Grupo AGVGSB ROTATIVO MININGgolden arrow
JMB Ingenieria Ambiental - RINFA ENCABEZADOCONOSUR ENCABEZADOPWC LOGO MINING PRESS
Induser ENCABEZADOWICHI TOLEDO ENCABEZADOWEG
CAPMINMANSFIELD MINERA HVELADERO ENCABEZADOKNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADO
OMBU CONFECATJOSEMARIA ENCABEZADOBANCO SC ENCABEZADOSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
FERMA ENCABEZADOERAMET CABECERA
SACDE ENCABEZADOglencore PACHONNEWMONT COVID
RIO TINTO RINCONHIDROAR ENCABEZADOSECCO ENCABEZADO
CRISTIAN COACH ENCABEZADOEXPO SAN JUAN ENCABEZADOBANCO SJ ENCABEZADOPRELAST
ABRASILVER ENCABEZADORUCAPANELEPIROC ENCABEZADO
CERRO VANGUARDIAEXPO LITIO ENCABEZADOLITHIUM SOUTH
ALEPH ENERGY ENCABEZADOMETSO CABECERAEXAR ENCABEZADO
ARCADIUM LITHIUMMilicic ENCABEZADO
MAPAL ENCABEZADODELTA MINING
PIPE GROUP ENCABEZADMINERA SANTA CRUZPAN AMERICAN SILVER
EVENTO LITIO ENCABEZADOCINTER ENCABEZADOVIALES SANTA FE ENCABEZADO MINING
MERCADOS
La geopolítica del gas lo lleva al peor mes en tres años
DIARIOS/ENERNEWS
01/07/2022

El gas natural se convirtió en un arma de guerra desde la invasión de Rusia en Ucrania. Cada nueva pieza que se mueve en el orden energético global impacta en los mercados y complica la negociación de contrato y el abastecimiento.

La amenazas de los cortes de Rusia se hacen realidad como también la ofensiva de Occidente para presionar hacia el fin de la invasión. En Europa cualquier medida impacta derecho, días atrás Alemania decretó una "emergencia energética" y ahora se le suman otros países dentro de la UE.

Los futuros del gas natural de EE.UU. se desplomaron por debajo de los 6 dólares por millón de unidades térmicas británicas, luego de que un informe de inventario mostrara una acumulación de almacenamiento mayor a la esperada, lo que generó temores de un mercado con exceso de oferta.

Los futuros de Henry Hub cayeron un 16,53% para cerrar en 5,42 dólares por millón de unidades térmicas británicas. El contrato terminó junio con un 33% menos, que fue el peor mes desde diciembre de 2018.

España no era tan crítica como en países del centro y este de Europa por su menor dependencia del gas ruso, el Gobierno se ha sumado oficialmente a la advertencia del riesgo que existe de que el próximo invierno no haya gas suficiente para abastecer a todos y de tener que elegir entre empresas y hogares para asegurar el suministro. La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha incidido en el Congreso en la necesidad de "fortalecer planes nacionales de contingencia y las política de ahorro y de plantear medidas para el hipotético caso de que fuera necesario priorizar entre consumidores la disposición de recursos energéticos".

 

Ribera ha calificado la situación energética de "preocupante" tras el recorte continuado del gas que envía Gazprom a la UE, después de que Alemania haya elevado su nivel de alerta y de que las tres principales compañías energéticas de Francia hayan pedido a los franceses que "minimicen sus consumos desde ya". 

Según informó 20 minutos, en julio, la Comisión Europea presentará un plan de medidas de ahorro de energía a los Estados miembros, que de momento España solo aplica a las oficinas públicas. 

Para prepararse, los países de la UE tendrán que llegar al 31 de octubre con un 90% de la capacidad de sus almacenes de gas natural "para pasar el invierno con tranquilidad". Ribera ha asegurado en el Congreso que, "en estos momentos, los almacenes subterráneos en España están al 72% y  los de gas natural licuado, en torno al 80%", cifras enormemente positivas en comparación con Francia (57%), Italia (55%) y Alemania (42%).

Gráfico: ¿Qué alternativas al gas ruso hay para Europa? | Statista

 

La Administración de Información de Energía de EE. UU. dijo el jueves que el inventario para la semana que terminó el 24 de junio aumentó en 82.000 millones de pies cúbicos.

David Givens, jefe de servicios de energía y gas natural para América del Norte en Argus Media, dijo que la empresa pronosticaba una construcción de 76.000 millones de pies cúbicos, según una encuesta de expertos.

“El número 82 fue bajista en ese sentido”, dijo, y agregó que la acumulación de almacenamiento se está acercando a niveles normales.

Campbell Faulkner, vicepresidente senior y analista jefe de datos de OTC Global Holdings, señaló la “sensibilidad del equilibrio de oferta y demanda en el que se encuentra el gas natural para la temporada de demanda de refrigeración de verano”.

 

“El gas ha sido una exportación de productos básicos de gran importancia, y las quemas de energía han sido sólidas durante el primer semestre de 2022. Cuando el producto básico tiene niveles de precios tan altos debido a la escasez percibida, cualquier indicador fundamental hará que el producto básico oscile violentamente hacia arriba o hacia abajo”. él dijo.

La UE se prepara ante el posible cierre total del grifo de gas ruso

 

Parte de la debilidad de este mes también se debe a que Freeport LNG anunció a principios de junio que su instalación de Quintana Island, Texas, estaría fuera de línea por más tiempo de lo esperado después de un incendio.

El anuncio provocó que los futuros del gas natural cayeran más de un 16% en el día , ya que los operadores temían un mercado con exceso de oferta.

La operación de Freeport representa aproximadamente el 17% de la capacidad de procesamiento de GNL de EE. UU. Una cantidad récord de GNL de EE. UU. ha ido a Europa en los últimos meses a medida que el bloque busca alejarse de la energía rusa. La demanda de GNL, a su vez, impulsó los precios de Henry Hub.

 

La Administración de Seguridad de Oleoductos y Materiales Peligrosos dijo el jueves que no se permitirá que la instalación regrese a sus operaciones normales hasta que PHMSA lo considere seguro.

“Como resultado de la investigación preliminar, parece que existen condiciones en las instalaciones de exportación de GNL de Freeport que representan un riesgo para la integridad de la seguridad pública, la propiedad o el medio ambiente”, dijo la agencia en un comunicado.

A pesar de las fuertes caídas de junio, el gas natural sigue subiendo más del 40% para 2022.

John Kilduff, socio de Again Capital, señaló que si bien los niveles de almacenamiento aún están más de un 10 % por debajo de los niveles del año pasado, “estamos en la zona de ser manejables ahora”. Agregó que la perspectiva meteorológica para el noreste apunta a condiciones templadas hasta mediados de julio.

Los precios del gas natural superaron los 9 dólares por MMBtu en mayo, alcanzando el nivel más alto desde agosto de 2008.

¿ÁFRICA, LA SOLUCIÓN?
En el contexto de la invasión rusa de Ucrania, la Unión Europea ha iniciado una búsqueda desesperada de sustitutivos para el carbón, el petróleo y el gas natural. En el documento programático REPowerEU, la Comisión Europea plantea “hacer a Europa independiente de los combustibles fósiles rusos antes de 2030”. Para ello prevé, en primer lugar, trabajar con “socios internacionales para encontrar suministros alternativos de energía”, como el gas natural que descansa en el subsuelo de algunos países africanos.

Según informó The Conversation, el gas natural no solo se exporta: también tiene un uso creciente dentro de los países africanos. Muchos consideran que constituye una fuente fundamental de transición para asegurar el desarrollo. El gas en bombonas puede sustituir a fuentes de energía más contaminantes como la leña o el carbón general, con un empleo muy extendido en los hogares africanos y con perjudiciales efectos en la salud de las familias.

El uso fundamental, en un continente con niveles muy bajos de electrificación, es el de la generación eléctrica. Está práctica es ya una realidad en países como Ghana, que mientras exporta la mayor parte de su petróleo a los mercados internacionales, utiliza el gas para alimentar su infraestructura eléctrica. El gas natural tiene además el potencial de surtir tanto a los mercados nacionales como a los regionales a través de gaseoductos.

Actualmente el Gasoducto de África Occidental atraviesa los territorios de Nigeria, Benin, Togo y Ghana, y otro une a Sudáfrica con Mozambique. Además existen proyectos en el mismo sentido: como el que proveería de gas a Uganda desde Tanzania y el Gaseoducto del Renacimiento Africano, que sería el segundo entre Mozambique y Sudáfrica. Por último, Nigeria sería el origen tanto del Gaseoducto Transahariano que llegaría Argelia como del que conectaría Nigeria con Marruecos. La importancia de estos dos gaseoductos es que se podrían enlazar con las redes gasísticas europeas.

Pero ¿son compatibles estos dos proyectos de extraversión y de integración? ¿Puede aumentarse el suministro de gas africano para Europa, y al mismo tiempo suministrar energía a los hogares y al sector productivo africanos? ¿Cómo se combinan con la transición energética justa reclamada por tantos en África y en Europa?

Hay quienes piensan que todos estos objetivos son convergentes. El argumento fundamental es que el creciente interés europeo conllevará las inversiones que son imprescindibles para extraer y poner en valor esta fuente de energía. Asimismo, se afirma que las exportaciones de gas a Europa proporcionarán recursos adicionales para que los Estados africanos puedan invertir en desarrollo. Hay razones, sin embargo, para no ser tan optimistas.

 

Los riesgos del gas natural
+Las necesidades energéticas de África son inmensamente superiores a las europeas. Por mucho que pueda aumentarse la producción y disponibilidad de gas en un momento determinado, la exportación siempre se traducirá en la disminución de un recurso no renovable. Ello se puede convertir en una hipoteca para la estrategia a medio y largo plazo en las aspiraciones de electrificación e industrialización en África.

+Las infraestructuras necesarias para la exportación de gas no son las mismas que se requieren para alimentar las redes eléctricas o suministrar bombonas de gas a las familias del continente. Las primeras tienden a generar las denominadas economías de enclave.

+Desde otra perspectiva, grupos ecologistas en el continente recuerdan que el gas es un combustible fósil que contribuye al cambio climático. Por lo tanto, cualquier inversión en gas reduce los recursos que deberían ir destinados a la promoción de las energías renovables. El interés europeo podría demostrarse también transitorio, en tanto que la Unión Europea mantiene como objetivo reducir drásticamente su dependencia de los combustibles fósiles para 2030.

+Como otros recursos naturales del subsuelo, el gas tiende a generar efectos políticos perversos en países con débiles contratos sociales entre gobernantes y gobernados. En concreto, las rentas generadas por la venta del gas pueden servir para reforzar el poder y el patrimonio de quienes ocupan el Estado, más que para financiar los servicios públicos y el desarrollo económico.

Es cierto que la fortaleza del contrato social y de las instituciones del Estado diverge mucho de unos países africanos a otros. Pero los socios exteriores no distinguen entre gobiernos más o menos democráticos. No deja de ser paradójico que la búsqueda europea de autonomía energética respecto de un autócrata, como es Vladimir Putin, pueda acabar reforzando a otros.

Dilemas futuros
En un momento de tensión como el actual, será difícil que los líderes africanos y europeos atiendan a alguna de estas razones para descartar los planes de alimentar a Europa con más gas africano. Por fortuna, eso no impedirá que también se avance en la segunda y la tercera de las estrategias planteadas por en el documento REPowerUE: el ahorro energético y la aceleración de la gran transición hacia las energías renovables.

África también puede desempeñar un gran papel en la producción de estas energías limpias tanto para el consumo interno como para la exportación. Pero ello tampoco estará exento totalmente de dilemas en el futuro. Veremos entonces cómo equilibran los gobernantes africanos los intereses de los inversores internacionales y las necesidades de sus propios ciudadanos.


Vuelva a HOME


*La información y las opiniones aquí publicados no reflejan necesariamente la línea editorial de Mining Press y EnerNews

KNIGHT PIESOLD DERECHA NOTA GIF 300
Lo más leído
PODER DE CHINA
AGUA Y MINERIA
NOTA MÁS LEIDAs MP GIF
VENEZUELA