Se interrumpió la paz entre los trabajadores de la mina Casposo cuando la firma que tiene el proyecto a cargo, Troy Resources, presentó un procedimiento de crisis que podría dejar sin trabajo al 60% de los empleados.

“La empresa plantea dificultades económicas que le impide mantener la planta total del personal y expresa la necesidad de alguna reducción. Son cerca de 500 los empleados y se quiere despedir a 300, pero no está acordado y se hará un esfuerzo con AOMA para que no suceda”, aseguró desde la subsecretaría de Trabajo el titular Roberto Correa Esbry. En el gremio, su secretario general, Iván Malla, confirmó que los obreros están en una etapa de incertidumbre hasta que no se aclare la situación, porque “se está en este cuarto intermedio que no pueden despedir empleados y al gremio tampoco le permiten hacer reclamos”.

La situación genera inquietud porque es un momento en el que está todo en pausa, dado que ninguna de las partes puede tomar alguna medida hasta que no haya un acuerdo. “Es un período de negociación de la empresa con el sindicato y si llegan a un acuerdo la subsecretaría de Trabajo puede homologarlo o no, siempre y cuando lo justifiquen”, explicó Correa Esbry. Mientras tanto en AOMA no ponen el grito en el cielo porque todavía es algo que sólo se planteó y hasta que no se defina, o no transcurra el plazo permitido, no pueden dejar ni un trabajador en la calle. 

De todas maneras desde la Subsecretaría confirmaron que buscarán la manera de evitar los despidos. “Eso se verá la próxima audiencia, el 19 de noviembre, donde AOMA aceptaría o no la propuesta o buscará otra alternativa como reducción de jornada o suspensiones”, dijo el funcionario. 

Los empleados sí resolvieron presentar por escrito el rechazo a este pedido de procedimiento de crisis y también lo someterán a audiencia. “Si se le hace lugar a ese pedido gremial, se da por concluido el procedimiento sin acuerdo”, dijo Correa Esbry.

Desde el gremio aseguraron que hubo algunos despidos durante el año y fueron trabajadores de otras provincias. “De los que había a principio de año ahora hay un 90%”, dijo Malla.

En Casposo hay actualmente unos 500 empleados, agremiados unos 300 en AOMA y otros 90 en ASIJEMIN. Desde esta entidad, su secretario general, Marcelo Mena Muñoz, aseguró que no hubo un comunicado oficial desde la empresa, “pero en cuanto lo hagan vamos a buscar la manera de preservar la continuidad de nuestros trabajadores”. 

Desde Troy Resources no respondieron las consultas de este medio.