LAURA SANICOLA

Una avalancha de plantas diésel renovables en EE.UU. que entrarán en funcionamiento en los próximos tres años no será suficiente para compensar la pérdida de capacidad de refinación de diésel de petróleo por el cierre de plantas desde 2019, según muestra un análisis de Reuters de datos federales.

La capacidad de refinación de EE.UU. ha disminuido en los últimos dos años, ya que las plantas cerraron durante el comienzo de la pandemia de coronavirus, lo que provocó un aumento de los precios. Varias plantas se están convirtiendo en instalaciones que pueden producir diésel renovable de combustión más limpia, pero al menos por ahora, esas instalaciones no reemplazarán por completo esos barriles refinados.

Hay al menos 12 proyectos de diesel renovable por un valor de más de US$ 9.000 millones en construcción, con otros nueve propuestos. Se espera que las 12, junto con las plantas existentes, produzcan unos 135.000 barriles por día (bpd) de diésel renovable para 2025, según datos de la EIA, frente a los 80.000 bpd actuales.

Sin embargo, desde 2019, la capacidad de producción de diésel se ha reducido en un total de aproximadamente 180.000 bpd, según la Administración de Información de Energía de EE.UU., y al menos una refinería más de EE.UU. cerrará el próximo año, lo que reducirá aún más la producción. Además, aquellas refinerías preparadas para producir diesel renovable tampoco producirán más gasolina o combustible para aviones.

A nivel mundial, se han perdido alrededor de 400.000 bpd de capacidad combinada de diésel, combustible para aviones y fueloil desde 2019, según cálculos de datos de la EIA.

El diesel renovable está hecho de grasas animales, desechos de alimentos y aceites vegetales, pero es químicamente equivalente al diesel a base de petróleo. Se puede producir en equipos de refinería existentes, pero el rendimiento es menor que con diésel. 

El biodiésel, otro diésel de origen vegetal, debe mezclarse con petróleo para funcionar eficazmente en la mayoría de los motores, aunque algunas flotas de camiones pueden funcionar con biodiésel al 100%.

La creciente demanda y las pérdidas de las refinerías han llevado los precios del diésel a niveles récord. El precio minorista del diesel estadounidense aumentó un 80% este año a US$ 5,78 por galón estadounidense, y los bajos inventarios aumentaron el potencial de escasez. Las existencias estadounidenses de destilados, incluido el diésel, han bajado un 19% respecto al año anterior.

Se planea alrededor de 1 millón de bpd de nueva capacidad de refinación de petróleo en los próximos cinco años en Asia, Medio Oriente y la costa del Golfo de EE.UU. Pero los expertos dicen que las nuevas empresas son difíciles de predecir debido a los retrasos en la construcción, los cambios en la demanda del mercado y la financiación.

Las refinerías de EE.UU. se unieron al carro de los combustibles renovables hace dos años cuando la pandemia redujo drásticamente la demanda de combustible y las presiones ambientales llevaron a varios a elegir la descarbonización en lugar de cerrar las instalaciones.

La refinería de 166.000 bpd Martinez, California de Marathon Petroleum (MPC.N) y la refinería Rodeo de 120.200 bpd de Phillips 66 (PSX.N), también en California, se convirtieron en instalaciones de diésel renovable. Combinados, producirán 100.000 bpd de diésel renovable para 2023.

HF Sinclair convirtió una refinería de Cheyenne, Wyoming, de 52.000 bpd para producir 6.000 bpd de diésel renovable. La antigua refinería Come-by-Chance de Canadá tiene como objetivo comenzar a producir 18,000 bpd de combustibles renovables para 2024.

"Estos proyectos deberían traer barriles incrementales en los próximos años, pero no ahora cuando serían más necesarios", dijo Ravi Ramdas, director gerente de la consultora energética Peninsula Energy.

Las ganancias de los combustibles renovables han sido impulsadas por los estados, encabezados por el Estándar de combustible bajo en carbono de California, que recompensa a los productores con créditos negociables para producir combustibles renovables.

Sin embargo, los créditos ahora se cotizan a alrededor de US$ 80 por tonelada, frente a los US$ 200 por tonelada en 2020, cuando se propusieron la mayoría de estos proyectos. Los reguladores de California están considerando actualmente si requieren que el estado reduzca la intensidad de carbono de los combustibles para el transporte en una cantidad mayor, lo que podría impulsar los precios de los créditos.

Aún así, las refinerías estadounidenses dicen que no están dando marcha atrás en los proyectos de diésel renovable.

El costo de los aceites vegetales utilizados para producir diésel renovable también se disparó tras la invasión rusa de Ucrania. El aceite de soya, una materia prima de refinería popular, aumentó un 40% año tras año, mientras que el petróleo crudo aumentó más del 60% en ese tiempo.