Al margen del precio de ambos metales, existen algunas diferencias clave que pueden ayudar a que los inversores se decidan por uno u otro
Los metales preciosos son una opción de inversión adecuada para momentos de incertidumbre, como el que se presenta en el mundo actual, tras la pandemia. Lo más habitual es invertir en oro o plata.
Un reciente informe del banco de inversión estadounidense Morgan Stanley incide en las diferencias entre invertir en oro y plata, y establece hasta cinco factores que distinguen a los dos metales.
1. La plata está más vinculada a la economía global
La mitad de la producción global anual de plata se utiliza en la industria pesada y en el sector tecnológico. Por este motivo, es mucho más sensible a los cambios que se registran en la economía global que el oro, cuyos principales usos son la inversión y joyería.
Así, cuando se produce un despegue del crecimiento de la economía mundial suele producirse un incremento de la demanda de plata.
2. La plata constituye una mejor protección frente a la inflación
Históricamente, tanto el oro como la plata registran ganancias importantes cuando la inflación se incrementa en los Estados Unidos. El precio de ambos metales está denominado en dólares, así que cuando cae el valor de la divisa estadounidense, lo habitual es que los dos metales suban de precio, ya que resulta más barato adquirirlos con otras divisas.
Debido al mayor tamaño de la demanda industrial, la plata tiende a subir de precio en mayor medida que el oro cuando la inflación aumenta y cae el valor del dólar.
3. La plata es más volátil que el oro
La volatilidad del precio de la plata puede ser de dos a tres veces superior que la del oro en un día concreto. Aunque los traders pueden beneficiarse de ello, esta mayor volatilidad puede ser un desafío a la hora de gestionar el riesgo en una cartera de inversión.
4. El oro tiene un mayor poder como elemento diversificador que la plata
La plata se considera un buen elemento de diversificación de la cartera de inversión, con una correlación moderadamente positiva con las acciones, los bonos y las commodities.
Sin embargo, el oro es un elemento diversificador más potente, ya que no tiene correlación con las acciones y mantiene una muy baja correlación con otros activos. La razón es que, a diferencia de la plata y otros metales industriales, el oro se ve menos afectado por el empeoramiento de la economía, debido a que su uso industrial es bastante limitado.
5. La plata es mucho más barata que el oro
La plata es más barata que el oro, por lo que resulta más accesible a los pequeños inversores. Para aquellos que están empezando a construir una cartera de inversión, el bajo coste de este metal preciosos lo convierte en la mejor elección.