Según la Perspectiva de las Transiciones Energéticas Mundiales 2023 de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), la forma más realista de corregir el rumbo de la trayectoria de 1,5 ° C es triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética para 2030. El hidrógeno verde tiene un papel importante que desempeñar para ayudar a alcanzar ese objetivo.

En los últimos años, el hidrógeno verde ha sido defendido como el combustible del futuro, gracias a su reputación como fuente de energía limpia, almacenable y portátil. Su alta densidad energética lo hace ideal para alimentar procesos industriales que consumen mucha energía y que son difíciles de electrificar y de reducir en sectores como la aviación y el transporte marítimo.

Existe una necesidad apremiante de aumentar la demanda pasando de compromisos y promesas a proyectos reales. Sin embargo, los avances en la cooperación internacional para establecer objetivos globales para la creación de demanda han sido limitados. Aquí es donde debería entrar el marco político.

A la luz del próximo informe de IRENA, la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) y el Instituto Alemán para el Desarrollo y la Sostenibilidad (IDOS), los oradores en el Centro Global de Renovables de la COP28 discutieron cómo los formuladores de políticas pueden impulsar la creación de cadenas de valor locales en torno a la producción de hidrógeno verde.

A partir de estos conocimientos, las necesidades específicas de cada país podrán abordarse posteriormente mediante proyectos y cooperación.

“Se necesitan soluciones innovadoras para reducir los riesgos de las inversiones para impulsar el hidrógeno verde a nivel mundial. Estas soluciones pueden abrir el camino para que el hidrógeno nos ayude a alcanzar los objetivos de cero emisiones netas. Estoy muy contento con esta cooperación, que ha dado como resultado un informe extenso y esclarecedor que esperamos pueda ayudar a acelerar la adopción del hidrógeno verde”, dijo Gunther Beger, director gerente de la ONUDI. 

“El desarrollo del hidrógeno verde tiene el potencial de generar beneficios socioeconómicos, como la creación de empleo, que nos gustaría ver más en el mundo en desarrollo. Esperamos que nuestro informe conjunto pueda arrojar luz sobre cómo los responsables políticos pueden abordar los desafíos que enfrenta el hidrógeno verde”, agregó Ute Collier, directora interina del Centro de Conocimiento, Políticas y Finanzas de IRENA.

Los países del Sur Global tienen las claves para una producción sostenible de hidrógeno verde, ya que tienen el mayor potencial para producirlo. Al priorizar el uso sobre la exportación y alinear la producción de hidrógeno verde con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, los países pueden liberar las oportunidades que este vector energético puede ofrecerles, como señala Rita Strohmaier de IDOS. Después de todo, explotar los beneficios del hidrógeno verde acelera la transición energética.

Sin embargo, aumentar la producción de hidrógeno verde no está exento de consecuencias. Una mayor producción de hidrógeno verde equivale a una mayor extracción y consumo de agua. A medida que aumenta la demanda mundial de hidrógeno, la extracción total de agua dulce podría triplicarse para 2040 y sextuplicarse para 2050.

La escasez de agua puede ejercer presión sobre el sector energético y es probable que continúe ocurriendo y se vuelva más frecuente a medida que se intensifiquen los fenómenos meteorológicos extremos, especialmente en las zonas más adecuadas para la producción de hidrógeno verde. 

En las regiones donde el agua es escasa (para reducir el uso de agua y potencialmente reducir los costos), otro nuevo informe de IRENA recomienda el uso de tecnologías de enfriamiento eficientes en el uso de agua, como el enfriamiento por aire.

Desarrollado con Bluerisk y lanzado en la COP28, "Water for Hydrogen Production" ofrece recomendaciones personalizadas para guiar a los responsables políticos y a la industria hacia prácticas más eficientes en el uso del agua. 

Esto incluye realizar evaluaciones exhaustivas de los riesgos hídricos y establecer regulaciones estrictas sobre el uso del agua, para garantizar un crecimiento sostenible en la industria del hidrógeno, preservando al mismo tiempo los recursos hídricos escasos y compartidos y minimizando las perturbaciones que podrían surgir de los riesgos climáticos o la competencia por el uso del agua.

“Se espera que el hidrógeno desempeñe un papel importante en la transición energética que nos permitirá alcanzar el objetivo climático de 1,5 ° C. Este informe tiene como objetivo iniciar una conversación entre los responsables políticos, los líderes de la industria y las comunidades hacia una producción y un uso del hidrógeno más informados y sostenibles”, agregó Collier.

El análisis en profundidad del informe da como resultado un conjunto de recomendaciones específicas. El principal de ellos es el llamado a los gobiernos para que den prioridad al hidrógeno basado en energías renovables en el establecimiento del mercado del hidrógeno.

“La extracción y el consumo de agua deben considerarse indicadores de desempeño del hidrógeno verde. Nuestro informe recomienda regulaciones e incentivos financieros para favorecer proyectos que demuestren eficiencia, priorizando la sostenibilidad del agua y la energía”, completó Tianyi Luo, director de Bluerisk.