Preocupación y molestia ha causado en la población de Antauta (Melgar, Puno), donde opera Minsur, por la reaparición de un grupo de asesores que estarían implicados en diversos conflictos mineros, y que serían los responsables de paralizar los acuerdos que la minera coordina con la población.
Según el diario Los Andes, estos asesores estarían liderados por Miguel Valdivia, allegado al alcalde de Antauta, Marco Soto Vilca.
El reclamo de la población no cesa. No sólo reclaman que se lleve a cabo la mesa de diálogo con la minera, sino que reclaman además la actuación del alcalde y el desvío de fondos para promover estos grupos que persiguen un interés económico en desmedro de la población.
Como se recuerda, ya el año pasado, el alcalde de Antauta fue duramente emplazado por la población debido a la contratación de estos mismos asesores, cuya función fue construir la controversia contra Minsur y promover la movilización social en demanda de parte de sus utilidades. En aquel entonces, el burgomaestre señaló que estos servicios se pagaban mediante “polladas”; según el Correo, sin embargo, durante la última sesión de la mesa de diálogo, realizada el 14 de junio pasado, Soto Vilca admitió que Valdivia y compañía eran “asesores municipales”.
Además del dispendio de recursos, lo que preocupa a la población son los antecedentes de Valdivia ya que en la zona es conocida su injerencia en diversos conflictos suscitados en la región. El caso más recordado es el ocurrido en el distrito de Ocuviri (Lampa), donde fue asesor del alcalde Cosme Cari Huaynacho en el conflicto contra la minera Ciemsa que derivó en la muerte de dos efectivos policiales. El servicio de Valdivia, por el que cobró cerca de S/. 30,000 según el portal de Transparencia, habría sido el de concientizar a la población para que se movilice contra la empresa. Al asesor se le critica el hecho de atizar controversias luego de haber sido encargado de la Oficina de Diálogo del gobierno regional durante la gestión de Mauricio Rodríguez.
“Acá ya no queremos más paros ni que hayan muertos, queremos trabajar en paz”, señala una pobladora de Antauta que por seguridad prefiere mantenerse en el anonimato. “Esos asesores no son bienvenidos y vamos a pedir explicaciones al alcalde”, añade.
Como se recuerda, Minsur mantiene una mesa de diálogo con los dirigentes del llamado Comité de Gestión de Convenio Marco, quienes exigen el 10% de las utilidades dela empresa, entre otros pedidos.
La última Mesa de Diálogo, lamentablemente, estuvo plagada de insultos y nuevas pretensiones de frustrar el proceso de diálogo.
El diario local indicó que los dirigentes “propusieron” una lista de personas interesadas en laborar en la mina San Rafael, pedido que fue rechazado por la población por “favorecer solo a allegados”. La respuesta airada vino del dirigente Edmundo Alarcón, quien lanzó terminos insultantes contra una de las pobladoras que observó el padrón, indicó el Correo.
Por su parte, la empresa reiteró su propuesta de incremento gradual de empleo local y mejora de la empleabilidad a través de becas, capacitaciones y certificaciones. Informaron quienes realizaban el estudio para determinar la oferta laboral sufrieron amenazas y agresiones.
Alberto Rubina, jefe de Gestión Social de San Rafael aseguró que la compañía tiene toda la voluntad de presentar una propuesta técnica sustentada, pero que acciones como las amenazas a los consultores, así como los memoriales intimidatorios contra los programas sociales de la empresa, “demuestran poca voluntad de diálogo de la otra parte”.
La mina San Rafael es la de mayor producción de estaño en el Perú. La empresa desde hace años viene desarrollando diferentes programas sociales y de desarrollo, pero las actuales autoridades piden un nuevo convenio donde exigen el pago anual de utilidades.
Desde la oficina de Gestión Social de la mina San Rafael, el jefe Alberto Rubina, explicó que Antauta y Minsur ya cuentan desde hace varios meses con una Mesa de Desarrollo avalada por la oficina de diálogo de la PCM, mediante la cual se vienen implementado una serie de proyectos de desarrollo local.
Cita como ejemplo el programa ganadero que beneficia a más de 2000 familias con la mejora genética de las alpacas y la implantación de diversas obras de infraestructura hidráulica. Asimismo menciona programas de articulación al mercado, cercos ganaderos, Sierra Productiva, acceso a internet, mejora de la calidad educativa, nutrición y diversas campañas de salud, entre otros.
“Hay diálogo y hay programas de desarrollo concertados con los actores del distrito. Hemos invitado al alcalde a que se sume a este espacio de diálogo y desarrollo”, afirma Rubina.
Con respecto al convenio marco, el funcionario insiste en que el camino más eficiente y transparente es el de la concertación de proyectos sostenibles. “El convenio marco, con las condiciones que plantea de entregar dinero, no es viable para nosotros”, señala. Entre sus argumentos, indica que no es política de la empresa transferir dinero en efectivo, que el esquema que plantean no responde a proyectos identificados y que no existe un sustento legal que ampare este tipo de solicitudes.
“Tenemos objetivos comunes con el alcalde y la población de Antauta, por qué no aprovechar un espacio plural, avalado por el Estado y que muestra resultados, como es la Mesa de Desarrollo”, apunta Rubina.
- Antauta es uno de los distritos con mayores ingresos en la región Puno, producto del canon minero.
- La demanda de la firma de un convenio marco se inició en la gestión municipal anterior, que planteaba la entrega de US$ 600 millones y el 25 % de las utilidades anuales a la empresa, a cambio de permitírsele operar normalmente.
- El pedido no fue avalado por las autoridades del Estado: Oficina de Diálogo de la PCM o Ministerio de Energía y Minas por carecer de sustento legal.
