin el comunicado público habitual, según las fuentes, y una de ellas indicó que se les indicó a las empresas que no compartieran las cifras por razones de seguridad. Estos detalles se publican aquí por primera vez.

Las fuentes no dieron los volúmenes de cuota.

China se muestra cada vez más sensible a las tierras raras y a su control sobre el suministro, algo que ha estado dispuesta a afirmar en medio de sus discusiones comerciales con Estados Unidos y la Unión Europea.

Beijing agregó varios de los elementos e imanes relacionados a su lista de restricciones de exportación en represalia por los aumentos arancelarios estadounidenses, cortando el suministro y obligando a algunos fabricantes de automóviles fuera de China a cerrar parcialmente la producción.

En los cuatro años anteriores, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de China emitió el primer lote de cuotas en el primer trimestre del año en un anuncio en su sitio web.

El Ministerio no respondió inmediatamente a una solicitud enviada por fax para que comentara por qué no se había publicado la información.

El año pasado, China emitió dos lotes de cuotas mineras por 270.000 toneladas métricas, y el crecimiento anual de la oferta se desaceleró al 5,9% desde el 21,4% en 2023.

La cuota de fundición y separación en 2024 también fue en dos lotes, por un total de 254.000 toneladas, un 4,2% más que en 2023.

Beijing ha utilizado el sistema de cuotas, introducido por primera vez en 2006, y la consolidación corporativa para dominar la industria y dar a los funcionarios control sobre la producción.

Beijing ha restringido el acceso a las cuotas, de modo que solo dos grupos estatales –China Rare Earth Group y China Northern Rare Earth Group High-Tech– fueron elegibles el año pasado, en comparación con los seis anteriores.

Las cuotas se retrasaron este año en parte debido a una propuesta en febrero para agregar mineral importado al sistema de cuotas, lo que provocó la oposición de las empresas que dependen de las importaciones y estaban preocupadas de que pudieran perder el acceso a la materia prima, según las dos fuentes y una fuente adicional con conocimiento del asunto.