LUCIANA PAZ
El cobre se convirtió en la zanahoria de Argentina en la misión comercial en Londres. Con una industria que quiere pasar de tener "potencial" para convertirse en una realidad, el secretario de Minería de Nación, Luis Lucero y algunos gobernadores provinciales fueron parte del "Argentina Day" en el marco de la LME Week 2024.
Mientras el país aprovecha la consolidación de los proyectos de litio, se esperanza con la promesa de que esta vez sea el turno del cobre. No depende de la extensa geología, que es real, sino que está anclado al atractivo que pueda ser el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) y la estabilidad que pueda prometer.
El Secretario de Minería explicó que “la minería se percibe más favorable que nunca” y detalló que “Argentina tiene mucho que ofrecer en términos de recursos, y un sistema notablemente libre para acceder a concesiones mineras de cobre y litio, a diferencia de Chile y Bolivia”.
Tras la reglamentación del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) se incrementó el interés de inversores internacionales en la cartera de proyectos y el potencial geológico que tiene la Argentina, con especial atención en el cobre y el litio. Esto se debe principalmente a la demanda global de los minerales críticos esenciales para la transición energética que experimenta el mundo.
En ese sentido, el Secretario de Minería recordó que “el RIGI rápidamente obtuvo apoyo tanto del Poder Ejecutivo como del Legislativo en varias provincias”. Lucero destacó que “nunca antes una herramienta como el RIGI, relacionada con inversiones y ahora asociada a la minería, había obtenido un apoyo tan amplio ni había despertado tanto interés en la población en general”.
Mariana Plaza y Kirsty Hayes, Embajadoras de Argentina y Reino Unido, abrieron el primer panel dando la bienvenida. Luego, el Secretario de Finanzas, Pablo Quirno, presentó el panorama macroeconómico de nuestro país.
Los cinco gobernadores que integran la Mesa del Litio y la del Cobre: Carlos Sadir, de Jujuy; Gustavo Sáenz, de Salta; Raúl Jalil, de Catamarca; Marcelo Orrego, de San Juan; y Alfredo Cornejo, de Mendoza, mostraron los beneficios para invertir en cada una de las provincias.
Los gobernadores hablaron sobre las inversiones que existen en sus provincias, la disponibilidad de mano de obra capacitada y cómo se trabaja en materia de licencia social. Para mayor claridad se focalizó en los desafíos que enfrentan los potenciales inversores y cómo se los puede ayuda a comprender la normativa existente y las oportunidades que genera nuestro país.
Mendoza resurgió en el mapa de la minería tras varios tropiezos. El gobernador, Alfredo Cornejo, afirmó que en los últimos años, Argentina ha perdido la oportunidad de desarrollar la minería, especialmente en lo que respecta a los minerales metalíferos, como el cobre, a diferencia de lo que ha hecho Chile con los mismos recursos naturales que posee Mendoza. “Compartimos la cordillera, lo que hace lógico que tengamos un potencial similar”, afirmó Cornejo. Además, destacó que mientras Chile lleva más de 100 años impulsando esta actividad, en Argentina “nos hemos dejado estar”.
Salta está en constante camino por fortalecer el desarrollo de la minería y mejorar la condiciones para los inversores, proveedores y comunidades. Su variedad geológica y la claridad en las reglas impositivas y fiscales, le valieron el puesto como la mejor provincia para invertir según el ráking Fraser.
Gustavo Saenz, “Hoy más que nunca entendemos que Argentina es una oportunidad para el mundo porque el mundo demanda lo que Argentina tiene”, añadió Sáenz al tiempo que resaltó el Régimen de Incentivo a Grandes Inversiones (RIGI), al que Salta adhirió junto a otras provincias para aquellos que decidan invertir. Lo definió como una herramienta clave “que fortalece nuestro atractivo para la inversión internacional y que brinda beneficios cambiarios y aduaneros”. Y agregó “esto viene acompañado por la seguridad jurídica, celeridad, estabilidad fiscal, un marco legal sólido y licencia social que se logra conservando y cuidando el ambiente”.
El Gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, destacó que todas las provincias están trabajando en el mismo sentido en cuanto a la licencia social que se requiere para realizar minería en la Argentina. Además, puso en valor la participación de las autoridades nacionales y provinciales en este evento, porque les permite promocionar y atraer inversiones.
Carlos Sadir, de Jujuy remarcó que “Venimos trabajando de una manera prudente, muy responsable, y buscando una manera de facilitar las cosas para que las empresas puedan establecerse y trabajar cómodamente”. Sumado a la infraestructura que les permite, prácticamente, llegar a los distintos proyectos y a las instalaciones que han realizado.
Marcelo Orrego, gobernador de San Juan, enumeró los tres temas en los que hay una demanda enorme y la competencia es extraordinaria, que son conectividad, transición energética y energías renovables. San Juan es el segundo productor de oro y el primero de cal, como también el segundo productor de vinos, detrás de Mendoza. Otro dato importante es que el 50% de los paneles solares construidos o por construirse se encuentran en esa provincia.
“La minería para nosotros es una locomotora. Es una política de Estado que tiene más de 20 años, y se consolidó en la década del 2000. Es clave la explotación responsable de los recursos naturales”, sostuvo.
Los gobernadores mantuvieron reuniones de negocios con representantes de Codelco, BHP y AngloAmerican plc.
El cambio de gobierno y las promesas de regulaciones eficientes volvieron al cobre el target de las inversiones. A pesar del potencial geológico la inestabilidad fiscal, económica, cambiaria e impositiva postergaron el desarrollo del "metal rojo" que globalmente entra con furor en la escena de la transición.
Mientras Argentina refresca las potencialidades del cobre y apuntala el desarrollo del litio, golpeado por la caída de los precios internacionales, no debe olvidarse del oro que, por el momento, sostiene la balanza comercial minera.
Mientras las minas de oro caminan hacia su declino natural, los precios internacionales suben y sostienen la menor producción pero es necesario, al igual que pasa con el cobre, que se dé el impulso de proyectos.
Buscar inversores para aprovechar el estrellato del cobre sin olvidar la diversidad geológica.